Opinión

Irán: queman una comisaría por el asesinato de un joven kurdo de 19 años a manos de agentes del régimen

El régimen de Irán ha comenzado el nuevo año con asesinatos en varias ciudades. En la noche del miércoles 22 de marzo, en el puesto de control de Karim Abad, a tres kilómetros de Baneh, un joven kurdo de 19 años llamado Behzad Azizi fue asesinado a tiros sin previo aviso. Murió tras llegar al hospital. 

Los agentes de la Guardia Revolucionaria se negaron a entregar el cadáver a su familia. La gente enfurecida protestó frente al hospital y luego atacó la comisaría de Karim Abad y le prendió fuego. Los agentes, asustados, huyeron de la zona. 

Hossein Al-e-Ali, de 31 años, que fue arrojado desde el cuarto piso de su casa en Bandar Abbas la semana pasada por agentes del régimen, murió en el hospital el 21 de marzo, primer día del Año Nuevo iraní. Hossein Al-e-Ali era buscado por los agentes por participar en manifestaciones y llevaba tiempo oculto. 

En marzo, las fuerzas del orden mataron a Issa Rochandel Doghanli, de 39 años, compañero de Qashqai, en Qeshlaq Doghanlou (de Faryab). En su funeral, que se celebró el domingo 19 de marzo, la gente enfurecida coreó "abajo Jamenei", "abajo los pasdarán" y "los qashqai prefieren la muerte a la humillación". 

Por otra parte, la juventud insurgente tiene como objetivo un centro de robo y corrupción en Ardebil. El 18 de marzo de 2023, la juventud insurgente de Ardebil atentó contra una fundación dependiente de Jamenei, la Fundación de los Mártires, "que es un centro de robo y corrupción de los mulás y los pasdarán. Es un centro que abusa sin límite de las familias de las víctimas y mutilados de los ocho años de guerra contra Irak". La explosión resonó en toda la zona. 


Hamid Enayat es politólogo, especialista en Irán. Colabora con la Oposición Democrática Iraní (CNRI).