Alemania investiga dos supuestos casos de espionaje ruso en el Ministerio de Economía
La Oficina Federal para la Protección de la Constitución (BfV) -la agencia de inteligencia alemana- está investigando a dos altos funcionarios del Ministerio de Economía por un presunto caso de espionaje ruso, según ha revelado el semanario político Die Zeit. De acuerdo con los informes, los dos acusados, que están “involucrados en el suministro de energía en puestos clave”, despertaron las sospechas de sus compañeros al defender posiciones prorrusas y criticar las decisiones del Gobierno de Olaf Scholz en materia de política energética, en particular la decisión de suspender el proyecto del gasoducto ruso-alemán Nord Stream 2.
Asimismo, según recoge el medio alemán, los dos funcionarios mantienen una “cercanía emocional” con Rusia, y uno de ellos estudió en el país. No obstante, esto no se puede considerar como una prueba clave, ya que muchos miembros de la élite política alemana han mantenido fuertes vínculos con el Kremlin en los últimos años. El mejor ejemplo es Gerhard Schröder, excanciller alemán que formó parte de la junta directiva del gigante ruso Gazprom y estuvo estrechamente involucrado en la construcción de Nord Stream 2.
A pesar de la investigación en curso, las autoridades alemanas no tienen “ninguna prueba clara” de que los dos sospechosos hayan actuado a favor de los intereses rusos. Sin embargo, Die Zeit advierte: “si se confirma el espionaje, será un fracaso total para el Gobierno alemán y una victoria para el Kremlin”.
Por otro lado, este no sería el primer caso de espionaje ruso en el país. Durante el mes de agosto, un tribunal de Düsseldorf juzgó a un reservista del Ejército alemán acusado de trabajar como espía ruso durante seis años. La Fiscalía acusa al antiguo oficial de filtrar información sobre el Ejército alemán y datos personales de altos cargos a agentes de la inteligencia militar rusa (GRU) que trabajaban en la embajada rusa en Berlín entre 2014 y 2020.
También, en agosto, la revista Der Spiegel denunció un caso de espionaje por parte de los servicios de inteligencia rusos con el objetivo de “agitar y sabotear” a Occidente. Asimismo, durante ese mes, se informó que las autoridades alemanas tenían indicios de que miembros de la inteligencia rusa espiaban a los soldados ucranianos que recibían entrenamiento militar en Alemania.
Semanas antes de que comenzase la invasión rusa sobre Ucrania, un tribunal de Múnich juzgó a un científico ruso acusado de revelar información relacionada con el programa espacial europeo Ariane. Igualmente, en septiembre de 2021 un empleado de una empresa de seguridad alemana fue acusado de facilitar los planos del Parlamento alemán a los servicios secretos rusos.
Alemania no es el único país europeo en el punto de mira de la inteligencia rusa. A finales de agosto, tres presuntos espías rusos fueron arrestados en Albania después de atacar a dos guardias en una base militar.
Los espías -dos ciudadanos rusos y uno ucraniano- han sido acusados por la Fiscalía albanesa de “obtener información secreta de carácter militar o de cualquier otro tipo para suministrarla a una potencia extranjera, lo que viola la independencia del país”.
?Disturbing from @Nato member country Albania. Russian suspected agents arrested, while two soldiers are injured, one in critical condition w/ “chemical agent” local media report. Ministry of Defense confirmed three foreign tried to enter weapons factory: https://t.co/4EQ2YtSnro
— Petrit Selimi (@Petrit) August 20, 2022
Al igual que ocurre en Alemania, este no es el primer caso de espionaje ruso en el país. El verano pasado dos ciudadanos rusos con visa turística fueron detenidos en la base aérea de Kucova.
