La comunidad internacional reacciona a la normalización de las relaciones diplomáticas entre Emiratos Árabes Unidos e Israel
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, el primer ministro israelí Benjamin Netanyahu y el jeque emiratí Mohamed bin Zayed al-Nahyan, príncipe heredero de Abu Dhabi han acordado este jueves la plena normalización de las relaciones entre Israel y los Emiratos Árabes Unidos, con el objetivo de favorecer el establecimiento de la paz en la región de Oriente Medio. Este acuerdo histórico – que será firmado en la Casa Blanca dentro de tres semanas—ha convertido a Emiratos en el tercer país árabe, y el primero del Golfo Pérsico, en establecer relaciones oficiales con Tel Aviv.
Emiratos considera que este acuerdo es “una victoria” para la diplomacia en la región, mientras que Israel ha definido este momento como “un día histórico” para los dos países. En las próximas semanas, delegaciones de ambos países se reunirán para firmar una serie de acuerdos bilaterales en materia de inversión, turismo, vuelos directos, seguridad, telecomunicaciones, tecnología, energía, salud, cultura, medio ambiente, así como el establecimiento de embajadas recíprocas, según especificaron en un comunicado oficial. Asimismo, tanto Emiratos como Israel han mostrado su disposición a abrir embajadas mutuas e intercambiar embajadores.
“La apertura de vínculos directos entre dos de las sociedades más avanzadas de Oriente Medio transformará la región al estimular el crecimiento económico, mejorar la innovación tecnológica y forjar relaciones más estrechas entre las personas”, subrayaron en un comunicado conjunto. La influencia en la región de la República Islámica ha provocado un deshielo en las relaciones entre ambas naciones en los últimos años, que ha finalizado con el anuncio de este acuerdo, que llevará el nombre de Abraham.
La intención ahora es lograr este avance político con otras naciones árabes. La comunidad internacional ha reaccionado a este acuerdo histórico. Israel, por ejemplo, ha iluminado con la bandera de Emiratos Árabes Unidos el Ayuntamiento de la capital para celebrar este anuncio. “Hoy comienza una nueva era con el mundo árabe en la región”. Con estas palabras, el primer ministro israelí celebró este acuerdo, anunciado por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump. Desde el anuncio de la medida, las reacciones de bienvenida de las principales capitales – quienes consideran este acuerdo como una oportunidad para reanudar el proceso de paz en Oriente Medio -- no han dejado de sucederse.
El embajador de los EAU en Estados Unidos, Youssef al-Otaiba, ha definido este anuncio como “una victoria” para la diplomacia en la región. “Es un avance significativo en las relaciones árabe-israelíes que reduce las tensiones y genera nueva energía para un cambio positivo”, ha subrayado. El país del Golfo se ha mantenido firme respecto a su postura sobre la cuestión palestina, tal y como ha afirmado el príncipe heredero de Abu DHabi, Mohammed bin Zayed, quien, a través de la red social Twitter, anunció que “durante una llamada con el presidente Trump y el primer ministro Netanyahu, se llegó a un acuerdo para detener la anexión israelí de los territorios palestinos”. “Emiratos Árabes Unidos e Israel también acordaron cooperar y establecer una hoja de ruta hacia el establecimiento de una relación bilateral”, agregó.
El ministro de Estado de Exteriores emiratí, Anwar Gargash ha aplaudido las “alentadoras reacciones” a este anuncio. Gargash ha señalado este viernes que “la iniciativa del príncipe heredero de Abu Dhabi ha permitido eliminar el fantasma de la anexión de tierras palestinas”. Además, ha incidido en que el representante emiratí lideró la decisión de conducir las relaciones bilaterales dentro de una visión estratégica “que combina realismo político y una perspectiva audaz de futuro”. Este acuerdo es –según las partes firmantes – un testimonio de la diplomacia audaz y la visión de los tres líderes.
“EAU busca aprovechar los esfuerzos regionales e internacionales previos destinados a alcanzar una solución a este conflicto en el reflejo del enfoque multilateral de los EAU sobre cuestiones regionales sensibles”, ha señalado en un comunicado emitido tras la conversación telefónica a tres bandas en la que se anunció este acuerdo. Por su parte, el ministro emiratí ha destacado el papel de Estados Unidos en este proceso, explicando que, con este movimiento, la nación estadounidense ha “afirmado su compromiso continuo con la Iniciativa de Paz Árabe y los derechos del pueblo palestino de establecer un estado palestino con Jerusalén Este como su capital”.
Este documento fomentará – de acuerdo con el ministro – oportunidades de cooperación en ambos sectores y reforzará las relaciones en materia de economía, cultura, ciencia y tecnología. “En vista de estos desarrollos, Emiratos Árabes Unidos insta a volver a las negociaciones directas entre israelíes y palestinos como las únicas partes capaces de alcanzar una solución permanente y sostenible a este conflicto”, concluyó Anwar.
Las autoridades israelíes también han celebrado este acuerdo y han asegurado que esperan que abra el camino a otros países árabes de la región. El titular de Defensa y socio de coalición, Benny Gantz, ha llamado a otras naciones árabes a “promover las relaciones diplomáticas en acuerdos de paz adicionales”. “Aplaudo este importante y significativo acuerdo, primero y, sobre todo, al presidente (estadounidense) Donald Trump -un verdadero amigo de Israel-, al primer ministro (israelí, Benjamín) Netanyahu y (al príncipe heredero del emirato de Abu Dabi) Mohammed Bin Zayed”, declaró Gantz en un comunicado.
El presidente de Egipto, Abdel Fattah el-Sisi ha aplaudido los esfuerzos llevados a cabo por Emiratos e Israel “para lograr la prosperidad y la estabilidad de la región”. “Seguí con interés la declaración conjunta entre Estados Unidos, Emiratos Árabes Unidos e Israel para detener la anexión israelí de tierras palestinas y tomar medidas para traer la paz en Oriente Medio”, señaló el mandatario egipcio en Twitter. “Valoro los esfuerzos de quienes están a cargo del acuerdo para lograr prosperidad y estabilidad para nuestra región”, añadió.
El ministro de Asuntos Exteriores de Jordania, Ayman Safadi ha declarado que Israel debe apostar por una solución “justa y completa que ponga fin a la ocupación o la continuación del conflicto palestino-israelí”. Safadi ha incidido en que, si Israel trata el acuerdo como un incentivo para poner fin a la ocupación y cumplir con el derecho del pueblo palestino a la libertad y a un estado independiente y viable con Jerusalén Este como su capital, la región avanzará hacia el logro de una paz justa.
En cambio, si ocurre lo contrario “el conflicto se profundizará y se convertirá en una amenaza para toda la región”. El ministro jordano ha mostrado su apoyo a cualquier esfuerzo que contribuya a lograr una paz justa y completa que ponga fin a la ocupación israelí y ha anunciado que “continúa trabajando con sus hermanos y amigos para lograr una paz justa que no será permanente si no es aceptada por los pueblos”.
El Reino de Bahréin ha felicitado a Emiratos Árabes Unidos por formar parte de un acuerdo para detener la anexión de determinados territorios palestinos. En un comunicado recogido por la agencia BNA, esta nación ha elogiado los esfuerzos diplomáticos realizados por los EAU y ha destacado que este paso histórico contribuirá a la consolidación de la estabilidad y la paz en la región.
Por último, Bahréin también ha mostrado su gratitud a Estados Unidos por facilitar este acuerdo y por “fortalecer los cimientos de la seguridad, la estabilidad y la paz mundiales”. Asimismo, han señalado que “esperan con interés” cualquier tipo de medida dirigida a “alcanzar un acuerdo justo y una solución integral y duradera al conflicto palestino-israelí”.
El portavoz oficial del Ministerio de Asuntos Exteriores de Omán también ha mostrado su apoyo a este anuncio. “Esperamos que esta decisión contribuya a lograr una paz integral, justa y duradera en Oriente Medio y de una manera que sirva a las aspiraciones de los pueblos de la región”, ha asegurado. Este acuerdo ayudará a “sostener los pilares de seguridad y estabilidad y promoverá las causas del progreso y la prosperidad”, han aseverado. Así, el sultanato de Omán ha expresado su apoyo a este anuncio, que ha calificado de “histórico”, de acuerdo con la agencia de noticias del país.
El primer ministro británico, Boris Johnson, ha acogido con satisfacción este acuerdo. “Tenía una profunda esperanza de que la anexión no se llevara a cabo en Cisjordania y el acuerdo de hoy de suspender esos planes es un paso más en el camino hacia un Oriente Medio más pacífico”, aseguró en Twitter.
Por su parte, el ministro de Asuntos Exteriores francés, Jean-Yves Le Drian, dio la bienvenida a la normalización de las relaciones diplomáticas entre Israel y los Emiratos Árabes Unidos. En un comunicado publicado este jueves, Le Drian informó de que la decisión de Israel de suspender la anexión de determinadas áreas de Cisjordania es un paso positivo y incidió en que este acuerdo ha abierto una nueva puerta a las conversaciones entre israelíes y palestinos.
En Alemania, la revista Der Spiegel ha descrito el acuerdo como un “gran logro y un avance diplomático” y ha destacado el éxito de este en disuadir a Israel de los intentos de anexar partes de Cisjordania.
El secretario general de Naciones Unidas, Antonio Guterres, ha dado la bienvenida a “este acuerdo con la esperanza de que cree una oportunidad para los líderes israelíes y palestinos de retomar unas negociaciones significativas que hagan realidad la solución de dos estados de acuerdo con las resoluciones relevantes de la ONU, la ley internacional y los acuerdos bilaterales", aseguró en un breve comunicado el portavoz de Guterres, Stéphane Dujarric.
Dujarric indicó que este acuerdo “suspende los planes de Israel sobre la anexión de partes de la región ocupada de Cisjordania”, explicando que esta medida “podría cerrar las puertas para retomar negociaciones y destruiría la perspectiva de un estado palestino y de una solución de dos-estados”. “La paz en Oriente Medio es más importante que nunca, en un momento en el que la región se enfrenta a la grave amenaza del COVID-19 y de la radicalización”, agregó.
En cambio, otras regiones como Turquía o Irán no han visto con buenos ojos este acuerdo. Ankara, por ejemplo, considera que “no es creíble presentar el acuerdo trilateral (junto a Estados Unidos) como un apoyo a la causa palestina”, según ha explicado el ministro de Exteriores en un comunicado oficial.
Irán ha advertido en esta misma línea de que este pacto “resultará en un mayor fortalecimiento del Eje de Resistencia en la región al impulsar la unidad y la solidaridad contra el régimen sionista”. “La sangre inocente derramada durante las últimas siete décadas de resistencia para liberar la tierra sagrada de Palestina tarde o temprano agarrará por el cuello a los que traicionaron la causa palestina”, han subrayado en un comunicado oficial.
El presidente palestino, Mahmoud Abbas, quien el pasado mes de mayo declaró el fin de todos los acuerdos con Israel y Estados Unidos, también se ha sumado a esta ola de críticas. “El liderazgo palestino rechaza y denuncia el sorprendente anuncio trilateral de los Emiratos Árabes Unidos, Israel y Estados Unidos”, dijo Nabil Abu Rudeineh, asesor principal de Abbas.
El mandatario estadounidense ha celebrado este acuerdo a través de la red social Twitter. “¡GRAN avance hoy! Acuerdo de paz histórico entre nuestros dos GRANDES amigos, Israel y los Emiratos Árabes Unidos”. Este anuncio --que pasará al futuro como los Acuerdos de Abraham-- es un éxito para la política exterior de Trump, quien busca su reelección el próximo 3 de noviembre.
Varios funcionarios de la Casa Blanca han informado de que el asesor de Trump, Jared Kushner, el embajador de Estados Unidos en Israel, David Friedman, y el enviado para Oriente Medio, Avi Berkowitz, estuvieron profundamente involucrados en la negociación del acuerdo, así como el secretario de Estado Mike Pompeo y el asesor de seguridad nacional de la Casa Blanca, Robert O'Brien. Con este anuncio, Emiratos se ha convertido en el tercer país árabe en normalizar sus relaciones con Israel, después de los acuerdos de paz firmados por Egipto en 1979 y Jordania en 1994.
