En un breve comunicado, el presidente de Argelia ha anunciado que volverá al país en los próximos días

El presidente argelino Abdelmadjid Tebboune anuncia su vuelta

photo_camera AFP/RYAD KRAMDI - El presidente de Argelia, Abdelmadjid Tebboune

Abdelmadjid Tebboune, presidente de Argelia desde hace casi un año, anunció el lunes por la noche en un breve comunicado, que su recuperación evoluciona favorablemente, y que su vuelta a Argelia se producirá “en los próximos días”. El presidente, que ya habría abandonado el hospital alemán donde se encontraba, continúa sin embargo recuperándose en el país por prescripción médica.

El pasado 28 de octubre, el presidente de Tebboune fue trasladado a Alemania para vigilar su evolución tras haber estado en contacto con varios miembros de su Gobierno que habían dado positivo por coronavirus unos días antes. Tebboune estuvo ingresado desde el 24 de octubre hasta su traslado a Alemania, en el hospital militar Ain Naadja, en la capital argelina.

Durante este mes que en el que el presidente se ha encontrado en Alemania, se produjo en Argelia el referéndum para la nueva Constitución. Éste, que tuvo lugar el 1 de noviembre y que demostró la ruptura total entre la sociedad argelina y su clase política, apenas atrajo el voto de un 23% del electorado, del cual sólo dos terceras partes – un 66% – voto, además, a favor. Una de las primeras tareas que tendrá a su vuelta el presidente argelino será precisamente la de promulgar esta nueva Constitución, además de ratificar la Ley Presupuestaria para 2021.

La visión de Tebboune siendo trasladado a Alemania, junto a la edad – 75 años – y la vinculación con el pasado político reciente de Argelia, han alimentado, aún más, su comparación con Bouteflika, que también fue trasladado por cuestiones médicas al extranjero en varias ocasiones. La presidencia de Tebboune ha sido enormemente criticada por el movimiento de la Hirak, el nombre que reciben las protestas sociales que llevan sacudiendo el país durante algo más de un año. Desde el Movimiento se entiende que el cambio de Bouteflika por Tebboune no es más que un cambio de cromos en el régimen argelino, y que se busca cambiar todo para que, en realidad, nada cambie, siendo la nueva Constitución, el ejemplo más claro.

Más allá de la visión que las protestas tienen de la labor del presidente argelino, preocupa que su convalecencia y su edad puedan pasar factura a su presidencia, lo que conllevaría la necesidad de buscar un nuevo sucesor que contase con el visto bueno del estamento militar argelino, con gran influencia sobre la vida política del país. En cualquier caso, de producirse un extenso proceso de recuperación, podría aplicarse el artículo 102 de la Ley Fundamental para cubrir la vacante del presidente – algo que algunas voces ya reclaman – y que significaría la presidencia interina de Salah Goudjil, actualmente al frente del Senado.

El comunicado de Tebboune busca calmar esas voces discrepantes que solicitaban cubrir su falta a través del citado mecanismo. Sin embargo, pese a su vuelta, la incertidumbre política se mantendrá en Argelia, con una sociedad que sigue protestando en la calle y que considera el lavado de cara iniciado por Tebboune como una pantomima y reclama cambios estructurales en el país.