Biden: “De no haber ayudado la OTAN a Ucrania, hubiera sido el caos en Europa”

Joe Biden and Jens Stoltenberg

Se avecinan grandes decisiones en este final de junio, y el presidente norteamericano, Joe Biden, va preparando el escenario tanto para la cumbre de la OTAN en Madrid como para la previa de los jefes de Estado y de Gobierno de los Veintisiete. 

En una entrevista concedida a la agencia Associated Press, el presidente norteamericano desvela la razón última por la que decidió que la OTAN se volcara en ayudar a Ucrania para resistir a la agresión rusa. “¿Qué hubiera pasado –se pregunta el propio Biden- si la actual potencia más fuerte, la OTAN, una estructura organizada, hubiera dado la espalda a la agresión rusa y hubiéramos dejado que un Ejército de más de 100.000 soldados [rusos] hubiera cruzado las fronteras para intentar ocupar y aniquilar la cultura de todo un pueblo?” 

Y es el propio presidente el que se contesta: “Me temo saber lo que hubiera pasado de inmediato: ver cómo el caos se adueñaba de Europa y a los rusos desplazándose a otros países de Europa. No hay más que ver lo que han hecho en Bielorrusia. ¿Qué pasaría entonces en los países vecinos? Piénsese en lo que ocurriría en Polonia, en la República Checa y en definitiva en todos los países de la OTAN”. 

Biden también aborda la excusa esgrimida por el presidente Vladimir Putin  para entrar en Ucrania, según la cual era para impedir que Kiev se integrara en la OTAN, como han hecho muchos de los antiguos países “satélites” de la Unión Soviética tan pronto como ésta se derrumbó. “Parece que Putin quería una especie de finlandización de Ucrania, y al final lo que ha obtenido ha sido una otanización de la propia Finlandia”. 

A la vista de estas declaraciones, parece obvio que la cumbre de la OTAN de Madrid establecerá claramente una nueva estrategia, en la que la seguridad de Europa vuelve a estar en el primer plano, y que Ucrania no será troceada, al menos por ahora, para aplacar a Putin, como ha deslizado el presidente francés, Emmanuel Macron, provocando la cólera del presidente ucraniano, Volodimir Zelenski. 

Previamente, la Comisión Europea emitirá su dictamen sobre el estatuto de candidato de Ucrania a integrarse en la Unión Europea. Sin duda será favorable, aunque deberá ser oficialmente sancionado al máximo nivel en la cumbre de los días 23 y 24 de junio. 

Es evidente que esto último será más un gesto que un proceso acelerado de integración. El acervo comunitario es lo suficientemente importante como para que una situación excepcional, como la guerra de Ucrania, no dispense a ningún candidato de abrazar los valores que hacen, más que la fuerza militar, el principal atractivo de la Unión Europea. En todo caso, disfrutar del estatuto de candidato ya será un paso de la suficiente envergadura como para dar esperanza al pueblo ucraniano, y, sobre todo, hacer que se convenza de que forma parte de la familia europea. 

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