La Fundación Alternativas organiza una sesión virtual para analizar las nuevas protestas contra el racismo en el país norteamericano

La muerte de George Floyd: un punto de inflexión en la Historia de Estados Unidos

photo_camera PHOTO/ATALAYAR - Debate virtual organizado este martes por la Fundación Alternativas

Los ocho minutos que Dereck Chauvin, agente de policía de Minneapolis, apretó su rodilla contra el cuello de George Floyd se están convirtiendo en uno de los momentos decisivos de la Historia de Estados Unidos. Floyd no es el primer afroamericano víctima de la brutalidad policial, pero su caso ha desatado unas protestas que han traspasado las fronteras del país. Para analizar la situación histórica que está viviendo esta nación, la Fundación Alternativas ha reunido a periodistas y analistas políticos en una sesión virtual este martes. 

“Los ocho minutos de agonía que pasó George Floyd antes de morir han desatado una gran ola de solidaridad. Son imágenes muy duras ante las que la población ha reaccionado con mucha rabia”, ha indicado Amanda Mars, delegada del diario El País en Washington. Mars ha relatado que el uso de cámaras durante las intervenciones policiales, que se ha implementado a lo largo de los últimos seis años, ha hecho visible el problema de la brutalidad policial. “Desde hace tiempo se están impulsando reformas para acabar con esta lacra, pero es probable que el caso de Floyd marque un punto de inflexión”, ha asegurado. 

Los ciudadanos afroamericanos son los que siguen sufriendo en sus carnes gran parte de los casos de brutalidad policial. “Estados Unidos se ha fundado sobre el genocidio de los pueblos indígenas y la esclavitud de los afroamericanos. El racismo aún está muy presente y todavía es necesario cambiar muchas cosas”, ha explicado Nicole Pearson, activista, escritora y profesora estadounidense. 

La segregación de la población negra en las ciudades continúa siendo actualmente una realidad. “Evidentemente ya no existe una legislación que segregue por motivos de raza, pero en la ciudad de Washington, que tiene mucha población negra, estos han sido expulsado del centro y se concentran en los barrios más peligrosos. Esta tendencia también puede observarse en los colegios”, ha señalado Carlos Franganillo, que fue corresponsal de TVE en Washington. “Esa es la raíz del problema y viene desde hace décadas atrás”, ha explicado. Franganillo también ha señalado que la libre tenencia de armas pone a los cuerpos de policía bajo mucha presión. “No saben quién va armado y quién no, ante la más mínima amenaza responden con mucha violencia”, ha afirmado. 

“Hay mucho hartazgo por esta situación. Los demócratas han introducido nuevas reformas para un mayor seguimiento de las actuaciones policiales, pero hay que seguir luchando. Estas protestas indican que la democracia en Estados Unidos es muy potente”, ha recalcado Alana Mocerini, profesora de Relaciones Internacionales en la Universidad Europea de Madrid. 

Las fuertes protestas y manifestaciones han estado guiadas por el movimiento Black Live Matters, fundado en 2013. “Gracias a su actuación a lo largo de los últimos años se ha ido cambiando la mentalidad poco a poco. El caso de George Floyd es percibido como intolerable por parte de la sociedad estadounidense”, ha explicado la activista afroamericana, Nicole Pearson. 

“Black Lives Matters ha creado una mayor cultura y sensibilización en los últimos años. Los estadounidenses están muy concienciados de que deben luchar por sus derechos y salir a la calle”, ha ilustrado la periodista Amanda Mars. El caso Floyd estará muy presente en las próximas elecciones de noviembre. “Espero que haya una gran participación. Creo que las movilizaciones son un síntoma de la fortaleza de la democracia estadounidense”, ha concluido Mocerini. 

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