Francia detecta una nueva variante de la COVID-19 en Bretaña
Francia estudia una nueva variante de la COVID-19 detectada en Bretaña y de la que se está investigando su grado de trasmisión y si provoca efectos más duros en los afectados, ha indicado este lunes la Dirección General de Sanidad. El ministro de Salud francés informa de que tras un análisis inicial no hay certezas de que sea una variante más grave o que se contagie más rápido.
La nueva cepa fue secuenciada a partir de un foco aparecido en el hospital de Lannion, en el noroeste del país, con 79 casos, de los cuales 8 tenían esta nueva variante, indica Sanidad. Por ahora, las autoridades han decidido situarla "bajo vigilancia", después de que varios pacientes con síntomas de la COVID-19 dieran negativo en los test PCR realizados.
Los análisis efectuados sobre esta nueva variante "no permiten concluir ni una gravedad ni una contagiosidad superior" con respecto a la cepa tradicional, aunque se están llevando a cabo "investigaciones profundas" para conocerla mejor. También se buscará determinar si las vacunas actuales son eficaces con esta nueva cepa. Todos los centros de detección de Francia han sido informados para que en sus análisis tengan también en cuenta esta nueva cepa. "Se están realizando investigaciones en profundidad para comprender mejor esta variante y su impacto. También se llevarán a cabo experimentos para determinar cómo esta variante reacciona a la vacunación ya los anticuerpos desarrollados durante infecciones anteriores", se lee en el comunicado del ministro Olivier Veran.
Las variantes altamente contagiosas de la COVID-19 identificadas en Gran Bretaña, Brasil y Sudáfrica ya se han detectado en Francia. Actualmente, la cepa detectada en Gran Bretaña representa el 67% de las nuevas infecciones en Francia, mientras que las variantes identificadas en Brasil y Sudáfrica representan el 6%, según datos publicados por las autoridades sanitarias.
Desde el principio de la pandemia, más de 4 millones de personas en Francia han dado positivo por la COVID-19, de las cuales 90.762 perdieron la vida. Hasta el lunes, 25.469 pacientes con la COVID-19 estaban hospitalizados, incluidos 4,219 en cuidados intensivos.
Mientras el mundo lucha por contener la pandemia, la vacunación está en curso en un número creciente de países, incluida Francia, con las vacunas actualmente autorizadas. Mientras tanto, todavía se están desarrollando 263 vacunas candidatas en todo el mundo, 81 de ellas en ensayos clínicos, en países como Alemania, China, Rusia, Gran Bretaña y Estados Unidos, según la información publicada por la Organización Mundial de la Salud el viernes.
Anteriormente, el presidente francés, Emmanuel Macron, había dicho que Francia dejaría de administrar la vacuna de la COVID-19 de AstraZeneca como una "precaución" en espera de una nueva evaluación por parte del regulador de medicamentos de la Unión Europea. La decisión de Macron se produjo después de un anuncio similar de los gobiernos de Alemania e Italia.
El número de pacientes con la COVID-19, solo en la región de París, en unidades de cuidados intensivos el viernes superó las 4.000 por primera vez desde el 26 de noviembre, con casi 1.100 pacientes con COVID-19 en UCI. En París y la región circundante, los gerentes de atención médica dicen que las unidades de cuidados intensivos están cerca de estar sobrecargadas.
Jean Castex dijo que en la región de Ile-de-France, cerca de París, la campaña de vacunación se aceleraría este fin de semana, con la entrega de 25.000 dosis adicionales. El programa de vacunación de Francia se ha visto obstaculizado por cuellos de botella logísticos y problemas con las entregas de los fabricantes de vacunas, pero Jean Castex afirmaba que la campaña se aceleraba, con 320.326 inyecciones administradas el viernes, un nuevo récord.