El desplome de FTX deja huella en Miami
Las criptomonedas se han caracterizado por posicionarse en zonas donde sus usuarios las convierten en una especie de idolatría ya que comparte sus experiencias con el uso de las monedas digitales al punto de alcanzar la tan anhelada libertad financiera a base de las inversiones cripto. Si desea obtener más información sobre el comercio de bitcoins, puede visitar este sitio web llamado BitSoft360.
Es así como determinados estados o países en el mundo se han ido apegando a las oportunidades que estos instrumentos financieros ofrecen, considerándolos la opción perfecta para crear su propio ecosistema de inversión y capitalización en el tiempo.
Durante el último año las alarmas se mantuvieron encendidas tras el colapso de diversas plataformas de intercambio siendo la más reciente FTX creando incertidumbre, zozobra y pánico entre los usuarios e inversionistas.
Para nadie es un secreto que muchos perdieron cantidades de dinero bastante significativas, mientras otras quedaron sin empleo, tras los despidos masivos de dichas plataformas, así como también muchos equipos deportivos fueron patrocinados por plataformas de intercambio y este fue el caso de la marca Miami.
Miami se desploma con FTX
Posiblemente una de las demostraciones de confianza que se han visto en el entorno cripto además de El Salvador se encuentra Miami, el estadio deportivo que apostó todo a las monedas digitales al punto de cambiar su nombre a FTX Arena durante el año 2021.
Donde incluso el alcalde de Miami destacó que este sería el primer cripto capital del mundo, para unos meses después ver cómo FTX la plataforma de intercambio de criptoactivos con mayor reputación en el mundo se desplomó al punto de declararse en quiebra.
Ante esta situación tan compleja el logo de FTX desapareció, afectando Miami la cual había sido considerada la ciudad donde las personas llegarían a impulsar sus inversiones financieras digitales, dando paso a una nueva era de finanzas descentralizadas, donde la legalidad y la moralidad han sido sus principales atributos.
Se podría decir que ha sido los 20 meses más duros y complejos para la marca Miami, puesto que desde hace tiempo vienen trabajando fuertemente en el progreso y transformación de esta ciudad para erradicar la imagen de sol, bebidas y fiestas que ha demostrado una imagen errada que lo que existe en esta zona de gran potencial económico, financiero y educativo.
La intención original era hacer de Miami una ciudad de categoría mundial, con las innovaciones tecnológicas y financieras que dieran paso a una nueva propuesta de mercado e inversión que sirviera de ejemplo para el mundo, apostándolo todo a las criptomonedas.
Las criptomonedas y los NFT parecían la estrategia perfecta para convertir a Miami en la meca de la tecnología y la nueva forma de invertir, solo que al destaparse el caos que había tras el Exchange FTX, salieron realidades inesperadas, como lavado de dinero, estafas, evasión de impuestos, características que para nada concuerdan con la imagen que se deseaba proyectar.
Es en este momento en que los dueños de la marca Miami deciden detener esta catástrofe criptográfica que se lleva a su paso todo lo que esté relacionado con las monedas digitales, es allí cuando toman la decisión de cambiar el nombre del FTX Arena a Miami-Dade Arena.
Miami como centro mundial para Bitcoin
Desde el momento en que se creó Bitcoin han sido muchos los eventos que se han realizado en pro del uso y adopción de las monedas digitales a nivel mundial y allí ha estado presente Miami como estado líder en cuanto a infraestructura bancaria desarrollada así como un conjunto de inversionistas con grandes capitales que desean apostar al financiamiento de la innovación tecnológica.
Es interesante el enfoque que se ha dado al uso de las monedas digitales con el paso del tiempo, posiblemente como en cualquier mercado financiero los activos suelen subir y bajar de precio y esto no es algo extraño, pero, en el caso de las criptomonedas es un poco diferente.
El año pasado no fue para nada un año de ganancias económicas, más si de ganancias a nivel de sostenibilidad de los activos cuya capitalización de mercado los ha mantenido en los primeros lugares de comercialización.
Puede que los precios hayan alcanzado picos inesperados donde las pérdidas no distinguen entre inversionistas institucionales y particulares puesto que por partes iguales todos se vieron afectados, solo que tantos golpes no permitieron que el mercado de criptoactivos desapareciera, al contrario dio una fuerte muestra de lucha.
Conclusión
En este año se esperan cambios drásticos en cuanto a la adopción de las monedas digitales, ya que se ha avanzado en relación con el tema de regulación de las criptomonedas, donde hasta las entidades financieras están en la búsqueda y creación de sus propios tokens para involucrarse en el mercado financiero digital.
Puede que las caídas de muchos proyectos criptográficos y Exchange no hayan permitido una consolidación de las monedas digitales, pero, todo lo que cae siempre vuelve a subir.
