Desde el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos establecen que la mayoría de estas muertes se produjeron entre 2012 y 2015

La guerra de Siria deja casi medio millón de víctimas mortales

photo_camera AFP/NAYEF AL-ABOUD - Civiles llevan a una víctima de una explosión en la ciudad de Azaz en el campo norteño controlado por los rebeldes de la provincia siria de Alepo

Siria arrastra una guerra civil desde hace más de 10 años, un conflicto que a pesar de no presentar la crudeza de años atrás sigue latente y aún no ha terminado. La población siria se sigue muriendo, no tanto por las bombas, pero por el hambre y la devastación que ha provocado está interminable guerra. El país árabe acumula unos datos escalofriantes. 13,4 millones de personas necesitan ayuda humanitaria, según datos de la organización Acción Contra el Hambre y 9.3 millones de sirios viven en inseguridad alimentaria mientras que 2,2 millones más están en riesgo inminente de entrar en esta situación.

A pesar de ser una de las grandes catástrofes humanitarias, junto con Yemen, el conflicto sirio se mantiene en el olvido a excepción de alguna fecha destacable o evento de notable importancia. El ejemplo más claro fue cuando la guerra en Siria entró en su décimo año, portadas de todos los medios de comunicación se cubrían de noticias sobre el país árabe, recordando la década de un conflicto que aún perdura. Otro hecho clave han sido las elecciones sirias, nuevamente, Siria volvía a ocupar un espacio de interés público. Una vez conocidos los resultados, el país árabe vuelve a caer en el olvido.

La situación en Siria sigue siendo catastrófica, las heridas de una guerra que permanece abierta no se han podido cerrar. La guerra en Siria ha puesto de manifiesto la brutalidad del “todos contra todos” donde se ha bombardeado de manera indiscriminada a la población civil, torturado, raptado, cercado ciudades hasta matar de hambre a la población, imposibilitado la entrada de ayuda humanitaria, y todos aquellos que han cometidos estos crímenes contra la humanidad siguen impunes. Es por ello que Siria no podrá cerrar sus heridas hasta que la comunidad internacional afronte el papel que le corresponde y pague y haga pagar por diez años de sufrimiento.

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En un intento por seguir manteniendo en la conciencia de la comunidad internacional lo que ha supuesto y sigue suponiendo este conflicto, el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos (OSDH) ha realizado un nuevo balance de las víctimas mortales de la guerra. Desde la organización elevan el número de personas que han fallecido a causa de este conflicto a casi 500.000, una cifra que incluye alrededor de 100.000 víctimas mortales más que el publicado en marzo de este año.

El Observatorio Sirio, organización con sede en Londres, subrayó que logró documentar 105.015 víctimas mortales más, entre ellas 24.103 civiles, entre los que había 2.748 niños y 1.249 mujeres, que el OSDH ya había mencionado, pero no pudo documentar antes de 2021. Asimismo, el informe incluye a combatientes de facciones rebeldes e islámicas, desertores del ejército del Gobierno que murieron bajo tortura en las cárceles del régimen, soldados del régimen y milicianos sirios respaldados por el Gobierno.

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Finalmente, y a raíz de este nuevo balance el número de víctimas mortales documentadas por el OSHD tras más de 10 años de conflicto asciende a 494.438 personas, entre ellas cerca de 160.000 civiles. Asimismo, desde la organización establecen que el Ejército y las milicias progubernamentales han matado a 130.254 civiles, entre ellos 19.691 niños, en operaciones terrestres, bombardeos y torturas en centros de detención.

"La abrumadora mayoría de estas muertes se produjeron entre finales de 2012 y noviembre de 2015", dijo a la agencia de noticias AFP el director del Observatorio, Rami Abdel Rahman, en referencia a las últimas incorporaciones. Desde el Observatorio también se ha documentado un total de al menos 57.567 muertes en cárceles y centros de detención del Gobierno desde 2011, lo que supone un aumento respecto a las 16.000 muertes confirmadas que comunicó en marzo.

En la actualidad los enfrentamientos en el terreno se han reducido prácticamente al mínimo. De hecho, un acuerdo negociado por Turquía y Rusia en marzo de 2020 congeló una ofensiva gubernamental sobre el enclave de Idlib, controlado por los rebeldes, que hubiese supuesto la perdida de muchas más vidas, sobre todo, civiles. El Gobierno de Bachar al-Asad controla más de dos tercios del país y ha conseguido legitimar un cuarto mandato de siete años en las últimas elecciones, con un resultado del 95,1% de los votos.
 

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