El presidente ejecutivo de CAF, Sergio Díaz-Granados, destaca la ambiciosa agenda del banco para América Latina
El presidente ejecutivo de CAF -banco de desarrollo de América Latina-, Sergio Díaz- Granados, presidió un foro con empresarios en CEOE, que sirvió para conocer de primera mano las líneas de actuación de CAF en sectores afines a las empresas españolas, como los relacionados con la infraestructura, el desarrollo urbano, la sostenibilidad y la acción climática, entre otros; así como la nueva propuesta de valor del apoyo de la institución al sector privado. Inauguraron la jornada la secretaria de Estado de Comercio, Xiana Méndez; el vicepresidente de CEOE, Íñigo Fernández de Mesa; y la directora general de la Cámara de Comercio de España, Inmaculada Riera.
El vicepresidente de CEOE, Íñigo Fernández de Mesa, destacó que Latinoamérica es una región de enorme importancia para las empresas españolas, que están muy presentes en sectores clave, como la banca, la energía, la comunicación, la construcción y la gestión de infraestructuras, servicios tecnológicos, turismo y prestación de servicios públicos. En este sentido, subrayó que “el Banco de Desarrollo de América Latina juega un papel esencial, como garante de la financiación de las inversiones, que son necesarias para aumentar el potencial de crecimiento, hacerla más competitiva y atractiva a escala internacional y mejorar el nivel de vida de sus ciudadanos”.
Sin la presencia de las empresas españolas en Iberoamérica nuestra economía sería hoy muy distinta, más débil, volátil y dependiente únicamente del ciclo económico español y europeo, aseguró el vicepresidente de CEOE. En este contexto, “las alianzas público-privadas juegan también un papel determinante, por lo que no quería dejar de mencionar la importancia del trabajo que venimos desarrollando desde el tripartito. Esa alianza que mantenemos la Secretaría de Estado de Comercio, Cámara de Comercio de España y CEOE, a través de la organización de encuentros regionales, bilaterales y sectoriales, que tantos y tan buenos resultados nos está dando, impulsando el proceso de internacionalización de nuestras empresas y mejorando la competitividad y productividad de nuestra economía”, manifestó.
En el foro empresarial, la secretaria de Estado de Comercio, Xiana Méndez, promovió la presencia de las empresas españolas en América Latina y Caribe incidiendo que “la región Iberoamericana ha sido, es y será una prioridad para España. Las relaciones económicas se han ido profundizando en los últimos años, afianzando nuestra relación comercial y de inversiones”. De hecho, subrayó que en el último año hay una senda ascendente en los intercambios comerciales entre España e Iberoamérica y se han recuperado los niveles previos a la crisis sanitaria de la COVID-19, por lo que “nuestro sector exterior es una pieza clave en la recuperación económica tanto de España como de Iberoamérica”. Incidió, además, en el compromiso firme de las empresas españolas con esta región, a pesar del difícil contexto internacional de los últimos años marcado por la pandemia; y la evolución positiva de las inversiones, donde “el crecimiento ha sido espectacular, situándose España como el segundo país inversor en Iberoamérica, tan solo superado por Estados Unidos”.
En este ámbito, Xiana Méndez destacó el papel de CAF para fomentar el desarrollo empresarial entre esta región y España, con el que se tienen firmados Memorándums de Entendimiento con COFIDES y FIEM. Su finalidad es la de promover la colaboración en proyectos de interés español en América Latina, que impulse una economía más sostenible e inclusiva mediante el cofinanciamiento en sectores como el de infraestructuras, desarrollo social, educación, salud, desarrollo sostenible, energías renovables y suministro de aguas, entre otros.
Inmaculada Riera, directora general de la Cámara de Comercio de España, ha destacado el papel de CAF desde el inicio de sus operaciones en 1970, como brazo financiero de la integración andina, así como su actuación frente a los retos que planteó la pandemia. Riera se ha referido a la responsabilidad de Cámara de España ayudando a las empresas e instituciones iberoamericanas a afrontar oportunidades y desafíos, al “convencimiento de que la agenda de actuación y alianzas estratégicas en los próximos años se basarán en la colaboración público-privada” para la movilización de conocimiento, tecnología, innovación e inversión, “y en la que las instituciones financieras multilaterales como CAF jugarán un papel fundamental”.
En el panel “La importancia de CAF en el desarrollo de América Latina”, intervinieron el presidente de CAF, Sergio Díaz-Granados; el vicepresidente Corporativo de Programación Estratégica, Christian Asinelli; el vicepresidente del Sector Privado, Jorge Arbache, y la nueva gerente de Acción Climática y Biodiversidad Positiva de CAF, Alicia Montalvo, quienes realizaron una presentación de la institución, sus líneas de actuación; y analizaron su estrategia de futuro, haciendo especial hincapié en las oportunidades de inversión en los países de América Latina.
El presidente de CAF, Sergio Díaz-Granados, destacó el nacimiento y evolución del Banco de Desarrollo de América Latina, que hoy en día se ha convertido en la principal institución financiera de la región. En una primera fase, subrayó, se dieron cuenta de que había que cambiar el plan de negocio y comenzar a invertir en sectores fundamentales, como las infraestructuras. Gracias a esta iniciativa, explicó, el banco creció y dejo de ser andino para convertirse en una entidad internacional.
En una segunda fase, prosiguió Díaz-Granados, entró España al directorio de CAF, lo que contribuyó a mejorar la calidad crediticia del banco. Cuando pasó a formar parte de la entidad, CAF contaba con 3.000 millones de dólares de financiación y el año pasado esta cifra alcanzó los 13.200 millones, lo que supuso un importante apoyo para la región durante la pandemia.
Actualmente, según Granados, se ha aumentado el patrimonio del Banco en 7.000 millones de dólares, lo que permitirá hacer una inversión de 25.000 millones en crecimiento verde hasta el año 2026, una nueva línea de financiación de la entidad a la que le quieren dar la máxima prioridad. "CAF no es solo un banco que financia obras, sino que es el mayor activo con el que cuenta América Latina y el Caribe”, señaló su presidente; quien incidió también en el gran compromiso que tiene CAF con España, como socio estratégico para hacer realidad proyectos de interés en la región.
El vicepresidente Corporativo de Programación Estratégica, Christian Asinelli, y la nueva gerente de Acción Climática y Biodiversidad Positiva de CAF, Alicia Montalvo, destacaron una renovada agenda de proyectos de CAF, más conocido como el “banco verde” de América Latina y el Caribe. Incidieron, como ya hizo el presidente del banco, en la movilización de 25.000 millones de dólares en los próximos 5 años para impulsar la acción climática y la conservación de la biodiversidad. De esta manera, explicaron, se pasará de un 24% en 2021 a un 40% de financiación verde en todas sus operaciones en 2026, y un 50% en 2030.
La finalidad, según Montalvo y Asinelli, es promover la transición energética, la reforestación y la recuperación de bosques; incorporar criterios de sostenibilidad en todas las operaciones, desarrollar nuevos instrumentos financieros y atraer capital de mercados internacionales; promover infraestructura sostenible y resiliente al cambio climático; e impulsar alianzas con actores estratégicos, para generar soluciones de mitigación y adaptación.
Por último, el vicepresidente del Sector Privado de CAF, Jorge Arbache, aseguró que en América Latina las empresas son pequeñas y poco productivas, mientras que lo que se necesita es ayudarlas a crecer para que se hagan fuertes y dinámicas. Destacó también, como sus predecesores, la importancia de la transición energética en la región, gracias a sus numerosos recursos naturales, y apostó por el desarrollo del mercado regional de carbono y por el hidrógeno verde. Es crucial, valoró, apoyar con firmeza la reactivación económica, pero “hay que crecer de manera no solo sostenible, sino sostenida, con menos volatibilidad y más previsibilidad”. El banco contempla una ambiciosa agenda, que según Arbache, necesita el apoyo de aliados estratégicos para hacerla realidad y, sin duda, España es uno de ellos.
