Boicots, bajada del precio del petróleo y la pandemia sumen a Qatar en una profunda crisis económica
“Nuestro análisis inicial india que, (…) el crecimiento del PIB de Qatar será negativo en 2020”. Esta frase, sacada de un informe del Banco Mundial sobre la situación económica de Qatar resume la complicada situación financiera que vive.
Qatar espera que la economía se contraiga este año en medio de los bajos precios del petróleo y la crisis del coronavirus.
Pero a esto se le debe añadir la decisión de varios Estados vecinos de boicotear a Doha en 2017. En junio de ese año, Arabia Saudí, Emiratos Árabes Unidos, Bahréin y Egipto decidieron cortar relaciones diplomáticas con Doha por el apoyo qatarí al terrorismo.
Además, la caída del tráfico de viajes en Qatar Airways en medio de una pandemia que ha reducido considerablemente el número de vuelos ha obligado a la empresa del Gobierno qatarí a devolver más de 1.000 millones de dólares a miles de clientes.
Según Al-Ain, en los últimos cinco meses, la aerolínea habría reembolsado 1.200 millones de dólares, lo que correspondería al 96% de los reembolsos solicitados desde marzo.
Por su parte, el Gobierno de Qatar ha emitido letras del Tesoro a los mercados de deuda del país por valor de 600 millones de riales qataríes (165 millones de dólares).
Los mercados de Qatar han sufrido una caída acelerada en su liquidez, sobre todo los extranjeros, lo que ha llevado al Ministerio de Economía y al Banco Central de Qatar a acudir a los mercados de deuda internacionales para proporcionar liquidez.
El índice general de la Bolsa de Valores de Qatar descendió en un 0,47%, perdiendo 46,60 puntos para cerrar en 9767,18 puntos, lo que no son buenas noticias para la economía qatarí.
