Aumentan un 27% las víctimas infantiles en Afganistán

El número de niños muertos o heridos como consecuencia del conflicto en Afganistán ha aumentado un 27%, en comparación con el mismo período del año pasado. Del 1 al 30 de abril, se han registrado 414 niños muertos debido al conflicto, frente a los 327 registrados durante el mismo período del año anterior. Este fuerte incremento provoca una gran preocupación.
 
El informe del Secretario General de las Naciones Unidas sobre los niños y los conflictos armados, dado a conocer esta semana, revela que 1.304 niños murieron en Afganistán en 2012 como resultado de las acciones de todas las partes en el conflicto. Estas muertes son inaceptables y el aumento registrado en los primeros meses de 2013 resulta muy preocupante.
 
La mayoría de las muertes de niños vinculadas al conflicto se han producido por ataques con artefactos explosivos improvisados ​​(IED, por sus siglas en inglés) -incluyendo ataques suicidas-, instigados por grupos armados de la oposición.
 
La semana pasada, el 3 de junio, un ataque suicida cerca de una escuela en la provincia de Paktia provocó la muerte de diez niños e hirió a otros siete. Al día siguiente, en la provincia de Farah, un padre y sus tres hijos murieron cuando su vehículo fue alcanzado por artefactos en una carretera. A finales de esa semana, el 6 de junio, un ataque aéreo en la provincia de Kunar por parte de las fuerzas militares internacionales provocó la muerte de tres niños e hirió a siete más.
 
Estos trágicos incidentes, y los muchos otros que no se denuncian, sirven para recordar los efectos devastadores que está provocando el conflicto en los niños de Afganistán, y también la necesidad urgente de ponerle fin.
 
UNICEF vuelve a pedir a todas las partes en el conflicto a que aumenten sus esfuerzos para garantizar que las vidas de los niños, las mujeres y otros civiles sean protegidas en todo momento, de conformidad con el derecho internacional humanitario. Esto incluye cambiar compromisos y patrones que permiten que haya niños en la línea de fuego y que los exponen a muerte y heridas.
 
El organismo insta a todos los grupos armados de la oposición a cumplir con la prohibición de usar tácticas indiscriminadas que no distinguen entre civiles y combatientes. Esto incluye ataques suicidas y la colocación de artefactos explosivos improvisados ​​en las zonas comunes donde los niños y otros civiles puedan estar.
 
De esta maneral, UNICEF hace un llamamiento a las fuerzas militares internacionales y al Gobierno de Afganistán para que sigan revisando las tácticas y procedimientos relativos a las operaciones militares, especialmente las aéreas, para evitar víctimas civiles, incluyendo niños.

Envíanos tus noticias
Si conoces o tienes alguna pista en relación con una noticia, no dudes en hacérnosla llegar a través de cualquiera de las siguientes vías. Si así lo desea, tu identidad permanecerá en el anonimato