Aumenta la tensión entre Lionel Messi y la directiva del Barcelona
La relación entre el ‘crack’ Lionel Messi y la junta directiva del FC Barcelona pasa por uno de sus peores momentos tras el cúmulo de diferencias que hay entre ambas partes, a las que se suma la última polémica relacionada con la rebaja de los sueldos de los jugadores en un 70% decretada por los rectores del club barcelonista; obligada por el agravamiento del mal momento económico que vive el club debido al parón actual de la actividad deportiva e institucional propiciado por la crisis sanitaria del coronavirus que azota al mundo entero. Una bajada de ficha que no elude el astro argentino, pero ante la que sí ha querido salir al paso para desmentir rumores sobre su oposición y la de sus compañeros ante tal medida.
El duro golpe financiero que está suponiendo la problemática del parón obligado por la propagación del COVID-19 para todos los ámbitos y sectores y para los equipos de fútbol en particular ha llevado a la práctica totalidad de estos a aplicar un programa de recorte de gastos de cara a compensar las pérdidas de ingresos por la interrupción de las competiciones y actos ligados a los clubes.
El Barcelona, que pasa supuestamente por una situación poco boyante en lo económico, también está padeciendo esta situación y la junta directiva presidida por Josep María Bartomeu tomó la determinación de imponer una rebaja salarial, defendida por los rectores del club. El propio Josep María Bartomeu indicó que era un alivio para las finanzas, justificando la medida: “Seríamos unos administradores irresponsables si no hubiéramos puesto en marcha esta rebaja”.
Este tema suscitó la polémica porque surgieron rumores de que la plantilla azulgrana no aceptaba esta decisión; ante los que Leo Messi tuvo que salir al paso enérgicamente, negando estas versiones (algunos comentan que incluso filtradas por el club) y explicando que había personas dentro de la institución que les querían presionar desde el principio para aceptar la reducción de sueldo, algo que los futbolistas iban a acatar sin problema alguno desde el principio.
Messi utilizó las redes sociales (sistema del que se ha servido varias veces de cara a pronunciarse sobre un asunto de calado) para salir al cruce de las acusaciones sufridas y para dejar claro que sus compañeros y él mismo estaban por la labor de arrimar el hombro y colaborar reduciendo sus emolumentos para mitigar la actual crisis; incluso llegó a anunciar que el plantel barcelonista, además de rebajarse el sueldo hasta un 70%, aportaría dinero para que el resto de empleados de la entidad (que también estaban afectados por esta especie de Expediente de Regulación Temporal de Empleo, ERTE) puedan cobrar el 100% de su salario.
En su cuenta oficial de Instagram, la máxima estrella culé dejó clara su postura y la de sus compañeros de cara a cooperar en la lucha frente al actual panorama y negando cualquier oposición a ayudar. “Mucho se ha escrito y se ha dicho sobre el primer equipo de fútbol del FC Barcelona en lo que se refiere a los sueldos de los jugadores durante este periodo de estado de alarma. Antes de nada, queremos aclarar que nuestra voluntad siempre ha sido aplicar una bajada del sueldo que percibimos, porque entendemos perfectamente que se trata de una situación excepcional y somos los primeros que SIEMPRE (utilizando aquí mayúsculas para enfatizar) hemos ayudado al club cuando se nos ha pedido. Incluso muchas veces lo hemos hecho por iniciativa propia, en otros momentos que lo creíamos necesario o importante”, explicó Messi, quien añadió: “Por ello, no deja de sorprendernos que desde dentro del club hubiera quien tratara de ponernos bajo la lupa e intentara sumarnos presión para hacer algo que siempre tuvimos claro que haríamos. De hecho, si el acuerdo se ha demorado unos días es simplemente porque estábamos buscando una fórmula para ayudar al club y también a sus trabajadores en estos momentos tan difíciles”.
El capitán azulgrana remarcó también que había llegado el momento de anunciar que “al margen de la rebaja de un 70%” del sueldo durante el estado de alarma”, iban a hacer “unas aportaciones también para que los empleados del club puedan cobrar el 100% de su sueldo mientras dura esta situación”.
Este encontronazo llega en un momento en el que Leo Messi es el auténtico baluarte deportivo sobre el que gira el fútbol y la producción ofensiva del equipo en el terreno de juego, siendo además el actual Balón de Oro, el jugador que más títulos atesora con el Barcelona y el primer capitán de la escuadra. Por lo tanto, el internacional por Argentina es el gran peso pesado de la plantilla y la voz más autorizada para tratar con los directivos azulgranas.
Este choque se suma a diferencias recientes que también han hecho tambalear la relación de la entidad con el ‘diez’, quien acaba contrato en verano de 2021 y está pendiente de una renovación que se puede poner cuesta arriba si hay que negociar con la actual directiva, con la que la relación no atraviesa obviamente por su mejor momento.
La última gran polémica previa tuvo que ver con un sórdido asunto relacionado con cuentas en redes sociales que criticaban durante a los jugadores más destacados del Barcelona e incluso a sus familias y que ensalzaban el trabajo hecho por los mandatarios barcelonistas. Surgieron rumores e informaciones sobre que esta actividad en internet estaba orquestada desde el propio club y los futbolistas pidieron explicaciones al presidente Bartomeu y sus colaboradores, quienes rechazaron cualquier vínculo con esta trama. Aunque las explicaciones recibidas por los futbolistas no les acabaron de convencer.
Por otro lado, previamente, Leo Messi se había enfrentado directamente a través de las redes sociales con el director deportivo Eric Abidal, a cuenta de los comentarios vertidos sobre la supuesta falta de compromiso de los jugadores con el anterior entrenador Ernesto Valverde. “Muchos jugadores no estaban satisfechos, ni trabajaban mucho”, llegó a apuntar Abidal (ex compañero de Messi entre 2007 y 2013). La máxima figura de la escuadra catalana respondió duramente a través de Instagram: “Sinceramente, no me gusta hacer estas cosas pero creo que cada uno tiene que ser responsable de sus tareas y hacerse cargo de sus decisiones. Los jugadores de lo que pasa en la cancha (...). Los responsables del área de la dirección deportiva también deben asumir sus responsabilidades y sobre todo, hacerse cargo de las decisiones que toman (...). Cuando se habla de jugadores, habría que dar nombres porque, si no, se nos está ensuciando a todos y alimentando cosas que se dicen y no son ciertas”.
Es de dominio público que Messi también estaba disconforme con la planificación deportiva de cara a este año, sobre todo respecto al fallido intento de repescar al brasileño Neymar Jr., gran amigo del argentino. “No sé si hicieron todo lo posible por fichar a Neymar”, declaró antes del inicio de la temporada el capitán barcelonista, quien puso condiciones para continuar en el equipo: "Quiero ver que hay un proyecto ganador. Quiero seguir ganando cosas en el club, quiero seguir consiguiendo cosas importantes".
Aunque también cabe destacar que la figura argentina siempre ha mostrado su predilección y amor por el equipo en el que ha crecido deportivamente hasta convertirse en la estrella que es ahora: “Lo que yo siento por este club va más allá de cualquier firma”. Esta manifestación fue expresada por Messi el pasado 2 de diciembre justo después de recibir su sexto Balón de Oro y dejaba algo más tranquilos a los aficionados culés que temen por una posible marcha del argentino. Amenaza que sigue latente porque termina su vínculo contractual al final de la temporada 2020-2021 y porque además existe una cláusula en su actual contrato que le permite abandonar el club este mismo verano sin que se tenga que abonar traspaso alguno.
