Ban Ki-Moon recuerda al mundo la crisis humanitaria de los refugiados saharauis

Atalayar

El secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki-moon, visitó los campamentos de refugiados saharauis en el sur de Argelia el sábado como parte de los esfuerzos para reanudar las negociaciones para poner fin a la disputa entre el movimiento independentista Polisario y Marruecos sobre el territorio del Sáhara Occidental. Un conflicto que permanece estancado desde el alto el fuego de 1991 mediado por la ONU.

En esta visita, Ban Ki-moon mostró su intención de reactivar el diálogo, que incluiría el regreso de los refugiados saharauis que llevan más de 40 años en los campos de Tinduf (Argelia) pero lamentó que las partes del conflicto del Sahara Occidental no hayan avanzado en la búsqueda de una solución política duradera y mutuamente aceptable. En sus palabras, Ban recordó que los campamentos de refugiados saharauis son de los más antiguos del mundo y que era doloroso ver familias separadas durante tantos años. “Esta situación es inaceptable y debe ser tratada de forma independiente del proceso político”, subrayó.

Otra de las paradas de Ban Ki-moon en esta visita fue la sede y unidades de la MINURSO (Misión de la ONU para el Referéndum en el Sahara Occidental) que se encarga de supervisar el alto el fuego, así como de la organización de un referéndum de la ONU de autodeterminación en ese territorio, que el Consejo de Seguridad ha venido solicitando desde 2004.

Entretanto, Marruecos ha presentado un plan para la autonomía, mientras que la posición del Frente Polisario es que el estatus final del territorio debe ser decidido en un referéndum de autodeterminación que incluya la independencia como una opción.

Ban llamó a los países donantes a que aumenten su asistencia a esta población y les pidió demostrar que el mundo se acuerda de la población saharaui. En ese sentido, informó que convocará a una reunión de donantes en Ginebra.

Al concluir sus declaraciones, el Secretario General subrayó que la Cumbre Mundial Humanitaria que se celebrará en Estambul en mayo, constituirá otra oportunidad para movilizar la solidaridad mundial para esta causa.

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