Alemania impulsa el uso de hidrógeno verde en Marruecos: una victoria para la energía limpia
Alemania está comprometida a desarrollar una red de energía verde y sostenible con Marruecos. Está invirtiendo en proyectos de energía solar, eólica y energías marinas, así como en la producción de hidrógeno verde. Está buscando aprovechar la proximidad geográfica entre Marruecos y Alemania para mejorar la conectividad de energía entre ellos.
Mientras, Francia también está empeñada en afianzar su presencia en Marruecos en la carrera por el hidrógeno verde. El 6 de marzo, la delegación francesa MEDEF visitó el país para examinar posibles oportunidades de colaboración y desarrollar un programa de acciones conjuntas. Valérie Levkov directora de África, Oriente Medio y Mediterráneo Oriental del grupo público francés EDF, se reunió con autoridades marroquíes, encabezadas por la Oficina Nacional de Hidrocarburos de Marruecos (ONHYM), para abordar el desarrollo de un plan nacional para el hidrógeno limpio. Esta visita subraya el interés francés por fortalecer la cooperación internacional en la producción de hidrógeno sostenible. La última visita de Emmanuel Macron, presidente francés, a Marruecos tuvo como objetivo el fortalecimiento de la cooperación entre los dos países, especialmente en el campo de las energías renovables, enfocado en el hidrógeno verde.
En el marco de las negociaciones de la Directiva RED III de la UE, Alemania y España se han opuesto a la iniciativa francesa de considerar el hidrógeno producido a partir de la energía nuclear como “verde”. Esta postura es respaldada por otros países europeos, como Bélgica, Dinamarca y Finlandia. Mientras Francia desea que el hidrógeno producido a partir de la energía nuclear se considere como una energía renovable, Alemania y España argumentan que esto no es necesario ya que existen muchas otras fuentes de energías renovables disponibles. Por otro lado, Alemania está interesada en desarrollar la economía del hidrógeno para lograr la transición energética y mejorar su competitividad en el sector de energías renovables. Mientras, París busca aprovechar su herencia nuclear para obtener hidrógeno barato. Berlín ha invertido recursos y creado alianzas para desarrollar energías renovables e hidrógeno a bajo precio, por lo tanto, los alemanes han encontrado en Marruecos un socio estratégico para impulsar el sector de energías renovables.
El acuerdo PAREMA entre Marruecos y Alemania es una asociación energética que tiene como objetivo apoyar al Reino en su transición hacia una economía sostenible. Esto se logra mediante la cooperación en materia de investigación, desarrollo, formación y conocimiento técnico. El acuerdo también permite a las empresas alemanas integrarse en el panorama energético marroquí, así como la creación de una red de asociaciones entre instituciones educativas y empresas alemanas para promover el conocimiento técnico y la transferencia de tecnología.
Alemania está desarrollando una estrategia nacional de hidrógeno para lograr la descarbonización de la industria y el transporte, así como reducir la dependencia del gas ruso. El país está invirtiendo en la producción de este gas localmente, pero también busca garantizar el suministro invirtiendo en otros países. Marruecos es uno de los destinos de elección para esta estrategia, gracias a su posición geográfica, su sol y viento, y su infraestructura. Los estudios demuestran que el precio del hidrógeno producido en el Reino sería uno de los más competitivos del mundo, haciendo de Marruecos un proveedor esencial de hidrógeno verde para Europa, en general, y Alemania, en particular. El rey Mohamed VI ha decidido tomar medidas para que Marruecos se incorpore al club de países con alto potencial en el sector del hidrógeno verde. Por ello, ha dado instrucciones para desarrollar un operativo y un incentivo llamado "Marruecos Oferta" que abarca toda la cadena de valor del sector del hidrógeno verde. Esto incluye el marco normativo e institucional, así como el plan de infraestructuras necesarias para garantizar el desarrollo de este sector en el país norteafricano.
El transporte de hidrógeno es un reto para los países productores, y el uso de gasoductos es la mejor opción para lograrlo. Marruecos está considerando usar el Gasoducto Magreb-Europa para exportar su hidrógeno al mercado europeo, aunque requerirá una adaptación. Por su parte, el gasoducto H2Med tendrá la capacidad de transportar hasta 2 millones de toneladas de hidrógeno renovable al año una vez que entre en funcionamiento en 2030.
