Brasil reabastece petroleros iraníes a pesar de la negativa inicial

Raúl Redondo

Pie de foto: Imagen de petrolero Bavand. ParanáPortal/Divulgação/APPA

Brasil ha tomado la determinación de reabastecer a los dos petroleros iraníes que estaban detenidos desde hace dos meses en el puerto de Paranagua, en las costas del estado brasileño de Paraná, tras haberse quedado sin combustible, lo que les dio la opción de reemprender la marcha hacia los destinos que tenían determinados previamente.

Hasta el momento, la petrolera estatal brasileña Petrobras se había cerrado en banda a suministrar el combustible necesario para las embarcaciones persas,pero una decisión judicial tomada por el presidente del Tribunal Supremo Federal de Brasil, Días Toffoli, decretó el mandato de obligar a servir lo necesario para que los navíos volviesen a navegar. 

El buque MV Bavand transportaba maíz y, por su parte, el MV Termeh tenía como objetivo recibir un cargamento de trigo en el puerto carioca de Imbituba. El primero atracó el 8 de junio y el segundo el día siguiente en Paranagua para obtener el combustible necesario de cara a continuar su travesía. Pero se enfrentaron de lleno con la negativa oficial y de la compañía Petrobras, que pretendían seguir en un principio la directriz de Estados Unidos, país que ha impuesto a Irán sanciones económicas y políticas después de que la Administración de Donald Trump decidiese abandonar el pacto nuclear suscrito en 2015 con Irán y otros países como Rusia, China, Francia, Alemania y Reino Unido, por el que se controlaba el programa atómico del régimen de los ayatolás a cambio de ciertas contraprestaciones políticas y económicas. Un acuerdo, el Plan Integral de Acción Conjunta (JCPOA, por sus siglas en inglés), que en las últimas fechas ha recibido un espaldarazo por parte del resto de países firmantes para que no acabe saltando por los aires. 

Brasil y Petrobras respetaron en un primer momento la doctrina norteamericana, que, con las sanciones decretadas, trata de ahogar económicamente a Irán golpeando en su principal fuente de financiación, que es el comercio de petróleo; pero la decisión judicial dictaminada ha obligado a dar suministro a los cargueros iraníes, que van a poder seguir trabajando en favor del comercio de crudo persa a pesar de que esto va en contra de las sanciones estadounidenses. Ya anteriormente, el propio presidente de Irán, Hasan Rohaní, había anunciado que no iban a acatar estas medidas sancionadoras y que iban a seguir tratando con su ‘oro negro’.

Junto a la decisión del Tribunal Supremo Federal, hay que tener en cuenta también que la nación brasileña presidida por el controvertido Jair Bolsonaro, socio afín a EEUU y al Gobierno Trump, se ha visto en la disyuntiva de, por un lado, apoyar a la Administración norteamericana y, por otro, enfrentarse a Irán, gran enemigo de los americanos, aunque también país con el que Brasil tiene intereses creados. No obstante,Irán es uno de los mayores importadores de maíz brasileño, así como de soja y ternera. 

Pie de foto: Jair Bolsonaro, presidente de Brasil.

En este sentido, Irán amenazó al país sudamericano con suspender sus importaciones si no se permitía a sus petroleros el reabastecimiento de combustible en puerto brasileño, lo que supondría un duro golpe para la economía de la nación sudamericana, al perder un importante ‘cliente’ en algunos de los productos clave de su exportación. En estos términos, el embajador de Irán en Brasilia, Seyed Ali Saghaeyan, señaló que, si no se solucionaba la problemática, tal vez, las autoridades de Teherán querrían haber “tomado alguna decisión porque el mercado es libre y hay otros países disponibles”, según declaraciones recogidas por los medios Bloomberg e Infobae.

El diplomático iraní remarcó ante diversos medios de comunicación brasileños que su nación podría contactar fácilmente con otros países proveedores de maíz, soja y carne si el Ejecutivo brasileño se negaba a aportar combustible a sus embarcaciones detenidas en el estado de Paraná. Un hecho para tener en cuenta porque Irán importa desde Brasil una tercera parte de todas las exportaciones de maíz. 

Todo esto dejó en una difícil situación a Brasil; más aún teniendo en cuenta que el presidente Bolsonaro ha manifestado en muchas ocasiones su adhesión a la política que lleva a cabo EEUU en Oriente Medio y su estrecha afinidad a la idelogía del presidente estadounidense Donald Trump. Finalmente, Brasil ha transigido, en esta ocasión, con la exigencia iraní y ha suministrado el combustible suficiente, tanto al buque Bavand, que partía de regreso a Irán, como al Termeh, que se dirigía al puerto brasileño de Imbituba.