Opinión

Mahayub Salek – ('La línea o camino del mártir')

Miguel Ángel Ortíz Asín. Presidente del Foro Canario-Saharaui (FOCASA)

El pasado día 9 del actual mes de octubre, se han publicado en el “El Correo” del Pais Vasco, bajo el epígrafe: «La elite del Polisario es muy corrupta y los que trabajan con ellos lo saben» unas interesantes declaraciones de Mahayub Salek, uno de los primeros seguidores de El Ouali Mustafa Siyed, fundador y primer secretario general del Frente Polisario, al periodista Gerardo Elorriaga.

En su exposición ha revelado como con sus primeras creencias “nacionalistas” dejó su vocación cultural para el empeño de las armas, comenzando a luchar contra España primero y Marruecos después para la consecución de la independencia del Sahara. Cambió de nuevo el “kalashnikov” por un micrófono cuando Argelia abrió una radio en favor de la causa. Pero su lucha se tornó en su contra a la muerte de su líder El Ouali Mustafa, alias “Luley”.

Con los responsables de la nueva dirección del Frente, fue encarcelado durante seis meses y a su regreso a los campamentos descubrió violaciones de derechos humanos entre los suyos. Lo que le influyó en no querer aceptar el regreso a la emisora “queriéndole hacer acallar lo que sucedía allí”, y que por su negativa y su posición insistentemente intolerable se produjeron las consecuencias de padecer la privación de libertad durante siete años en los que permaneció sin comunicarse con nadie. 

Mahayub Salek, es uno más de los saharauis que, con las convicciones idealistas de que el Frente Polisario era un movimiento de solidaridad con el pueblo saharaui, ha podido comprobar y es un testigo de excepción, como otros que sufrieron las consecuencias de la cárcel, torturas y violaciones de DDHH, en los campamentos, de que eso es una falacia, de que los dirigentes del Polisario se han instalado desde siempre en la subordinación al gobierno argelino, y de que su preocupación degeneró en la consecución de su fortuna personal. «La elite es muy corrupta y las asociaciones que trabajan con ellos lo saben y no quieren contarlo o son tan corruptas como ellos». Actualmente después de haberse exilado tras su encarcelamiento, a través de Mauritania en España, ha ejercido como profesor de Filología Árabe, y fundador del movimiento Jat Achahid ("la línea o camino del mártir") en 2004, hostil al Polisario y que hoy se encuentra más cerca de las tesis marroquíes al defender "una autonomía o el federalismo".

Mahayub Salek, que en su residencia en el Pais Vasco (Vitoria) se encuentra precisamente en un ambiente poco propicio para asimilar las denuncias que se presentan en contra de los dirigentes del Polisario, por su inclinación en favor del grupo pro-independentista saharaui, se reunió con un grupo del Parlamento, sorprendiéndose de tantos años de colaboración ante esa realidad, «Ya basta de ladrones y de jugar con nuestro destino», lamenta Salek que muestró un vídeo con imágenes de la presunta residencia de uno de los dirigentes del Polisario”.

«Queremos recuperar nuestra tierra, no vivir en un lugar donde se puede llegar a los 56 grados, donde alguien puede ser azotado por un paquete de arroz y nadie dice nada cuando otro se lleva un camión de arroz, donde los jóvenes se van a Malí a unirse a las bandas terroristas porque sienten que no hay futuro». 

El Fórum Canario Saharaui, en consonancia con las declaraciones de este relevante saharaui, quiere hacer constar que converge con las declaraciones y denuncias efectuadas, habiendo publicado en numerosas ocasiones, declaraciones, comunicados o ruedas de prensa que coinciden con lo expresado en esta ocasión, y aunque en principio podría ser difícil hacer creíble una "tercera vía" o solución intermedia como la que propone el movimiento Jat Achahid, es desde luego una opción a ser considerable para tratar de resolver el contencioso que perdura desde hace mas de cuarenta años. La población saharaui no puede quedarse indefinidamente en campamentos miserables en tierra argelina, más parecen rehenes en manos de los argelinos que refugiados libres de movimientos.

En interior de los campamentos, en contra de lo que se quiere hacer creer, no hay esa libertad democrática que pretenden transmitir las “siglas” de la supuesta RASD, ya que “Jat Achahid” no es la única organización discrepante del Frente Polisario que ha surgido en los campos, hay otros como, la reciente creación de la ‘Juventud del 5 de marzo’, la ‘Iniciativa para el cambio’, impulsada por antiguos ministros, el movimiento de la fracción de Oulad Daud, el frente de los “artistas disidentes” y otros que reivindican, demandas de democracia y justicia, que se celebren elecciones libres y se investigue el paradero de los desaparecidos.

Por último, el movimiento de Salek, reclama abrir conversaciones con Marruecos. «Hay que buscar una solución que mitigue el sufrimiento, que la gente decida qué quiere, si desea permanecer en el desierto otros 45 años».