Rajoy asistirá a la cumbre de la UA en plena expansión empresarial española en África subsahariana

Redacción Atalayar
Foto: África subsahariana es una región en expansión que atrae a los inversores españoles. 
El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, viajará  a Malabo (Guinea Ecuatorial), el próximo 26 de junio, como único líder de la Unión Europea (UE) para asistir a la cumbre de la Unión Africana (UA), según anunció el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo.  La visita de Rajoy a Guinea Ecuatorial es la primera de un presidente español en los últimos 23 años. El jefe de la diplomacia española consideró que la participación de Rajoy en esta cumbre de la UA “está más que justificada”, porque se trata de una reunión “extremadamente importante”. África, según García-Margallo, constituye una “altísima prioridad de la política exterior española”. Los motivos son esencialmente económicos, porque las exportaciones españolas al continente africano están creciendo a un ritmo del 6% anual, mucho más que hacia América Latina. Además, algunos países africanos crecen vertiginosamente y necesitan de los capitales europeos y del mundo emergente para seguir desarrollándose. Después de haberse asentado en el Magreb, las empresas españolas se vuelcan en el resto de África. En 2013, el mayor avance mundial exportador español se produjó  en Sudáfrica, un 56% interanual. África se convirtió en la tercera región mundial por crecimiento de compras a España, tras Oriente Próximo y Asia. África  subsahariana recibió más de la cuarta parte de las ventas españolas al continente en 2012. África es un nuevo El Dorado para compañías españolas como la constructora Carija, la agroquímica Tecnidex, la firma gallega Made, Pescanova o  Porcelanosa.
 
Buena imagen de España
España no tiene la mala imagen de otras expotencias coloniales como Francia, Reino Unido o Bélgica en África subsahariana y el fútbol español abre muchas puertas. Ghana, Zimbabue, Kenia, Namibia, Mozambique, Angola o Sudáfrica son países atractivos para los inversores españoles. Unas 60 empresas españolas se han instalado en  Cabo Verde. El ICEX, que es la palanca exportadora española para las pequeñas y medianas empresas, ha organizado decenas de misiones comerciales en África subsahariana y crecen las consultoras especializadas en la región como Codexca, Naxan Export y Export Value. Una clase media formada por unos 400 millones de personas ávidas de productos y servicios son un buen reclamo para los hombres de negocios y los emprendedores españoles más atrevidos. Los riesgos en algunos países africanos son muy elevados, pero no mucho más que en otras zonas del plantea; por ejemplo, en Estados de  América Latina como Argentina, Venezuela o Bolivia.  Por eso mismo han aumentado las inversiones de empresas españolas avaladas por el Banco Africano de Desarrollo. “Las licitaciones internacionales son una buena entrada para la empresa española dada su calidad técnica”, aseguran desde el  área de África de la dirección financiera del Banco Santander. África del Sur, que es el motor económico del continente, es un polo de atracción para las compañías españolas, sobre todo en sectores como las energías renovables. Multinacionales como Abengoa, Acciona, Iberdrola, Isolux, Cobra y Gestamp son algunas de las firmas presentes en la patria de Nelson Mandela. 
 
Influencia política
En el apartado político, África cuenta con países muy relevantes, como es el caso de Sudáfrica. El continente africano agrupa a más de la cuarta parte  de los votos de  la Asamblea General de la ONU, donde el Estado español aspira a ser elegido el próximo otoño miembro del Consejo de Seguridad. Hasta hace pocos años, el papel de España en África, excepto en la parte norte del continente, era marginal. En África negra,  España sólo tuvo una colonia, Guinea Ecuatorial, que se independizó de la metrópoli durante el franquismo, el 12 de octubre de 1968.  Durante varias décadas, Francia desempeñó un papel hegemónico en la parte francófona de África, y otras potencias como Estados Unidos y  Reino Unido, pero también la URSS en la etapa comunista, tuvieron una presencia notable en ciertos países del continente. Es más, la guerra fría entre Washington y Moscú también se trasladó a África. China, sinónimo de pujanza emergente, desembarcó en África hace pocos años, pero ha conseguido desplazar a antiguas potencias coloniales europeas, sobre todo a Francia, en algunos países. La presencia económica y política española en África sigue un ritmo de crecimiento continuo desde hace varios años. El cambio de tendencia se produjo durante el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, cuando España intensificó sus intercambios económicos con el continente africano, impulsó programas de lucha contra el subdesarrollo y firmó con un país como Senegal  un importante acuerdo de cooperación para frenar la inmigración irregular hacia Europa. El Ejecutivo de Rajoy siguió el mismo camino político y económico, pero disminuyó notablemente la ayuda al desarrollo debido a la crisis económica. 
 
Invitación de Mauritania
La invitación a Mariano Rajoy no procede del dictador ecuatoguineano, Teodoro Obiang, aunque la cumbre se celebre en Malabo, sino de Mohamed Uld Abdelaziz, presidente de Mauritania, porque este país ejerce la presidencia de turno de la UA. En principio, Rajoy tendría que reunirse con mandatarios africanos de países con los que España quiere intensificar las relaciones bilaterales. La cumbre africana coincide con el  Consejo Europeo de Bruselas. Salvo cambios de agenda, Rajoy viajará a Bruselas el 27 de junio por la mañana, pero no podrá asistir a la cena de jefes de Estado y de Gobierno que se celebrará  el 26  por la noche en Ypres -localidad situada a 125 kilómetros de la capital comunitaria y próxima a la frontera francesa- para celebrar el centenario del inicio de la Primera Guerra Mundial. Durante esta contienda, Ypres fue atacada con armas químicas. La UA  es una unión formada por 54 Estados africanos. La UA se creó el 26 de mayo de 2001 en Adís Abeba (Etiopía) y empezó  a funcionar el 9 de julio de 2002 en Sudáfrica. La UA sustituyó  a la Organización para la Unidad Africana (OUA). El único Estado africano que no forma parte de la UA es Marruecos, porque este país no comparte el apoyo que da el organismo transnacional a la antigua colonia española del Sáhara occidental, territorio que Rabat y los independentistas del Frente Polisario apoyados por Argelia se disputan.  
 

Más en Economía y Empresas