La perspectiva competitiva de la inteligencia artificial en la región MENA

Como parte de los esfuerzos continuos para diversificar sus economías y construir una plataforma para un crecimiento futuro sostenible, las naciones de la región MENA están recurriendo cada vez más a la inteligencia artificial (IA). 

Una gran cantidad de inversiones e iniciativas recientes, principalmente en la academia y el gobierno, pero también en el sector privado, ha revigorizado el interés de los líderes de la industria de todo el mundo en el potencial de la IA para fortalecer la eficiencia y la sostenibilidad de las economías de MENA. 

Según un informe de Economist Impact Unit (EIU) y Google publicado a principios de este año, la IA podría generar un crecimiento económico adicional de 320.000 millones de dólares en la región MENA para 2030.

Muchas estrategias económicas a largo plazo en la región apuntan a sectores de alto valor con el potencial de beneficiarse de la Cuarta Revolución Industrial, una serie de avances tecnológicos en IA, datos y computación en la nube que fusionan los mundos físico, digital y biológico. 

En los últimos años, los Emiratos Árabes Unidos, Arabia Saudí, Qatar y Egipto han publicado estrategias ambiciosas impulsadas por el Gobierno para desarrollar la IA. Sin embargo, gran parte de su impulso se descarriló en los primeros meses de la pandemia de COVID-19, cuando la atención se centró en lidiar con la situación de salud en desarrollo, la recesión económica más amplia y el colapso de los precios del petróleo.

A pesar del revés temporal, la pandemia ha subrayado la urgencia de la diversificación económica, y varias naciones de MENA han acelerado la inversión en sectores distintos de los hidrocarburos donde la IA podría desempeñar un papel clave. 

La inversión global del sector privado en IA, impulsada en gran medida por empresas de China y EE. UU., aumentó un 40% en 2020, según una investigación de la Universidad de Stanford, lo que subraya el creciente interés en el campo y sus aplicaciones potenciales, especialmente en aplicaciones de sectores de alto valor agregado.  

Un informe de marzo de la consultora de gestión saudí Strategic Gears recomendó que el país se centre en aprovechar la IA para impulsar tres sectores (petróleo y gas, servicios gubernamentales y servicios financieros) que ya contribuyen con más del 50% del PIB. La fabricación, la atención de la salud, la educación, la automoción, el comercio minorista y electrónico, y el transporte también están posicionados para beneficiarse de la tecnología. 

En lugar de limitarse a las TIC y los campos basados ​​en la tecnología, se espera que la IA tenga un impacto de gran alcance en economías más amplias y sea clave para realizar planes económicos a largo plazo.

“La implementación de IA está ayudando a las empresas a volverse más centradas en el cliente, eficientes, productivas y competitivas tanto en los mercados locales como regionales”, dijo a OBG Said bin Abdullah al-Mandhari, director ejecutivo de ITHCA Group, una empresa de TIC de Omán. 

“Este ya es el caso en la industria del petróleo y el gas de Omán, y será particularmente importante avanzar en sectores prioritarios como la pesca, el turismo y la logística. En última instancia, la IA puede ayudar a desbloquear el potencial de estos sectores, verlos convertirse en contribuyentes significativos al PIB nacional y ayudar a alcanzar sus objetivos bajo Oman Vision 2040”. 

La ciberseguridad es otra área donde la IA puede agregar valor. Como OBG detalló recientemente, los ataques cibernéticos han ido en aumento desde la invasión de Ucrania por parte de Rusia, lo que presenta una amenaza elevada para los mercados emergentes. 

Según los informes de los medios, recientemente se descubrió una extensa campaña de phishing que implicó la suplantación del Ministerio de Recursos Humanos de los EAU con la ayuda de una plataforma de monitoreo de riesgos digitales AI de CloudSEK de India. 

En una región en la que varios países obtienen porciones considerables del PIB y de los ingresos por exportaciones de los hidrocarburos, no sorprende que el sector energético haya atraído una importante inversión en IA de gobiernos y empresas que buscan no solo diversificarse más allá del petróleo y el gas, sino también reforzar el sector en cuanto a eficiencia y reducir sus emisiones de carbono. 

Abu Dhabi National Oil Company (ADNOC) ya ha implementado el aprendizaje automático para extraer sus datos históricos y actuales, lo que ha ayudado a generar escenarios y pronosticar operaciones que, según las estimaciones de ADNOC, generaron 1.000 millones de dólares en "valor comercial" durante tres años. 

También se espera que la IA sea muy valiosa para permitir la transición a la energía verde mediante la gestión de los sistemas de electricidad descentralizados de los que dependen las fuentes renovables y el seguimiento de las emisiones de carbono. 

Con este fin, en mayo, la empresa emergente de inteligencia artificial con sede en Londres, Arloid Automation, anunció tres nuevas asociaciones en todo el Medio Oriente para rastrear y reducir las emisiones. 

Dada su gran población de jóvenes, muchas naciones MENA están haciendo inversiones significativas en educación, capacitación e investigación de IA para garantizar que dichas tecnologías desempeñen un papel clave en la economía y la fuerza laboral del futuro. 

De los 320.000 millones de dólares que el informe EIU-Google estima que las naciones MENA generarán para 2030 gracias a la adopción de AI, Strategic Gears espera que Arabia Saudí rinda el 42%, en parte debido a su inversión en educación. Aproximadamente las tres cuartas partes de los objetivos de Saudi Vision 2030 involucran datos e inteligencia artificial, y el Reino planea capacitar a 20.000 especialistas en datos e inteligencia artificial para fines de la década. 

Destacando este enfoque, en abril, la principal empresa nacional de energía, Aramco, firmó un memorando de entendimiento con la Universidad de Ciencia y Tecnología Rey Abdullah para establecer un nuevo centro de investigación para avanzar en el desarrollo tecnológico de la IA. 

Entre las inversiones más grandes de los EAU en educación de IA estuvo el establecimiento de la Universidad de Inteligencia Artificial Mohamed bin Zayed (MBZUAI) en 2019. Ubicada en el grupo de innovación y ciudad inteligente de Masdar City, MBZUAI ocupa el puesto 30 a nivel mundial entre las instituciones que realizan investigaciones en IA, visión por computadora, aprendizaje automático y procesamiento de lenguaje natural, según la plataforma basada en métricas de ciencias de la computación CSRankings. 

En otros lugares, Qatar tiene varios campus filiales de universidades de renombre, como la Universidad Carnegie Mellon en los EE. UU., donde los estudiantes pueden obtener títulos e investigaciones relacionados con la IA. El país también alberga el Centro de Inteligencia Artificial de Qatar, que está trabajando para atraer talento a su facultad de IA y establecer un centro de investigación y política. 

Dado que los beneficios de la IA son multi e intersectoriales, los países de MENA pueden diseñar estrategias y construir ecosistemas de IA adaptados a sus respectivas estructuras económicas y sociales. 

Por ejemplo, como parte de los esfuerzos del Gobierno egipcio para aprovechar la IA para el crecimiento económico y la mejora de la calidad de vida, está asignando fondos para programas de formación de docentes y otras iniciativas vocacionales relacionadas con la IA. 

A medida que las naciones MENA y otros mercados emergentes continúan invirtiendo en educación en IA, algunas figuras de la industria dicen que pueden tener una clara ventaja sobre las naciones desarrolladas al aprovechar el talento local. 

“Con el impulso hacia la asequibilidad, un rasgo definitorio en los mercados en desarrollo, ahora también una característica de los mercados más avanzados, los ingenieros de software en los mercados en desarrollo están obteniendo una ventaja competitiva basada en la combinación de su afinidad inherente por las soluciones rentables y las posibilidades abiertas por IA”, dijo a OBG Soham Chokshi, CEO y cofundador del proveedor de software de logística Shipsy. 

Sin embargo, para darse cuenta de esta ventaja competitiva y lograr mejoras significativas en la capacidad nacional de IA, los países de la región también deberán incentivar la inversión. 

“Para que Oman Vision 2040 se convierta en realidad y acelere el desarrollo económico, el país debe trabajar en la creación de un entorno empresarial propicio para una mayor inversión en tecnología avanzada, particularmente en el área de IA y análisis de datos”, señaló a OBG Maqbool al-Wahaibi, CEO de Oman Data Park. “En este contexto, las empresas locales de TI deberán prepararse para competir contra los jugadores globales que están expandiendo su presencia en el mercado local”, manifestó.