El país persa y el gigante asiático quieren extender su influencia en territorio afgano

Afganistán en 2021, entre Irán y China

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La República Islámica y la nación china muestran su gran interés por Afganistán.

El impacto de la caída de Kabul en manos de los talibanes a últimos de agosto ha traído la intervención de dos actores internacionales que se habían mantenido en un discreto segundo plano en sus relaciones con los talibanes. 

Era conocida la posición de los Estados Unidos y su acuerdo con los talibanes firmado en Doha (Qatar) en febrero del 2020 para llevar la paz a Afganistán, sin el cual hoy posiblemente estaríamos en otro escenario. Rusia, por otro lado, aprendiendo de errores pasados, se ha mostrado cauta sobre la forma en que actuarán los talibanes en el poder y si algo dejaba claro el Gobierno ruso en boca de su ministro de Asuntos Exteriores, Sergei Lavrov, es que no tenían prisa en reconocer a los talibanes como el nuevo Ejecutivo de Afganistán. 

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La Unión Europea, igualmente, mostraba su cautela y su preocupación congelando las ayudas económicas al desarrollo hasta que no viera signos evidentes de respeto por los derechos humanos. Pero ha habido dos actores que por sus peculiaridades políticas y religiosas han llamado la atención por la forma de relacionarse con los talibanes, Irán y China.

El resurgimiento talibán

Afganistán, de nuevo, se sumerge en las tinieblas de la historia al ocupar el movimiento salafista talibán prácticamente la totalidad del país de manera rápida y sorprendente

Han pasado 20 años desde que el primer movimiento talibán se vio obligado a dejar el poder por el conflicto bélico iniciado por EEUU, Gran Bretaña y parte de sus aliados, acusándoles de haber dado apoyo logístico a Bin Laden y a su organización Al-Qaeda, responsable de haber derribado en un atentado terrorista las dos torres gemelas de Nueva York en septiembre del 2001 con más de 2.700 muertos.  

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El primer movimiento talibán estuvo en el poder desde 1996 a 2001, el cual, al igual que el actual, estuvo formado por miembros en su mayoría de la etnia pastún mayoritaria en el país y que ocupó los sitios clave del Gobierno en detrimento de los hazaras y uzbekos que fueron perseguidos. Pero a diferencia del primer Gobierno talibán, los talibanes que este agosto entraron en Kabul, han tenido alrededor una serie de países que si bien no son aliados, si han llevado a cabo una aproximación al movimiento salafista que nadie hubiera pensado hace años, bien por motivos estratégicos, bien por motivos económicos o bien por otros motivos1 .

Irán

Uno de los países que ha mantenido contactos directos o indirectos con los talibanes es Irán, cuyo régimen de los ayatolas gobierna el país persa desde 1979 y cuya relación con los talibanes ha tenido fases de enfrentamiento y otras de distensión. 

Los peores momentos de sus relaciones se vivieron en 1998 cuando se produjo una de las mayores masacres llevadas a cabo contra personal iraní, en la que 10 diplomáticos y un periodista2 fueron asesinados en el Consulado de Irán, ubicado en la ciudad de Mazar-e-Sharif. El consulado fue ocupado por fuerzas talibanes al entrar en la ciudad que estaba en manos de la opositora Alianza del Norte a la cual apoyaban las autoridades iraníes en su guerra con los talibanes. 

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La ciudad cayó en manos talibanes un 8 de agosto siendo ese mismo día el Consulado atacado. Fueron asesinados 10 diplomáticos iraníes y un corresponsal de la agencia IRNA, Mahmoud Saremi, a quien Irán le dedica todos los 8 de agosto “el Día Nacional de los Periodistas”  en su memoria, haciéndose incluso en 2015 la película iraní ‘Mazar Sharif’ sobre esta masacre dirigida por el director Abdolhassan Barzideh3 . Todo ello estuvo a punto de crear una guerra entre Irán y Afganistán, desplegando el primero una fuerza de 70.000 soldados en la frontera, defendiéndose los talibanes de las acusaciones iraníes al afirmar que los autores de las muertes habían sido descontrolados. 

Las relaciones entre los dos países eran de confrontación, hasta que en 2001 se expulsó del poder a los talibanes gracias a la operación de EEUU y Gran Bretaña  ‘Libertad Duradera’

A partir de entonces, empezó un acercamiento de Irán al régimen afgano del presidente Karzai, sabiéndose que compartían vecindad, costumbres y que en el centro de Afganistán vivía una etnia que hablaba persa, los hazaras. 

Los hazaras son de origen asiático y proceden de los antiguos mongoles. Sin saber el censo exacto, serían unos cuatro millones de personas que viven en el centro de Afganistán en la región de Hazarayat, también repartidos en zonas de Pakistán e Irán, es con este último país con el que tiene más lazos en común, sobre todo el idioma persa y la religión. 

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Desde que el grupo talibán llegó al poder en 1996 declaró la yihad contra el pueblo hazara al que consideraba apóstata. En líneas generales el primer régimen talibán, que como se sabe es de corriente suní salafista, consideraba que el islam debía de regresar a sus orígenes que es donde estaba según ellos la verdadera esencia de su religión. 

El salafismo yihadista rechaza a todo musulmán que no siga sus preceptos, especialmente si esos musulmanes siguen la corriente chií del islam, que es la minoría hazara en Afganistán y que ha sido perseguida de manera brutal por los talibanes, el Daesh y Al-Qaeda, todos ellos suníes. Pero como ya se dijo anteriormente, la salida de los talibanes en 2001 motivó un acercamiento del régimen iraní a Kabul, donde el presidente, en ese momento interino, Hamid Karzai fue protagonista durante su mandato de encuentros con las autoridades iraníes y no se entendería el mandato del mismo sin su relación con Irán, sobre todo en temas de ayuda económica. 

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Hamid Karzai llega al poder tras el derrocamiento de los talibanes en diciembre de 2001 y una de sus primeras visitas fuera de Afganistán fue a Teherán (Irán) en 2002, concretamente al Parlamento iraní, donde afirmó que los vínculos entre los dos países son eternos4 . En 2007 visita a Karzai su homólogo iraní Mahmud Ahmadineyad. Karzai hizo mención de la oferta de mediación para rebajar tensiones entre Irán y EEUU dado que eran países amigos. Ahmadineyad rechazó las acusaciones de EEUU de que estaba armando a los talibanes y dejaba claro que apoyaba a Karzai porque ello daba seguridad a la frontera entre los dos países. 

En el año 2010 el presidente iraní volvió a visitar Afganistán y criticó el mantenimiento de tropas de los EEUU en el país, afirmando que “la única oportunidad para la paz será cuando EEUU y el resto de aliados extranjeros abandonasen Afganistán5 , pero la reacción de EEUU a estas palabras no se hizo esperar y el entonces secretario de

Defensa de EEUU Robert Gates acusó a Irán de hacer doble juego al apoyar a los talibanes. Karzai agradeció al presidente iraní su apoyo, considerando a Irán como país amigo. 

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En agosto de ese año, Karzai devolvió la visita al presidente iraní, visita que según el periódico The New York Time sirvió para que Karzai recibiera una gran bolsa de billetes, el cual ya en Kabul y en una posterior rueda de prensa nunca negó haber recibido, pero matizó que era legal, sobre todo para potenciar la oficina presidencial.
En 2013 tuvo lugar la última visita oficial de Hamid Karzai a Irán para hablar de temas de seguridad con su presidente Hasan Rohaní y en un momento donde chocaba con EEUU en lo referente a la presencia de tropas de la OTAN en Afganistán. Como se ve, la Presidencia de Karzai en Afganistán sirvió para mantener contactos periódicos con el régimen iraní.

En septiembre de 2014, el presidente Karzai, dejó la Presidencia de Afganistán tras perder las elecciones contra Ashraf Ghani quien acabaría siendo el presidente del país. Ghani, siguiendo la línea de su predecesor en el cargo, visitó Irán en 2015 teniendo una reunión con su homólogo Hasan Rohaní, acordando compartir información sobre terrorismo. 

La visita se repitió en 2016 para firmar un acuerdo trilateral de tránsito con la India para desarrollar el puerto iraní de Chabalar y salvar a la India de su tránsito por Pakistán. Desde la salida de los talibanes del poder en 2001, mientras Irán mantenía una relación periódica con sus homólogos en la Presidencia de Afganistán, no tuvo públicamente ninguna relación con los talibanes, pero llegó noviembre de 2019 y el ministro de Exteriores iraní, Mohamad Javad Zarif, recibió a una delegación de los talibanes liderada por el mulá Abdul Ghani Baradar que era uno de sus fundadores. El motivo de la reunión fue favorecer un posible dialogó con el presidente afgano Ashraf Ghani, al cual los talibanes consideraban un títere de EEUU6

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El régimen iraní expreso en los medios que en septiembre de ese mismo año mantuvo un encuentro con los talibanes de cara a facilitar un alto el fuego con EEUU y tratar una posible retirada de esas fuerzas del país. Irán no dejaba pasar la oportunidad de estar presente en Afganistán y mostrar su rechazo a la política exterior de EEUU, siendo el telón de fondo para las autoridades del régimen iraní el abandono del territorio afgano de las fuerzas de la OTAN como al final se plasmó en los acuerdos de Doha de febrero de 2020 entre los talibanes y EEUU que establecía un acuerdo para la salida de las tropas norteamericanas como al final se llevó a cabo. 

Ya en el año 2021 Irán se hizo de nuevo presente en las conversaciones entre talibanes y el Gobierno afgano, pidiendo que en las conversaciones de paz estuvieran presentes todos los grupos afganos, seguramente pensado en la etnia chií hazara. 

Los movimientos en política exterior que ha llevado a cabo el régimen iraní en Afganistán han sido sorprendentes, como en su momento lo fueron en Siria e Irak. El régimen iraní ha utilizado el pragmatismo estos años o la transversalidad para entenderse con distintas facciones suníes enfrentadas, sea el Gobierno afgano o los talibanes e incluso con Al-Qaeda según comentan algunos sectores  gubernamentales de EEUU, lo cual el régimen iraní ha rechazado tajantemente7 .

Irán ha estado expectante esperando cómo se producía la retirada definitiva de las fuerzas occidentales a últimos de agosto y de qué manera su régimen podría ayudar a la constitución del régimen talibán, es por lo que el régimen iraní se mostró dispuesto a cooperar con los talibanes a pesar de las diferencias religiosas, conscientes de que la estabilidad de esas relaciones dependerían de factores externos; por ejemplo, Pakistán que no vería de su agrado que la influencia chií se extendiera más allá de lo que el rey Abdullah de Jordania llamó en 2004 “la media luna chií” formada por Irán, Irak, Siria, Líbano y Bahréin y que, según dijo, “sería muy desestabilizadora para la región8”  . 

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La República Islámica en el pasado tuvo presente que en un conflicto con EEUU la mayoría de los países árabes suníes se pondrían de parte de EEUU, pero ahora con este nuevo escenario, Irán jugará todas sus bazas geopolíticas y geoestratégicas sabiendo la oportunidad que se le presenta. Es por ello por lo que Irán ha mantenido su Embajada abierta en Kabul mostrando su cara conciliadora.

Pero Irán tiene un gran y principal enemigo en la zona y no es un país en concreto, es la organización terrorista Daesh, enemigos en los campos de batalla de Siria e Irak, igualmente son enemigos de los talibanes y, como hemos visto, causantes de la matanza ocasionada en el aeropuerto de Kabul y en el exterior el día antes de finalizarse la evacuación con casi 200 muertos. 

El régimen talibán se enfrentó de esta manera al primer atentado del Daesh, los cuales ven a los talibanes como musulmanes traidores que no aplican la sharía. Todo hace pensar que no será el primer atentado y que el Daesh intentará desestabilizar al máximo al Gobierno talibán y a toda la zona, todo esto confirmado en un mensaje del propio Daesh en su revista Al-Naba nº 302 del 3 de septiembre, en el que prometía “una nueva fase de la yihad9” , sin olvidar a Al-Qaeda que es el otro poder en la sombra en Afganistán y quien estaría próximo al régimen talibán.  

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Mientras, Pakistán, que en su día acogió a los líderes talibanes tras su derrota en 2001, ve con muchas reservas la política exterior de Irán respecto a Afganistán, sobre todo porque la parte talibán más radical e influenciada por Pakistán, la que se conoce como “Red Haqqani10”  no ve con buenos ojos la relación con Irán, a pesar de que, como expresó el 26 de agosto a la Agencia EFE el analista político iraní y catedrático en ciencias políticas, Medhi Motaharnia, "Irán se esforzaba para que los buenos lazos con los talibanes permitieran prevenir antes que curar".

China

Si Irán ha estado presente de una manera u otra en Afganistán desde el inicio de la invasión soviética hasta ahora, el caso de China es diferente, ya que su posición geopolítica con respecto a Afganistán, aunque compartan una frontera de poco más de 70 kilómetros, está marcada por la región autónoma de Xinjiang. 

Esta región ha dado muchos quebraderos de cabeza a China por encontrarse en la misma el pueblo uigur, una etnia de mayoría musulmana poco identificada con la historia china y con muy poco en común con la etnia han11  mayoritaria en China. 

El territorio hace frontera con Afganistán a lo largo de 70 kilómetros, pero hay que retroceder un poco en el tiempo e indagar en la historia. Cuando Mao llega al poder tras su revolución hace más de 70 años, se encontró con una región donde vivían millones de uigures y que tenían su religión propia, el islam, los cuales hablaban un dialecto que venía del árabe y no tenían ninguna intención en su mayoría de formar parte de la revolución maoísta. Todo ello provocó desde la llegada al poder de Mao, duros enfrentamientos con el régimen chino, sobre todo en estos últimos 20 años. 

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Entre tales acontecimientos podemos destacar graves atentados, detenciones y muertes, siendo el año 2014 cuando ocurre el atentado más grave en Urumqi, capital de Xinjiang, cometido por separatistas uigures los cuales utilizaron dos vehículos todo terreno para atropellar a personas en un mercado de la capital a la vez que arrojaban explosivos, lo que produjo 30 muertos, la mayoría chinos de la etnia han. Así pues, se generó una reacción enérgica y de condena del presidente chino Xi Jinping. 
En marzo de 2017, Xi Jinping realizó un duro discurso en el que marcaba las líneas maestras de lo que sería el plan para estabilizar la región de Xinjiang, manifestando ante la Asamblea Popular Nacional, máximo órgano legislativo chino, la necesidad de construir “una gran muralla de hierro12”  que salvaguarde la unidad nacional, la seguridad y la estabilidad social en la región autónoma. Xi hizo hincapié en la simbiosis necesaria entre militares, policías, civiles y Gobierno para crear una barrera de seguridad, dada la posición estratégica de Xinjiang.

Era obvio que la mención a la barrera de seguridad significaba que tomaría medidas en el asunto del separatismo uigur. El Gobierno chino abrió los “Centros de Educación y Capacitación Vocacionales” con objeto, según las autoridades locales, de combatir el terrorismo, extremismo y promover la integración social. En cambio, el subsecretario de Defensa de EEUU para el Indo-Pacífico, Randall Schiver, dijo que, al menos, un millón de personas habían sido internadas en estos "campos de concentración".

Lo cierto es que, a día de hoy, el régimen chino sigue muy preocupado por la presencia del yihadismo internacional cerca de sus fronteras y más sabiendo que a personas de etnia uigur se les ha situado en zonas de guerra como Siria o Irak, formando parte del Al-Qaeda o el Daesh, lo que hizo pensar al régimen chino que esos individuos contaban ahora con preparación militar y en algún momento podrían regresar a Xinjiang. 

Un informe del año 2017 del Ministerio de Asuntos Exteriores de Israel abordó este asunto y situaba a millares de ciudadanos chinos uigures combatiendo en Siria, cerca de 3.000 junto al entonces Frente Al-Nusra (Al-Qaeda) y unos centenares con el Daesh.

Por todo ello, China quería fortalecer sus poco más de 70 kilómetros de frontera con Afganistán en Xinjiang y de esa manera a últimos de julio de este año y antes de empezar los talibanes la ofensiva final mantuvo reuniones con delegaciones del régimen talibán,  de cara a que la situación al otro lado de su frontera no se desbordara peligrosamente y pusiera en peligro la estabilidad de la región uigur, a pesar de que la frontera está a 5.000 metros de altura en una zona montañosa donde no hay carretera. De este modo China, ofreció ser sede para un dialogo entre las partes en liza en Afganistán, pero puso como condición combatir al Movimiento Islamista de Turquestán Oriental, organización separatista uigur. 

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Por el lado comercial, China firmó con el presidente Karzai un contrato en 2007 para explotar la mina de cobre de Ainak, cerca de Kabul, que sería una gran baza comercial para el grupo chino Metallurgical Group Corporation al que se concedía el permiso para explotar los recursos de esa mina durante 30 años. China pagó por esa concesión al Gobierno afgano casi 3.000 millones de dólares13 .

China pretende también incorporar al régimen talibán al corredor económico China-Pakistán y para ello estaría dispuesta a llevar a cabo numerosos proyectos energéticos y con ellos económicos, como la extracción de litio, mineral con grandes reservas en Afganistán. 

China no estaría interesada en involucrarse militarmente viendo las consecuencias de desgaste que ha pasado EEUU y en su día la que fue la Unión Soviética, pero sí aprovecharía las posibilidades económicas del Afganistán talibán, utilizando para ello a su aliado Pakistán que es fuera de Afganistán quien mejor conoce a los talibanes. 
Tales motivaciones han originado que China, con su política de expansión económica y comercial internacional, no deje pasar esta oportunidad ocupando el espacio de EEUU. Como se puede ver, parece que la jugada geoestratégica de China es hábil, aunque no exenta de riesgos como se ha visto. 

China trataría de transmitir a sus futuros socios del régimen talibán una imagen de confianza, alguien quien se puede confiar sobre todo de cara a llevar a cabo pactos duraderos y más con el anuncio que ha hecho este 9 de septiembre el ministro chino de Exteriores, Wang Yi, de donar 31 millones de dólares a Afganistán en cereales y vacunas anti-COVID.

Por todo lo anterior, tampoco se debe de pasar por alto el proyecto denominado “Nueva Ruta de la Seda”, en el que el comercio marítimo y terrestre entre China y Europa podría tener como uno de los protagonistas a Afganistán, como ahora lo es Pakistán, de ahí que China esté dispuesta a invertir en ese país para su reconstrucción y de paso para potenciar el comercio internacional chino. 

El régimen chino, ante todo, tiene muy presente la ‘realpolitik’ y las relaciones de poder en el ámbito internacional, sabiéndose que China ha extendido su poder económico y comercial a amplias partes del mundo de manera espectacular los últimos 20 años, pasando por ejemplo en el año 2000 de apenas estar presente en un solo país de América del Sur a estar prácticamente presente en todo el continente, igual ocurre con África, Asia, Australia y parte de Europa, continentes en que la presencia comercial china era moderada sobre el año 2000, para ser ahora más de 20 años después espectacular14 .

Nuevos entendimientos

Por diferentes motivos, tanto China como Irán se han mostrado abiertos a entenderse con el Gobierno talibán. 

Irán pasó de tener enormes problemas con el primer Ejecutivo talibán en 1998 a raíz del atentado contra sus diplomáticos a buscar vías de entendimiento una vez derrotados los talibanes en 2001, con el Gobierno post talibán de Karzai, que se tradujeron en ayudas económicas iraníes, para finalizar con colaboraciones periódicas con los talibanes de segunda generación que finalmente tomaron Kabul este agosto, sobre todo porque buscan ampliar su influencia fuera de sus fronteras, porque no hay que olvidar que comparten con Afganistán más de 900 kilómetros de frontera incluidas rutas comerciales y su antipatía contra EEUU. 

Pero Irán tiene en común también con Afganistán que la mitad de la población afgana habla darí, que es el persa de Afganistán y una de las dos lenguas oficiales, pero con pocas diferencias con el farsi o persa de Irán. Sin embargo, seguramente la cuestión más importante, es que comparten con una parte de la población afgana la corriente chií, aproximadamente el 15%, del cual el 10% lo representa el pueblo hazara, de lengua persa y parte del cual está refugiado en Irán por la persecución histórica de los talibanes, Daesh y Al-Qaeda.

Los talibanes han rechazado regularmente los ataques del Daesh afgano (ISIS-K) contra mezquitas y territorios chiíes de Afganistán, el cual es enemigo también de los talibanes, pero los iraníes también han mostrado su mejor cara hacia los talibanes, de cara a ampliar el apoyo diplomático15 , de hecho la representación diplomática en la Embajada en Kabul y el Consulado en Herat permanecieron abiertos durante y una vez acabada la ofensiva talibán, lo que representa un reconocimiento de facto del Gobierno talibán. Si bien Al-Qaeda, aliado de los talibanes, estaría vigilante, no así el Daesh declarado enemigo de los chiíes.

Por otro lado, China tiene razones mucho más mercantilistas que Irán, pero sin dejar de mostrar su inquietud de cara a que Afganistán sirva de refugio a los separatistas uigures y ha mantenido reuniones periódicas con representaciones del ahora Gobierno talibán de cara a que estos hagan una declaración de intenciones y muestren en su discurso, como así fue, que no serán refugio del separatismo uigur. 

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Los talibanes se pronunciaron a primeros de septiembre calificando a China como “país amigo16” . La estabilidad en ese lado de la frontera significa que China llevaría a cabo inversiones de cara a la reconstrucción del país, ocupando de alguna manera el lugar que ocupó anteriormente EEUU. La colaboración no plantearía la utilización de tropas, cuestión que China ha descartado.

Para concluir, el Gobierno talibán sabe que tiene el foco encima y que de su radicalidad dependen en gran medida las inversiones extranjeras para la reconstrucción del país como las que quiere hacer China e Irán, todo dependerá de su deriva y de cómo aplica su Gobierno durante 2021  la ley sharía, sobre todo con las mujeres afganas, que ha sido el caballo de batalla de muchos gobiernos occidentales de cara a plantear un mínimo dialogo y todo hace presagiar  lamentablemente que la mujer afgana verá coartada su libertad de elección y de movimiento. 

Por el momento, los talibanes han decidido que la mujer puede ir a la universidad, pero apartada totalmente de los hombres. El Gobierno talibán sabe que, en este tablero geoestratégico, ellos son el tablero, controlando también las fichas de una parte del mismo, pero necesitan que el tablero sea firme, el cual intentará derribar sin ninguna duda el Daesh al considerar que los talibanes no aplican la verdadera ley sharía constituyéndose como el verdadero enemigo del régimen talibán al que intentaran eliminar por todos los medios.

“Hay dos lobos que siempre están peleando, unos es la oscuridad y la desesperación, y el otro es la luz y la esperanza. ¿Cuál lobo gana? El que tu alimentes.”
Proverbio Afgano

Luis Montero Molina, politólogo, Máster en Geoestrategia Internacional y Terrorismo Yihadista

Bibliografía

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2.    AGENCIA IRNA. En homenaje a Mahmud Saremi, un devoto periodista de investigación, 6 agosto 2018, disponible en https://es.irna.ir/news/3641479/En-homenaje-a-Mahmud-Saremi-un-devoto-periodista-de-investigaciónFecha última consulta 15.09.2021.

3.    TEHRAN TIMES. Film on 1998 Iranian diplomats’ murder in Mazar-i-Sharif premieres in Tehran, 25 agosto 2015, disponible enhttps://www.tehrantimes.com/news/248916/Film-on-1998-Iranian-diplomats-murder-in-Mazar-i-Sharif-premieresFecha última consulta 15.09.2021.

4.    LA VOZ DE AMÉRICA. Karzai habla en el  parlamento iraní, 25 febrero 2002, disponible en el caché de https://www.vozdeamerica.com/archivo/2002-02-25-4-1Fecha última consulta 15.09.2021

5.    REDACCION BBC. Irán acusa a Estados Unidos de "doble juego" en Afganistán,10 marzo 2010 disponible https://www.bbc.com/mundo/internacional/2010/03/100310_afganistan_iran_estados_unidos Fecha última consulta 15.09.2021.

6.    SPUTNIK mundo. Estados Unidos ya perdió la guerra en Afganistán. 31 enero 2019, disponible en https://mundo.sputniknews.com/20190131/guerra-afganistan-eeuu-1085160415.html Fecha última consulta 15.09.2021.

7.    ESPINOSA, Ángeles. ¿Qué hacía el ‘número dos’ de Al Qaeda en Irán? El País.16 noviembre 2020 disponible en https://elpais.com/internacional/2020-11-16/que-hacia-el-numero-dos-de-al-qaeda-en-iran.html Fecha última consulta 15.09.2021.

8.    ESPINOSA, Ángeles. Irak, la hora de los chiíes. El País.23 de enero 2005 https://elpais.com/diario/2005/01/23/domingo/1106455292_850215.htmlFecha última consulta 15.09.2021.

9.    REQUEIJO, Alejandro y ALAMILLOS Alicia. ¿Qué es el ISIS-K? La filial afgana del Daesh que ve a los talibanes como traidores al islam. El Confidencial.27 agosto 2021disponible en https://www.elconfidencial.com/mundo/2021-08-27/isis-khorasan-grupo-terrorista-atentado-kabul_3253330/Fecha última consulta 15.09.2021.

10.    Red Haqqani. Grupo autónomo dentro de los talibanes a los que juraron fidelidad en 1995. Fundado por Jalaludin Haqqani, líder del grupo ya fallecido, sustituido por su hijo Sirajuddin, Ministro del Interior talibán, disponible en https://www.elconfidencial.com/mundo/2021-09-07/sirajuddin-haqqani-talibanes-afganistan_3238346/Fecha última consulta 15.09.2021.

11.    La etnia han es el mayor grupo étnico de China. De los 1.300 millones de habitantes que tiene China poco más de 1.100 millones pertenecen a esa etnia, disponible en https://www.thechinaguide.com/es/blog/chinese-ethnic-groupsFecha última consulta 15.09.2021.

12.    LI, Tao. Presidente chino pide construcción de una "gran muralla de hierro" para estabilidad social en Xinjiang, versión español del digitalXinhua,10 marzo 2017, disponible en http://spanish.xinhuanet.com/2017-03/10/c_136119169.htm  Fecha última consulta 15.09.2021.

13.    MOSHIN,Amín. The Story Behind China’s Long-Stalled Mine in Afghanistan, The Diplomat,7 enero 2017, disponible en https://thediplomat.com/2017/01/the-story-behind-chinas-long-stalled-mine-in-afghanistan/Fecha última consulta 15.09.2021.

14.    TAEÑO, Javier. El Mapa revelador que muestra el declive de EEUU frente a China, News Pressservice.21 julio 2021, disponible en https://newspressservice.com/el-mapa-revelador-que-muestra-el-declive-de-estados-unidos-frente-a-china/  Fecha última consulta 15.09.2021.

15.    EFE Teherán. Irán y Pakistán apuestan por cooperar para lograr una paz duradera en Afganistán. Agencia EFE, 26 ago. 2021, disponible enhttps://www.efe.com/efe/espana/mundo/iran-y-pakistan-apuestan-por-cooperar-para-lograr-una-paz-duradera-en-afganistan/10001-4616333Fecha última consulta 15.09.2021.

16.    ZREIK, Mohamad. La reacción de China ante la retirada militar de Estados Unidos de Afganistán. Atalayar, 28 agosto 2021, disponible enhttps://atalayar.com/blog/la-reaccion-de-china-ante-la-retirada-militar-de-estados-unidos-de-afganistánFecha última consulta 15.09.2021.


 

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