Opinión

Los tres caballos de batalla del Gobierno Sánchez: el factor K, la propaganda y el BOE

photo_camera Gob-sanchez

El egregio y reducido Ejecutivo de tan solo 22 ministros, ministras y ministres que intenta hacer realidad las ocurrencias del presidente del gobierno de España, Pedro Sánchez, asumen el papel de titulares de los departamentos que les ha caído en suerte mediante el uso de tres principales instrumentos, que montan a discreción cual si se trataran de caballos de batalla.

Espoleados a conveniencia y de forma sincronizada, no hay alto cargo de la coalición PSOE-Unidas Podemos que no los haga suyos, clave espuelas y los lance al galope para chocar contra sus adversarios políticos o la sociedad, a la que el acervo socialista denomina ciudadanía. Pero siempre bajo los dictados de Presidencia

gob-sanchez

El primero y principal caballo de batalla que utiliza el presidente Sánchez y sus adláteres es el Boletín Oficial del Estado, el archiconocido BOE. No es una originalidad. Lo han manejado como artefacto supremo de poder todos los antecesores en el cargo del aclamado actual inquilino del Palacio de la Moncloa, príncipe de la coherencia, cuyas genialidades y gran credibilidad son admiradas por los máximos dignatarios de los cinco continentes.

Como órgano oficial del Estado, el BOE es el medio institucional en el que se publican las leyes, las disposiciones generales de los órganos del Estado, los tratados y convenios internacionales y los actos de inserción obligatoria. También las resoluciones y actos de los departamentos ministeriales y de las administraciones públicas cuando así lo establece una ley o un real decreto.

En sus páginas se reflejan los Decretos Ley, que se supone que son disposiciones legislativas provisionales que dicta el gobierno de la nación en caso de extraordinaria y urgente necesidad, pero que requieren su posterior ratificación por el Legislativo. El gobierno Sánchez es el campeón de los Decretos Ley de la historia de España, con más de 120 en solo 4 años. 

gob-sanchez
Maestros de la propaganda

Poco importa en Moncloa que haya ingredientes que los puedan tachar de nulos. Mientras sirvan para conseguir los fines propuestos, adelante con ellos, porque las consecuencias para el gobierno son, en la mayoría de los casos, entre cero y ninguna. Entre los echados para atrás por el Tribunal Supremo están el primer y segundo estado de alarma por la pandemia ‒que debían haber sido tratados como estados de excepción‒ y el cierre de las sesiones del Congreso por la COVID-19. 

El segundo instrumento que emplea con fruición el gobierno Sanchez en colaboración con la potente maquinaria del PSOE es la propaganda, a través de todas sus técnicas, pero siempre, claro está, aludiendo al bien común. Se trata de transmitir una supuesta información oportuna y veraz a través de las redes mediáticas y sociales que gestiona la Secretaria de Estado de Comunicación. El más preclaro ejemplo es el convenio que se acaba de suscribir con dos productoras para rodar una serie documental dedicada a “trasladar a la sociedad las funciones y el quehacer diario de la Presidencia del Gobierno”

gob-sanchez

Otro reciente acto propagandístico es el celebrado el 5 de septiembre en el Palacio de la Moncloa, con el foco puesto en el presidente Sanchez rodeado por 50 invitados anónimos. Entre ellos, según ha podido constatar el periódico 20 Minutos, se encontraba la teniente de alcalde del PSC de la ciudad catalana de Rubí, el jefe de Gabinete del mismo ayuntamiento y cargos del PSOE de Castilla-La Mancha y Madrid. Qué casualidad que los elegidos por el Espíritu Santo no le preguntaron al presidente por la subida de la inflación, de los productos básicos, del gas o de la luz.

Otro caso de burda propaganda es la campaña orquestada por Moncloa y Ferraz, con la participación estelar de la ministra de Justicia, Pilar Llop, para intentar convencer a los españoles de la bondad de indultar a José Antonio Griñán por el caso de los ERE de Andalucía. Licenciado en Derecho e inspector de Trabajo por oposición con el número 3 de su promoción, fue presidente del PSOE entre 2012 y 2014. O sea, de tonto… ¡ni un pelo!

Pero resulta que, mira por donde, cuando era consejero de Economía, vicepresidente y luego presidente de la Junta de Andalucía, Griñán no se enteró, pobre de él, del sistema de corrupción en prejubilaciones, subvenciones y comisiones fraudulentas organizado por la administración andaluza para conceder ayudas socio laborales ilegales por valor de más de 600 millones de euros

gob-sanchez
Uso discrecional del factor K

Y va y el maligno Tribunal Supremo confirma la sentencia de 6 años de prisión dictada por la Audiencia de Sevilla en 2019 por un delito continuado de prevaricación y malversación de caudales públicos ¡¡¡Pero hombre, ésto que es lo que es!!! Respuesta: el mayor sistema de corrupción económica institucionalizada de la historia de España.

Y ya vamos con el tercer caballo de batalla de la troika, que es el conocido factor K. Ah!, pero ¿no saben en qué consiste el factor K? Seguro que sí. No obstante, se lo voy a recordar. Significa ¡¡¡Kacen lo que quieren!!! ‒en puro español, que hacen lo que quieren‒, o en el plural que aplican en la calle Ferraz: ¡¡¡Kacemos lo que queremos!!! Si, lo que quieren o lo que les dejan hacer sus compañeros de andadura, Unidas-Podemos y quienes les sacan las castañas del fuego, los partidos independentistas, secesionistas y afines. 

gob-sanchez

Kacen lo que quieren, porque enfrente tienen una oposición democrática que muchas veces tarda demasiado en reaccionar o da la impresión de estar alelada. Así pues, el gobierno actúa en bastantes ocasiones al grito de ¡Ancha es Castilla! ¡Apliquemos el factor K y luego, ya veremos! La vicepresidente segunda, Yolanda Díaz, podría ser considerada una profesional del factor K.

De los muchos usos del factor K, solo dos ejemplos que a muchos les hierve la sangre. La concesión de los indultos, tantas veces negada por el presidente Sánchez, a los 9 sentenciados por liderar el proceso de independencia de Cataluña. Supuestamente, para “abrir una nueva etapa de diálogo para propiciar el reencuentro en Cataluña”. Todavía se están riendo los indultados. 

Otro caso semejante que ahora está en fase latente debido a la reacción contraria de la mayor parte de la sociedad española es el ya citado intento de indultar a las bravas a José Antonio Griñán, aplicando el factor K a la sentencia de los ERE. Los argumentos que el PSOE esgrime para aplicar tal medida de gracia son… ridículos

gob-sanchez

Es patente que el PSOE ha movilizado a sus huestes y cuenta con el aplauso o el silencio cómplice de sus cargos, afiliados y simpatizantes. Es cierto que muchos están escandalizados, pero mantienen la boca cerrada porque están en juego sus prebendas ¿Conseguirá Griñán su ansiada bula o, por el contrario, la temida burla general?