Marruecos se indigna por la leve condena a un pederasta

 

Impotencia, indignación y rabia, son las palabras que resumen el estado de ánimo de muchos marroquíes tras enterarse por los medios de que un pederasta de Marrakech que el pasado mes de junio fue detenido por abusar de un niño, fue condenado a dos años de cárcel y a una multa de 10.000 dirhams (unos 950 euros). Una sentencia muy leve para tan grave delito. El pederasta fue detenido por unos vecinos en su tienda y entregado a la Policía. Uno de los testigos de la detención grabó un vídeo en el que se ve al pederasta suplicar a sus vecinos para que no llamen a la Policía. Otro testigo le dice: “Es imposible. Es muy grave lo que has hecho. Has abusado de un niño, si todavía hubiera sido una niña, vale. Pero ¿te das cuenta de lo que has hecho? Has abusado de  un niño”. El vídeo  fue ampliamente difundido a través de las redes sociales. Muchos internautas denunciaron el acto cometido por el tendero pederasta y las opiniones de una de las personas que lo detuvo. Varios medios digitales marroquíes colgaron el vídeo. Ocurrió hace poco más de dos semanas. El juicio al delincuente sexual fue rápido, pero el veredicto dictado por el Tribunal de Primera Instancia de Marrakech, leve, según piensan muchos marroquíes. La ONG ‘No toques a mis hijos’, que lleva años luchando contra la pederastia en Marruecos, denunció la sentencia y consideró que es “una vergüenza” para el país. La portavoz de ‘No toques a mis hijos’, Najia Adib, señaló que la sentencia “es un escándalo para las asociaciones, para la Justicia y para Marruecos”. “La pederastia es un delito penal, y no entendemos esta forma de proceder” de la Justicia, declaró a los medios Adib. Según los artículos 485 y 486 del Código Penal marroquí, el delito de pederastia es sancionado con una pena de cárcel que oscila entre 10 y 20 años. La condena es especialmente severa cuando  la víctima tiene  menos de 10 años. El menor que sufrió abuso sexual en  Marrakech tiene 9 años y su agresor, 57. 

 

Najia Adib no entiende que la pena de cárcel para el pederasta sea la misma que si hubiera sido detenido por la Policía por robar en su supermercado. La asociación que dirige y preside Adib presentó un recurso contra la sentencia dictada por el tribunal de Marrakech. ‘No toques a  mis hijos’ opina que el veredicto es “tan leve e indulgente que incita a los pederastas a cometer delitos”. También denuncia “la mentalidad machista y una sociedad hipócrita” que considera que abusar de una niña no es tan grave como abusar de un niño. Marruecos es un país donde los abusos sexuales a menores son frecuentes y en muchos casos no se denuncian. Algunas ciudades turísticas como Marrakech se han convertido en una suerte de paraíso para pederastas y todo tipo de depredadores sexuales europeos y occidentales. Muchos de estos delincuentes, entre los que se encuentran ciudadanos españoles, viajan a Marrakech y a otros ciudades del país para cometer sus canalladas. La sociedad empezó a reaccionar en los últimos años y  surgieron colectivos, como ‘No toques a mis hijos’, que piden a los poderes públicos que actúen  con mayor contundencia contra la pederastia y otros delitos sexuales.