Las Fuerzas Armadas de Ucrania están trabajando para estabilizar la línea defensiva septentrional de Bajmut

La realidad de Bajmut: una lucha constante por la supervivencia

REUTERS/THOMAS PETER - Soldados ucranianos junto a un cráter dejado por bombardeo ruso

El Dombas sigue siendo el epicentro del conflicto armado entre el Ejército ucraniano y las fuerzas separatistas prorrusas. Bajmut es una de las ciudades más importantes de la región y su control es clave para el desarrollo de la guerra. El enemigo ruso ha hecho de todo para tomar el control de la ciudad, incluyendo el uso de bombardeos y ataques con armas de fuego. Esto ha provocado una situación extrema para los defensores ucranianos. Si el Ejército ruso lograse capturar la ciudad, tendrían una “carretera abierta” hacia otros puntos estratégicos del Dombas. Esto significaría una victoria significativa para el Ejército ruso y un gran revés para Ucrania, lo que podría tener consecuencias catastróficas. Por ello, el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, ha advertido que se debe hacer todo lo posible para evitar que el Ejército ruso tome el control de Bajmut. Además, en una reunión del cuartel general del comandante en jefe supremo, se decidió continuar la operación de defensa y fortalecer aún más las posiciones del Ejército ucraniano en Bajmut. 

En el caso de capturar Bajmut, los expertos señalan que las tropas rusas tienen que decidir entre dos direcciones de avance divergentes: avanzar hacia el oeste por la carretera T0504 hacia Konstantinovka o hacia el noroeste por la carretera E40 en dirección a Sloviansk-Kramatorsk, pero, sin embargo, las tropas ucranianas han establecido una fuerte defensa en estas dos rutas estratégicas, con numerosas líneas de comunicación terrestres para impedir un avance ruso, con el fin de asegurar la retaguardia ucraniana. 

En cambio, las tropas rusas carecen de las fuerzas mecanizadas suficientes para desplegar una campaña militar exitosa. Las “unidades de asalto” tácticas usadas para asaltar Bajmut no tienen la capacidad de guerra de maniobras necesaria para asestar un golpe decisivo a la resistencia ucraniana. Por tanto, la capacidad de Rusia para obtener una victoria militar en Bajmut es limitada. 

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Las Fuerzas Armadas rusas están cambiando su enfoque de la guerra de maniobras a los asaltos frontales para adaptarse a la nueva realidad. Esto se refleja en el uso creciente de los “escuadrones de asalto”, unidades de tamaño de un batallón equipadas con artillería pesada y preparadas para ataques a zonas fortificadas. Sin embargo, estos escuadrones no están diseñados para operar fuera de los entornos urbanos y no podrán competir con éxito con enfoques más flexibles. 

Fuentes militares rusas sugieren que se deberían formar “brigadas de ruptura” más grandes para poder abrir un agujero amplio y profundo en las formaciones defensivas ucranianas. Estas brigadas deberían ser una mezcla de fuerzas mecanizadas y de infantería, con apoyo de artillería y armas antiaéreas. Esto permitiría a las fuerzas rusas explotar adecuadamente cualquier vía de avance abierta por la captura de Bajmut. Sin embargo, dados los bajos niveles de moral de los soldados rusos, se necesitarían más recursos para lograr una victoria total. 

El portavoz del Grupo Oriental de las Fuerzas Armadas de Ucrania, Serhiy Cherevaty, señaló: "Hubo 35 bombardeos y 12 escaramuzas solo en el área de Bajmut, 115 ocupantes fueron destruidos, 197 resultaron heridos de diversos grados". 

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Según él, se produjeron un total de 72 enfrentamientos en los asentamientos de los alrededores. Cherevaty también dijo que la situación en la línea del frente se mantiene tensa, con enfrentamientos de combate, disparos con armas ligeras y artillería de diversos calibres. Se está llevando a cabo una fuerte resistencia a las acciones del enemigo para evitar la penetración en el territorio ucraniano. 

Durante la semana pasada, 19 casas fueron destruidas en Bajmut como resultado de los bombardeos del Ejército ruso. Estas destrucciones han elevado el número de edificios dañados o destruidos en la región a 4.438. Estas pérdidas reflejan el impacto de la guerra en la vida de los civiles en la región de Donetsk y son un recordatorio de la necesidad urgente de un alto el fuego y la solución política del conflicto. 

En la zona, los ocupantes siguen asaltando la ciudad de Bajmut a pesar de las importantes pérdidas sufridas. También llevaron a cabo ofensivas infructuosas en las zonas de Berkhivka, Dubovo-Vasylivka, Orikhovo-Vasylivka, Bohdanivka, Ivanivske y Klishchiyivka. La Iniciativa de Bajmut para el Desarrollo (IBA) ha estimado que los daños solo son aproximados ya que, debido a la situación actual en la región, es imposible establecer el alcance exacto.

El Ejército ruso continúa moviéndose hacia el este, buscando controlar la ciudad, pero la lucha por la liberación de Bajmut seguirá siendo una prioridad para los soldados ucranianos, quienes defienden los derechos de los habitantes locales y luchan para mantener la soberanía de su país. Como resultado, el destino de Bajmut aún está en el aire. Como recordatorio, las fuerzas ucranianas han luchado durante meses para mantener la ciudad bajo su control, pero los rusos siguen presionando para tomarla, y la batalla por la ciudad ha alcanzado ahora su mayor nivel de intensidad. 

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