El presidente de Argelia anuncia la formación del nuevo Gobierno
La sociedad argelina expresó su descontento con una abstención masiva del 77% en las elecciones legislativas del pasado 12 de junio. Varias formaciones políticas de la oposición decidieron, además, boicotear los comicios. Sin embargo, un mes después de la votación Argelia por fin conoce a su nuevo Gobierno en mitad del creciente descontento social.
El presidente argelino, Abdelmadjid Tebboune, nombró el miércoles a los cargos del nuevo Ejecutivo. El exgobernador del Banco de Argelia, Aïmen Benabderrahmane, estará al frente del Gobierno como primer ministro en sustitución de Abdelaziz Djerad, tal y como se adelantó la semana pasada, mientras conserva de forma simultánea la cartera de Finanzas.
Tebboune ha acometido pocos cambios con respecto del anterior Gobierno, aunque ha apostado por reducir el número de carteras. El gabinete argelino pasará de contar con 36 ministros a funcionar con 34, 15 de los cuales formaban parte del Ejecutivo anterior. Por lo tanto, la mayoría ha conservado su puesto en la administración.
Entre las caras nuevas del nuevo Gobierno se encuentra Ramdane Lamamra, quien dirigirá la cartera de Exteriores como reemplazo de Sabri Boukadoum. Lamamra regresa así a un puesto que ocupó entre 2013 y 2017. El diplomático llegó a ejercer como viceprimer ministro durante las últimas semanas del mandato de Abdelaziz Buteflika.
Lamamra desempeñó, además, el cargo de comisionado de Paz y Seguridad de la Unión Africana (UA) antes de formar parte del Gobierno argelino, y el puesto de Alto Representante para Silenciar las Armas en África –también dependiente de la UA– una vez fuera del cargo.
El expresidente del Tribunal Supremo de Argelia, Abderrachid Tebbi, releva al impopular ministro Belkacem Zeghmati como ministro de Justicia. Este último ha dirigido investigaciones judiciales en casos de corrupción contra personas vinculadas al expresidente Buteflika.
El ingeniero Mohamed Arkab mantendrá su puesto al frente del Ministerio de Energía. El reto principal de Arkab pasa por recuperar la fuente de financiación principal del Estado. Argelia, miembro de la OPEP y dependiente del ‘oro negro’, vio drásticamente reducidos sus ingresos del petróleo a raíz de la crisis originada por la COVID-19 y trata de recomponerse del golpe.
El titular de Salud, Abderrahmane Benbouzid, también continuará en el cargo. Según los expertos, para dar continuidad a la institución en medio de la crisis sanitaria y la campaña de vacunación.
Mientras que Kamel Belyud, en Interior; Yucef Belmahdi, en Asuntos Religiosos y Kamel Rezig, en Comercio, siguen formando parte del gabinete. A este último, envuelto en varias polémicas a raíz de sus declaraciones en contra de la rotulación en otros idiomas que no sean árabe para los negocios, le ha sido asignado además el sector de la promoción de las exportaciones.
Otra de las novedades estriba en el nombramiento de cuatro mujeres que pasarán a formar parte del Ejecutivo, dos de las cuales ejercían como titulares en el gabinete previo. Samia Mwalfi como ministra de Medio Ambiente, Wafa Shallal al frente del Ministerio de Cultura, Kowther Krikou como ministra de Solidaridad Nacional, y la abogada Basma Azwar encargada de las relaciones con el Parlamento.
El nuevo Ejecutivo sale a la luz tras recibir la aprobación del presidente y del Consejo de Ministros, así como de la Asamblea Nacional Popular y del Consejo de la Nación.
Los tecnócratas conforman la columna vertebral del nuevo Gobierno. El mejor ejemplo es el primer ministro Benabderrahmane, quien liderará un gabinete integrado en su mayoría por técnicos ajenos a la política partidista y miembros destacados de las formaciones políticas que han respaldado durante los últimos meses al presidente Tebboune.
Los nombramientos han cumplido las peores previsiones de los Hermanos Musulmanes. Ningún miembro de la Sociedad para el Movimiento de la Paz (Hams), máximos representantes del islamismo en Argelia, pasará a formar parte del Ejecutivo pese a ser la tercera formación más votada.
El líder del Hams, Abderrazak Makri, anunció que el partido desestimó la oferta lanzada por Tebboune en el marco de las consultas políticas entre la presidencia y los partidos vencedores en los comicios.
El presidente solicitó a los islamistas que enviasen una lista con 27 candidatos para, posteriormente, seleccionar a cuatro de ellos para pasar a formar parte del gabinete. Una oferta que no satisfizo las aspiraciones de la Sociedad para el Movimiento de la Paz.
Makri declaró que “la oferta recibida por el partido para entrar en el gobierno no nos permite influir en la política y la economía, como nos habíamos comprometido con los votantes”. Por este motivo, la formación declinó entrar en el Ejecutivo.
Argelia pretende calibrar el respaldo social al nuevo Gobierno durante las próximas semanas. La crisis social, política y económica que atraviesa el país norteafricano salió a la superficie con la abstención masiva, a la que el presidente no concedió importancia.
