Hay acercamiento a pesar de la última ofensiva dialéctica del presidente turco Erdogan contra el Ejecutivo israelí a cuenta de la próxima anexión de territorios de Cisjordania

Aproximación entre Turquía e Israel por los intereses sobre el Mediterráneo

photo_camera AFP/RONEN ZVULUN Y OZAN KOSE - Combinación de imágenes del primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, y el presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan

En las últimas horas, Recep Tayyip Erdogan, presidente de Turquía, lanzó un serio aviso a Israel por el anuncio de la toma de territorios ocupados de Cisjordania, prevista para el 1 de julio por parte del nuevo Gobierno de coalición del primer ministro Benjamin Netanyahu y Benny Gantz. El régimen turco quiso reforzar así su tradicional postura de apoyo fraternal a los palestinos; pero, al mismo tiempo, existen diversas fuentes que hablan de contactos en la sombra entre otomanos e israelíes debido a intereses centrados en el mar Mediterráneo. 

Diferentes medios israelíes revelaron que el Ejecutivo del primer ministro Benjamin Netanyahu y el régimen del presidente Recep Tayyip Erdogan intercambiaron mensajes en secreto para mejorar las relaciones entre las dos partes. Diversos analistas también confirmaron que el mandatario turco y el primer ministro israelí han aparcado las divergencias entre ellos después de la formación del nuevo Gobierno hebreo. 

El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan

Israel Radio, citando a una fuente informada, dijo que Tel Aviv “recientemente transmitió a Ankara mensajes que sugerían que este usara la formación del nuevo Gobierno en Israel para mejorar las relaciones entre los dos países”; algo de lo que se hizo eco también el medio Al-Ain News. 

El surtidor de información añadió que el Estado turco estaba ahora a la expectativa ante la intención del Ejecutivo hebreo de anexar los asentamientos en Cisjordania. Aquí, Erdogan se mostró como gran adalid en la defensa de los intereses de Palestina al señalar que “nadie puede tomar las tierras de Palestina” y que no permitiría que las tierras palestinas “sean ofrecidas a nadie más”.

Vista general del asentamiento judío de Maale Michmash en Cisjordania

Las comunicaciones en la sombra entre ambos lados han sido silenciadas por la nación euroasiática; a pesar de las numerosas reuniones protagonizadas por las dos partes, según diversas fuentes. En este sentido, el Ministerio de Asuntos Exteriores de Israel publicó en redes sociales que se sentían “orgullosos de las relaciones diplomáticas con Turquía” y que esperaban que estas “se fortalezcan en el futuro”.

Ya en 2016, Turquía e Israel anunciaron que habían llegado a un acuerdo para normalizar los vínculos, pero la cuestión de Chipre y la contundente reacción de Turquía ante la decisión de los Estados Unidos de trasladar su Embajada a Jerusalén impidieron tranquilizar las aguas. 

El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, asiste a la primera reunión de trabajo del gabinete del nuevo Gobierno en el Parlamento israelí

Sin embargo, recientemente ha habido signos positivos de acercamiento. La decisión de Israel de no firmar una declaración de Francia, Grecia, Chipre, Emiratos Árabes Unidos y Egipto en la que se condenaban las acciones de Turquía en el Mediterráneo oriental hizo albergar esperanzas. Las afirmaciones de Israel en redes sociales alabando sus relaciones diplomáticas con Turquía alimentó aún más el optimismo. Los analistas turcos vieron los movimientos como una señal de la voluntad de ambos países de cooperar en materias como el sector energético en el Mediterráneo oriental. 

Erdogan podría estar aprovechando esta estrategia, aparentemente contradictoria, ante Israel, por un lado, de acercamiento, y, por otro, de ataques diplomáticos para así acercarse a sus objetivos expansionistas y económicos en el Mediterráneo y en Oriente Medio. 

Turquía lleva meses desplegando una campaña beligerante para ganar posiciones a través de la participación activa en las guerras de Siria y Libia. En el país árabe entró por el norte a través de la frontera turco-siria para hostigar a los kurdos, aduciendo como excusa que estos efectúan ataques terroristas en el sur del territorio turco; una posición que le enfrenta al régimen de Bachar al-Asad, asociado con la Rusia de Vladimir Putin, quienes buscan acabar con el reducto insurgente de Idlib bajo el pretexto de unificar el país y de acabar con los focos de terrorismo yihadista alojados en la zona (en este punto se acusa a Turquía de sustentar a miembros de ex filiales de grupos terroristas como Al-Qaeda que actúan como mercenarios a su servicio). Por otro lado, en la nación norteafricana las fuerzas turcas se alían con el Gobierno de Acuerdo Nacional (GNA) del primer ministro Fayez Sarraj en su lucha contra el Ejército Nacional de Libia (LNA) del mariscal Jalifa Haftar, quien trata de acabar con el último bastión resistente del GNA en la capital Trípoli; un GNA reconocido por la Organización de Naciones Unidas (ONU) desde 2016.

Una mujer participa en una protesta contra el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, que aparece en el cartel de la izquierda, mientras que el presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, aparece en el otro cartel, en Tel Aviv, Israel, el domingo 19 de abril de 2020

El presidente Erdogan suscribió un acuerdo con el primer ministro Sarraj para ofrecer su apoyo militar y logístico (incluidos mercenarios sirios pro-turcos procedentes de Siria), que incluía un pacto para el reparto de zonas de interés económico en aguas del Mediterráneo de cara a la prospección de gas, algo que colisionó con los intereses de Grecia. El país heleno acabó denunciando internacionalmente a Turquía al entender que estas zonas económicas invaden su propia plataforma y frontera marítima en el entorno de las islas griegas. 

Por otro lado, cabe destacar que Turquía también es el primer destino para los turistas israelíes, ya que estos viajan a Asia a través de territorio turco utilizando aerolíneas israelíes. Con datos, además, que confirman la escalada del intercambio comercial entre Turquía e Israel en los últimos años. Precisamente, este domingo se reanudaron los vuelos de carga entre Tel Aviv y Estambul después de 10 años de paréntesis con la llegada al aeropuerto de la capital turca de una aeronave de la compañía El Al que se desplazó para recoger ayuda humanitaria y el equipo sanitario imprescindible de cara a la lucha de Estados Unidos contra la pandemia del coronavirus. 

Llegada del primer avión de El Al a Turquía en una década

Además, la aerolínea Turkish Airlines ya anunció la vuelta de la operación de sus vuelos entre aeródromos turcos y el aeropuerto israelí Ben Gurion después de que fuera suspendida debido a la crisis sanitaria de la enfermedad COVID-19. Las compañías aéreas otomanas operan diariamente más de diez aviones entre ciudades turcas y el principal nodo aeroportuario israelí. 

Una fuente oficial hebrea acogió con satisfacción "la renovación del tránsito de los aviones de carga entre territorios israelí y turco para enfrentar la pandemia del coronavirus después de un lapso de 10 años". También reveló contactos para que Turquía e Israel firmen un acuerdo para demarcar las fronteras marítimas entre los dos países, según el medio Al Ain News. 

Esto se produjo después de que Turquía hubiese ofrecido también a Israel pasar un gasoducto de exportación de gas israelí a Europa a través del territorio turco, aunque Ankara protestó, por su parte, por un acuerdo entre Israel, Chipre y Grecia con respecto al paso de un gasoducto de exportación de gas submarino a través de estos países. 

En este escenario, la cooperación turco-israelí, por ejemplo, serviría a los intereses propios. Tras el descubrimiento de reservas de gas frente a las costas de Chipre en 2019, Israel, Grecia y Chipre firmaron un acuerdo para construir un gasoducto, conocido como EastMed, para transportar gas natural desde la parte oriental del Mediterráneo hasta Europa a través de Grecia, pasando por encima de Turquía. El proyecto cuenta con dificultades para su viabilidad por el alto coste y la caída de los precios de la energía. Ante esto, un gasoducto a través de Turquía es la mejor opción. Sin embargo, una fuente diplomática israelí manifestó que la agresiva retórica de Erdogan contra Israel y el apoyo de Turquía a la agrupación yihadista Hamás en Palestina siguen siendo impedimentos para los esfuerzos de normalización, según el medio Israel Noticias. 

El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu (D), el presidente de Chipre, Nicos Anastasiades (I), y el primer ministro de Grecia, Kyriakos Mitsotakis, se dan la mano en la 7ª cumbre trilateral Israel-Grecia-Chipre durante la cual se ha firmado el acuerdo del gasoducto EastMed

A pesar de todo, los esfuerzos para el entendimiento parecen claros. Recep Tayyip Erdogan ya anunció que Turquía "necesita a Israel" en Oriente Medio y viceversa; el ‘sultán’ pidió una mayor normalización de las relaciones entre los dos países que han sido tensas desde 2010. Turquía siempre ha sido considerada un aliado clave de Israel en la región antes de que la relación entre los dos países se deteriorara debido a un ataque de las fuerzas especiales israelíes contra un grupo de barcos turcos que transportaban ayuda a Gaza en 2010. El presidente turco lanzó un claro mensaje a través de un comunicado en los medios nacionales: "Israel necesita un país como Turquía en la región. También debemos aceptar el hecho de que también necesitamos a Israel. Es una realidad en la región". Erdogan agregó: "En el caso de que se implementen medidas recíprocas sinceras, alcanzaremos la normalización de las relaciones más adelante".

Turquía busca mejorar sus relaciones con Israel, especialmente después de tensar sus relaciones con muchos países vecinos. Funcionarios israelíes anunciaron a mediados de diciembre que Israel y Turquía habían alcanzado una serie de "entendimientos" para normalizar sus relaciones después de negociaciones secretas en Suiza. Un funcionario turco había anunciado anteriormente que se había registrado un "progreso" hacia un "acuerdo marco" entre los dos países, y subrayó al mismo tiempo que todavía no se había firmado ningún acuerdo.

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