El profesor marroquí Thar El Qour subraya la importancia de la internacionalización empresarial en una conferencia dictada en la sede madrileña de Casa Árabe

La diplomacia económica, la gran estrategia de ‘soft power’ para Marruecos

photo_camera PHOTO/ATALAYAR - Olivia Orozco, coordinadora de Formación y Economía de Casa Árabe; José María Mella, profesor emérito de la UAM; Tahar El Qour, profesor Investigador en la Escuela Nacional de Coercio y Gestión de la Universidad Abdelmalek Essaadi

La actividad empresarial juega un papel destacado en lo que se ha dado en llamar ‘soft power’ -o ‘poder blando’ en español-. Es también el caso de Marruecos. Para analizar el papel de las empresas públicas en el país magrebí y su proceso de expansión internacional, Casa Árabe acogió en la tarde del miércoles la charla ‘La diplomacia económica de Marruecos: el papel de las empresas públicas marroquíes’, a cargo de Tahar El Qour, profesor investigador de la Escuela Nacional de Comercio y Gestión de la Universidad Abdelmalek Essadi de Tánger. El acto contó además con la participación de la coordinadora de Economía y Formación de Casa Árabe, Olivia Orozco, y el profesor emérito de la Universidad Autónoma de Madrid José María Mella.

En una conferencia enmarcada en el programa Aula Árabe Universitaria que la Casa árabe organiza con la colaboración del Máster Universitario en Desarrollo Económico y Políticas Públicas de la Universidad Autónoma de Madrid, el profesor El Qour introdujo el concepto de “diplomacia económica”, centrado en África, y sobre todo en su país, Marruecos. El Qour puso especial énfasis en la internacionalización de las empresas públicas, como la empresa pública de electricidad y agua marroquí, la Oficina Nacional de Electricidad y Agua (ONEE), y de la entidad pública que explota la mayor parte de las reservas de fosfatos en el país magrebí, la Oficina Jerifiana de Fosfatos, en Senegal y Camerún.

Tahar El Qour, profesor de la Universidad Abdekmalek Essadi

“Marruecos necesita socios, ya que él solo no puede”, dijo El Qour, y de ahí la importancia de entender la diplomacia económica como “el conjunto de mecanismos que pueden llevarse a cabo por individuos y/o organismos, bien públicos o privados, para lograr objetivos económicos con visión política”, definió el profesor. La internacionalización de estas empresas, no solo las de agua, también las de fosfato, empujan a la realización de cambios en materia de gobernanza y muestran una mayor apertura de la monarquía marroquí. “La diplomacia económica representa un ámbito donde confluyen varias disciplinas, como las relaciones internacionales, geoestratégicas, etc.”, explicó el académico.

El docente destacó la importancia de las relaciones entre España y Marruecos: “Esta relación pretendemos que no solo sea bilateral, sino también multilateral. España como nexo para las relaciones con la Unión Europa y nosotros (Marruecos) como nexo con los países africanos”.  Desde 2012, España es el primer socio del país vecino. 

Olivia Orozco, Jose María Mella y Tahar El Qour

Además, El Qour resaltó que el éxito de empresas públicas como las citadas “repercute sobre el conjunto del país” gracias a su valor añadido y a su labor de ‘soft power’. Con todo, el académico lamentó la ausencia de una política estructural para la internacionalización de las empresas, aunque la Casa Real, a su juicio, ha mostrado un especial interés y posee un papel estratégico “muy relevante” para garantizar el éxito de “cualquier programa”. Otros actores que el profesor juzgó como especialmente importantes para desempeñar un papel fundamental en la diplomacia económica son el Consejo Nacional del Comercio Exterior, la Agencia Marroquí de Desarrollo de Inversiones e Instituciones y también los municipios y las regiones que, “aunque tienen un nivel mínimo de competencias, se les concede ciertas prerrogativas, lo que les da algo de independencia”. Aunque, apostilló el profesor de la Universidad Abdelmalek Essadi de Tánger, “lo verdaderamente importante es la cooperación que refuerza los Estados del sur con el apoyo de los países del norte”, de ahí que no se olvidara de la relevancia de que España colabore en la internacionalización de las empresas marroquíes.

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