Un Boeing C-17 Globemaster de la Fuerza Aérea de Estados Unidos aterrizó, el pasado fin de semana, en suelo polaco, cerca de la frontera con Ucrania, transportando soldados estadounidenses de élite, así como equipamientos y vehículos militares. “Como se anunció, los primeros elementos del grupo de batalla de la brigada de la 82 División Aerotransportada del Ejército de los Estados Unidos han llegado a Polonia”, dijo un militar polaco.
Los soldados llegaron a la base militar de Rzeszow, al sureste de Polonia, cerca de su frontera con Ucrania. El envío de tropas se produjo después del anuncio del presidente Joe Biden, el pasado miércoles, del despliegue de 1.700 tropas en Europa del Este, como consecuencia al despliegue ruso de más 100.000 soldados a lo largo de todas sus fronteras con Ucrania, aunque niega cualquier intención de invadir a su país vecino. Desde 2017, alrededor de 4.000 soldados estadounidenses han estado presentes en territorio polaco de forma rotativa.
“Nuestra contribución nacional aquí en Polonia muestra nuestra solidaridad con todos nuestros aliados aquí en Europa y, obviamente, durante este período de incertidumbre, sabemos que somos más fuertes juntos”, dijo a la agencia de noticias AP el mayor general Christopher Donahue, comandante de las tropas y último soldado estadounidense en abandonar Afganistán en agosto. Mariusz Blaszczak, ministro de Defensa de Polonia, alabó el despliegue, y añadió que “la disuasión y la solidaridad son la mejor respuesta a la política agresiva de Moscú, al intento agresivo de reconstruir el imperio ruso”.
Asimismo, John Kirby, secretario de prensa del Departamento de Defensa norteamericano, anunció, la semana pasada, otro despliegue de soldados desde su estación en Fort Bragg, Carolina del Norte, unos 2.000 soldados en dirección a Alemania y Polonia, en los próximos días. “Quiero ser muy claro sobre algo: estos no son movimientos permanentes”. "Son movimientos diseñados para responder al entorno de seguridad actual. Además, estas fuerzas no van a luchar en Ucrania. Van a garantizar la sólida defensa de nuestros aliados de la OTAN”, manifestó.
El pasado viernes, llegaron los refuerzos estadounidenses a Wiesbaden, Alemania, informó el Comando Europeo del Ejército estadounidense, quien dijo que establecerían un Cuartel General en el país germánico para apoyar a los 1.700 soldados desplegados en Polonia. De acuerdo con un informe del New York Times, las tropas rusas no se encuentran preparadas para una invasión total de Ucrania, pero sí que “parecen estar en las etapas finales de preparación para la acción militar si el Kremlin lo ordena”.
Según se están produciendo los despliegues de los militares estadounidenses, Andriy Zagorodnyuk, exministro de Defensa de Ucrania, durante una entrevista con el medio británico The Guardian comentó que “Rusia cuenta con material suficiente para apoderarse de Kiev y otra ciudad del país”, pero que no cuenta con la suficiente fuerza para llevar a cabo una ocupación total. Dichas declaraciones coincidieron con el anuncio de funcionarios estadounidenses del agrupamiento de al menos el 70% de la potencia militar rusa para la realización de una operación militar a mediados de febrero.
La Casa Blanca, en estas ultimas semanas, ha ido anticipando el comienzo de una hipotética invasión, en torno al 15 de febrero. Alrededor de esa semana, el país más grande del mundo habría completado su despliegue inicial, por lo que procedería a realizar su primer avance en territorio ucraniano, aunque solo supone una hipótesis planteada por la Administración norteamericana.
Ante estos sucesos, el gigante americano tiene preparado, de manera adicional, un total de 8.500 tropas estadounidenses por si fuese necesario un despliegue inminente, estas se encuentran en alerta máxima y se espera que los ministros de Defensa de la OTAN discutan si añaden más refuerzos durante la próxima reunión de 16 al 17 de febrero. “La mejor respuesta a una amenaza, el único método para garantizar la seguridad de Polonia y de otras naciones de la OTAN en el flanco oriental de la alianza”, dijo Blaszczak.
Coordinador de América: José Antonio Sierra.
