El levantamiento de Irán, en síntesis: día 157
El 19 de febrero se cumplió el 157º día de la revuelta nacional en Irán. En varias ciudades del país, la población siguió expresando su oposición al régimen, pidiendo su derrocamiento y protestando por sus terribles condiciones de vida.
En Teherán, familiares de condenados a muerte volvieron a concentrarse frente al edificio judicial del régimen, protestando contra las condenas a muerte y exigiendo respuestas a los funcionarios del régimen. Muchas concentraciones de este tipo han sido organizadas por familiares de los presos, que vienen de todo el país para celebrar estas reuniones en Teherán, donde se vio a niños con pancartas en las que se leía "No ejecuten a mi padre".
Jubilados y pensionistas se reunieron en muchas ciudades para protestar contra las bajas pensiones y los planes de seguros, y para exigir ajustes debido al aumento de los precios y la inflación.
Tras las protestas y manifestaciones de los días 16 y 17 de febrero de miles de valientes baluchis en distintas ciudades de la provincia de Sistán y Baluchistán, en el sureste de Irán, que salieron a la calle como continuación de las protestas contra el régimen, coreando "¡Muerte al opresor! Sea el Sha o Jamenei".
El 10 de febrero, en la provincia de Sistán y Baluchistán, los residentes continuaron sus protestas contra el régimen después de las oraciones semanales. Zahedan, la capital de esta inquieta provincia, así como ciudades de las regiones kurdas de Irán, se ha convertido en un faro para los manifestantes de todo el país y en un símbolo de las protestas de la revolución iraní en curso.
Esta jornada, en varias ciudades de la provincia de Baluchi, los manifestantes, entre los que se encontraban valientes mujeres, corearon consignas contra el régimen dirigidas contra todo su aparato, desde el líder supremo Ali Jamenei hasta el Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica (IRGC) y las unidades paramilitares Basij. Los manifestantes corearon "Muerte al opresor, sea el Sha o el Líder (Jamenei)". También corearon "¡No a la monarquía! ¡No al régimen de los mulás! Democracia e igualdad", "Libertad a todos los presos políticos".
Tras las manifestaciones y los actos de desafío en muchas ciudades iraníes, la presidenta electa del NCRI, Maryam Rajavi, aclamó "al heroico pueblo de Irán", que salió a la calle "cada vez con mayor determinación para derrocar al régimen, coreando 'libertad' y 'muerte a Jamenei'".
Los días 17 y 18 de febrero, las calles de Múnich se vieron inundadas por un mar de apasionados y entusiastas partidarios del Consejo Nacional de Resistencia de Irán (NCRI), que protagonizaron coloridos e inspiradores mítines coincidiendo con la Conferencia de Seguridad de Múnich para expresar su inquebrantable apoyo al levantamiento nacional en Irán, con fervientes cánticos de "Muerte al opresor, ya sea el Sha o el Líder (Jamenei)" resonando por las calles de la ciudad. También denunciaron la decisión de invitar a la conferencia al hijo del odiado dictador depuesto como un grave insulto a los millones de iraníes que anhelan la libertad, la democracia y los derechos humanos.
El levantamiento nacional iraní entró en su 155º día el 17 de febrero, tras una intensa noche de protestas masivas contra el régimen en todo el país para conmemorar el 40º día de las ejecuciones de dos manifestantes, Mohammad Mehdi Karami y Mohammad Hosseini.
Unidades de la resistencia llevaron a cabo 44 acciones contra el régimen para conmemorar el 44º aniversario de la revolución antimonárquica de 1979.
En Teherán, manifestantes iraníes prendieron fuego a carteles, pancartas y vallas publicitarias favorables al régimen en toda la capital. En Mashhad, en el noreste de Irán, los manifestantes arrancaron pancartas y carteles de propaganda pro-régimen en la segunda ciudad más grande del país.