Bruselas y Washington buscan trabajar de manera conjunta para comunicarle a China las represalias en caso de que asistan a Moscú o le proporcionen equipo militar durante la invasión a Ucrania

La Unión Europea advertirá a China sobre las consecuencias de un posible apoyo a Rusia

AFP/LEON NEAL - El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, y el presidente de Francia, Emmanuel Macron, hablan con la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen

La Unión Europea pretende apoyar a Estados Unidos en las advertencias a China en caso de que intente ayudar a Rusia a eludir las sanciones impuestas por Occidente tras su ataque a Ucrania. En este sentido, se están coordinando de cara a la cumbre virtual que se celebrará con el gigante asiático a principios de abril. 

Joe Biden, presidente estadounidense, discutirá esta cuestión con los líderes europeos el próximo jueves en Bruselas. Bloomberg, agencia de noticias financieras, agregó que el mandatario espera “enviar un mensaje conjunto” a Pekín. La postura de China sobre el conflicto en Ucrania está en el punto de mira, y las relaciones con la UE atraviesan un momento clave.

El bloque europeo quiere alentar a China a adoptar una postura responsable, destacando el importante papel que juega en materia de defensa internacional. La invasión rusa será el tema central de las conversaciones entre Úrsula von der Leyen, líder de la Comisión Europea, y Xi Jinping, gobernante chino.

El presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, y el presidente de Estados Unidos, tras posar para la foto de familia al inicio de la cumbre del G7

Li Keqiang, primer ministro asiático, y Charles Michel, presidente del Consejo Europeo, también estarán presentes en esta reunión. La mayoría de los Estados miembros quieren que se aborde el tema desde una postura que no suponga una amenaza “ya que no quieren aislar a Pekín”. 

Un diplomático europeo dijo que la Unión Europea quería mantener su propio enfoque en lugar de repetir el planteamiento de Washington. Hasta ahora, China ha mostrado una postura neutral sobre la guerra entre Moscú y Kiev para evitar enfados con el Kremlin. Sin embargo, varios altos funcionarios han defendido la soberanía e integridad territorial de Ucrania.

Miembros del Ejecutivo de Biden han mostrado su frustración con la renuncia de la UE a alertar al país oriental sobre su comportamiento. La economía de Europa depende fundamentalmente de las exportaciones, por lo que está preocupada por las posibles repercusiones que puedan tener sus críticas públicas a la neutralidad de Xi Jinping.

Fotografía de archivo del presidente chino Xi Jinping y Joe Biden

Washington espera que Bruselas transmita un mensaje similar al suyo, tal y como afirmó un portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de Estados Unidos. Un factor condicionante para que se dé este hecho es la repetición de las teorías conspirativas rusas relativas al supuesto uso de laboratorios biológicos ucranianos por parte del territorio estadounidense. 

Por su parte, Naciones Unidas defiende que no hay pruebas que demuestren dicha afirmación y no descarta que Vladimir Putin, presidente ruso, aproveche para usar armas químicas o biológicas en Ucrania y acuse a otros.

China, asimismo, ha adoptado la narrativa anti-OTAN del Kremlin, y Xi Jinping, en una declaración conjunta con Rusia, se opuso a “una mayor expansión de la Alianza”. Sus diplomáticos culpan a Estados Unidos del enfrentamiento como resultado del crecimiento de la Alianza Atlántica. 

Los militares ucranianos inspeccionan la zona frente a un edificio de apartamentos residenciales después de que fuera alcanzado por los bombardeos mientras continúa la invasión rusa de Ucrania, en Kiev, Ucrania, 15 de marzo de 2022

Bloomberg señaló que Pekín ha intentado no adoptar con Europa las mismas relaciones que mantiene con Joe Biden. Los embajadores de la UE fueron informados de que la nación asiática no está eludiendo las sanciones impuestas por el bloque a Moscú. Numerosas empresas han suspendido temporalmente sus operaciones en Rusia.

También existe el temor de que las compañías orientales llenen el vacío dejado por las empresas occidentales que han cesado su actividad en territorio ruso. La posición de Bruselas ante el diálogo virtual con el mandatario chino dista de la mantenida en la última cumbre sostenida hace dos años. 

Ambas partes llegaron a un acuerdo de inversión en diciembre de 2020. Actualmente está congelado después de que China impusiera sanciones a legisladores europeos como consecuencia de las medidas tomadas por el bloque ante las supuestas violaciones de derechos humanos en Xinjiang, al noroeste del país. 

Desde entonces, la Unión Europea ha intensificado sus acciones contra el apoyo gubernamental que el Gobierno chino brinda a sectores económicos. Y “presentó una denuncia ante la Organización Mundial del Comercio por prácticas coercitivas de Pekín contra Lituania”. 

Úrsula von der Leyen y Charles Michel van a expresar su apoyo a la región lituana y se conoce que los Estados parte habrían solicitado informar sobre la recomendación de levantar las sanciones impuestas a Vilna. La cooperación en cuestiones como el calentamiento global o los derechos humanos van a ser otros temas tratados en la próxima reunión virtual.

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