El cuarteto Masharabiya tocará en concierto en la Fundación Tres Culturas

Redacción

El grupo musical Masharabiya ofrecerá un concierto gratuito en la sede de la Fundación Tres Culturas en Sevilla el próximo jueves a las 20.00

Este proyecto surge de una cena compartida, multicultural, que termina en un espacio musical, mestizo en el que laud y el clarinete se funden en un abrazo apasionado. Este encuentro es el inicio de un proceso de búsqueda de sonoridades, de matices, de cadencias, con sabor a Medio Oriente que desemboca en este este grupo musical, donde clarinete (Oscar Acedo) y laud (Mohannad Doughem) son arropados por la calidez de la madera del violonchelo (Carmen Fernández Ruiz) y la cadencia rítmica de percusión (Chiqui García).

El grupo cuenta con la presencia de Mohannad Doughem, prestigioso músico sirio refugiado en Sevilla. Su participación en grupos y sus actuaciones como solista lo ha llevado a países como Libia, Argelia, Suecia o España, formando parte del grupo “Alwda” de la embajada palestina en Argelia, participando en el Festival de El Oued (Argelia) o actuando en el Teatro Al Bassel de Alepo (Siria). También ha participado en las noches de los jardines de Real de Alcázares de Sevilla. Desde 2015 reside en España donde continúa su formación de manera autodidacta, actuando como artista invitado en eventos y festivales (Sevilla, Málaga, Madrid) y colaborando con diferentes entidades y formaciones musicales. 

 
La Fundación Tres Culturas ofrece este concierto enmarcado en el proyecto Soundroutes, "Rutas de sonido. Notas para acercarse" un proyecto promovido por Marmaduke, una agencia de música con sede en Sevilla (España) en cooperación con la ONG italiana Un Ponte Per ..., el Festival de Jazz de Bolonia, la Escuela de Música Folclórica Ivan Illich (Italia), la Berliner Brauerei Wissmannstraße eV - Werkstatt der Kulturen, y la asociación cultural Vzw De Vergunning (Bélgica). 

Más en Cultura
Dos españolas, una médica y una periodista, forjan su relación en un viaje en el mítico tren que ancló a Siberia en el Imperio de los zares, y la asoció definitivamente a la dramática historia de la Unión Soviética

Sara y Eva en el transiberiano