Estados Unidos destaca a Jordania como “un socio de seguridad clave”
Estados Unidos y Jordania vuelven a retomar relaciones tras cuatro años de poco o nulo entendimiento entre ambos. La anterior Administración estadounidense de Donald Trump decidió ignorar al reino hachemita mientras dio prioridad a sus relaciones con los países del Golfo como Emiratos Árabes Unidos o Arabía Saudí. Sin embargo, el actual presidente estadounidense, Joe Biden, ha vuelto a elevar al país jordano a una posición relevante en el escenario internacional y también regional recibiendo al rey Abdalá II en la Casa Blanca.
El rey jordano se convierte en el primer jefe de Estado árabe en visitar Washington desde el inicio de la Administración Biden, lo que indica un claro cambio de rumbo en la sintonía entre Estados Unidos y Jordania. Joe Biden, ante la prensa momentos previos a la reunión con el rey jordano que se llevó a cabo a puerta cerrada, calificó al rey Abdalá II como un "amigo bueno, leal y decente". Además, el presidente estadounidense ha querido dejar atrás los cuatro años de la Administración Trump y subrayó que Estados Unidos "siempre estará ahí para Jordania".
Por su parte, Abdalá II también compartió unas palabras de apoyo con el mandatario estadounidense. "Siempre puede contar conmigo, con mi país y con muchos de nuestros colegas de la región", señaló el monarca. La secretaria de prensa de la Casa Blanca, Jen Psaki, dijo a los periodistas que los dos líderes tendrían la oportunidad en conversaciones privadas de "discutir los muchos desafíos que enfrenta el Medio Oriente y mostrar el papel de liderazgo de Jordania en la promoción de la paz y la estabilidad en la región." Psaki calificó a Jordania como "un socio de seguridad clave y aliado de Estados Unidos".
A pesar de que la nueva Administración estadounidense esté fuertemente centrada en la amenaza que suponen China y Rusia para la estabilidad de Occidente, Joe Biden sabe que Estados Unidos siempre se ha visto arrastrado hacia Oriente Medio. Durante los últimos años, Jordania se ha erigido como un aliado clave para el país norteamericano por su papel estabilizador y de mediador en la región. Asimismo, Estados Unidos ha sido el mayor proveedor de ayuda a Jordania desde 1994, cuando este último firmó un tratado de paz con Israel, según informa The New York Times.
Durante el encuentro entro los dos líderes Joe Biden expresó “su firme apoyo a una solución de dos Estados para el conflicto palestino-israelí” y su respeto “por el papel especial de Jordania como custodio de los lugares sagrados musulmanes en Jerusalén”. El país jordano es el encargado de velar por los lugares santos tantos cristianos como musulmanes de Jerusalén Este desde que el reino hachemita firmara la paz con Israel en 1994. Este acuerdo ha provocado en más de una ocasión que las tensiones entre Jordania e Israel se aviven.
El pasado mes de marzo Jordania acusaba al país hebreo de torpedear la visita del príncipe heredero de Jordania a la Explanada de las Mezquitas en Jerusalén. El viaje a la Ciudad Santa fue finalmente cancelado “por una disputa sobre las disposiciones de seguridad en el lugar”. El ministro de Asuntos Exteriores jordano, Ayman al Safadi, anunció que el príncipe Hussein Bin Abdullah había planeado unirse a los fieles palestinos durante un servicio en la mezquita, pero Israel cambió el programa del príncipe heredero acordado con Ammán. El reino hachemita acuso entonces al Estado judío de que este cambio “comprometía el derecho de los palestinos y otros musulmanes a rendir culto en el lugar”.
Este desencuentro entre ambos países desencadenó una serie de acciones en cadena como el cierre del espacio aéreo jordano que impidió que se produjera el primer viaje del ex primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, a Emiratos Árabes Unidos tras la firma de los acuerdos de normalización de relaciones o el cierre también del espacio aéreo israelí para los vuelos provenientes de Jordania a modo de represalia. En este aspecto la formación de un nuevo Gobierno en Israel ha ayudado a limar las asperezas entre los países vecinos.
Joe Biden, durante su encuentro con Abdalá II, expresó el apoyo de Estados Unidos al compromiso entre Jordania y el nuevo Gobierno israelí, y resaltó el acuerdo bilateral al que llegaron ambos países a principios de este mes para mejorar el acceso del reino hachemita al agua dulce, así como aumentar las exportaciones de Jordania a Cisjordania.
La pandemia por la COVID-19 también fue otro de los grandes temas a tratar entre los dos líderes. Joe Biden anunció la entrega de más de 500.000 vacunas para luchar contra la COVID-19 a Jordania y ambos mandatarios debatieron los desafíos económicos exacerbados por los efectos de la pandemia. En materia estratégica Biden elogió el importante papel que desempeña Jordania en la estabilidad de la región y prometió el apoyo por parte de Estados Unidos para la modernización de la flota jordana de cazas F-16, que permitirá una mayor interoperabilidad y eficacia de sus Fuerzas Armadas.
Este encuentro vuelve a situar a Jordania en un papel de marcada relevancia en la escena regional devolviéndole su papel histórico de mediador en Oriente Medio. El reino hachemita, que se ha visto envuelto durante los últimos meses en una trama palaciega repleta de traiciones al más puro estilo Juego de Tronos, deja atrás el supuesto intento de golpe de Estado por parte del hermanastro del rey Abdalá II, el príncipe Hamzah, y tras esta visita a Washington, Jordania vuelve a la escena internacional como un “socio estratégico” para la principal potencia mundial, Estados Unidos.
