Tánger y Nuakchot firman un acuerdo de cooperación

 

El alcalde de Tánger, Fouad El Omari, y la presidenta de la Comunidad Urbana de Nuakchot (alcaldesa), Amaty mint Hamadi, firmaron hace unos días en la capital de Mauritania   un Memorando de Entendimiento en materia de cooperación. En virtud de este memorando titulado ‘Acuerdo de Nuakchot’, ambas ciudades trabajarán para promover y estrechar los lazos de cooperación en el ámbito cultural, intelectual, científico, económico y social, así como en el intercambio de experiencias en materia de administración, transporte, energías renovables e infraestructuras.  El acuerdo  fue firmado en el marco del seminario internacional sobre la cultura de las ciudades que se desarrolla  en Nuakchot del 17 al 20 de noviembre bajo el lema ‘La cultura, palanca de desarrollo’. En este contexto, la alcaldesa  de Nuakchot  reveló que muy pronto las dos ciudades firmarán un acuerdo de hermanamiento. Cabe destacar que el pasado 29 de octubre, El Omari  firmó un acuerdo de hermanamiento con la ciudad chilena de  Valparaíso. Fouad El Omari evocó los lazos estrechos que unen al rey de Marruecos, Mohamed VI, con el presidente de Mauritania, Mohamed Ouled Abdelaziz, y destacó  “las relaciones ancestrales entre los dos pueblos hermanos”. Por su parte, Amaty mint Hamadi se felicitó por el acuerdo que beneficiará a Tánger y Nuakchot, y lo calificó de “acontecimiento importante”. Tánger es una ciudad de 700.000 habitantes situada en la parte marroquí del Estrecho de Gibraltar, en el norte del país. En la última década, Tánger ha experimentado un cambio profundo en materia económica y en infraestructuras. La capital marroquí del Estrecho es un polo económico, industrial y comercial importante para Marruecos y el conjunto del Magreb. El puerto Tánger Med es la principal plataforma económica de la ciudad. Nuakchot es la capital de Mauritania, tienen 560.000 habitantes y está ubicada en la costa atlántica africana. Los principales problemas de esta ciudad son la falta de infraestructuras básicas y la pésima urbanización, la contaminación por basura y el desbarajuste medioambiental, el caos circulatorio y la pobreza.