La Fiscalía española desarrollará un proyecto de hermanamiento con la presidencia del Ministerio Público de Marruecos
La Fiscalía española ha sido seleccionada para desarrollar el proyecto de hermanamiento de apoyo a la presidencia del Ministerio Público de Marruecos. La propuesta realizada con la Fiscalía española con el apoyo y la gestión de la FIIAPP (Fundación Internacional y de Iberoamérica de Administración y Políticas Públicas) ha sido la elegida frente a la propuesta francesa y a la conjuntamente presentada por Bélgica y Alemania, según informa una nota de prensa remitida a los medios de comunicación.
El proyecto, financiado por la Unión Europea y que supondrá un hermanamiento y una estrecha relación entre la Fiscalía General de Marruecos y la de España, tiene por objeto reforzar las capacidades de gestión y organización de la Presidencia del Ministerio Público marroquí, creada por la nueva Constitución marroquí del año 2011 y desarrollada por la Carta de Reforma de la Justicia de 2012 con el establecimiento de una Fiscalía autónoma, la cual ha asumido gran parte de las competencias que ostentaba el Ministerio de Justicia.
Los proyectos de hermanamiento son un instrumento de cooperación institucional de la Comisión Europea con los países candidatos y los países de la región de la Política de Vecindad de la Unión Europea, concebidos para impulsar el fortalecimiento de las administraciones públicas de los países beneficiarios.
El proyecto, que tiene una duración de dos años durante los que dispondrá del apoyo de la FIIAPP, estará dirigido por la Fiscal de Sala de Cooperación Internacional, Rosa Ana Morán Martínez, y cuenta con la Fiscal María del Mar Ramos López-Herrero como Consejera residente, quien se instalará en Rabat tan pronto como las circunstancias dimanantes de la pandemia lo permitan.
El proyecto viene a reforzar la privilegiada relación entre las Fiscalías española y marroquí, que se plasmó en marzo de 2019 con la firma de un Memorándum de colaboración que empezará a ejecutarse próximamente con la creación de grupos de trabajo bilaterales en temas de interés común, como el tráfico de drogas o el tráfico de seres humanos.
