Las Fuerzas de Movilización Popular atacan con drones el aeropuerto iraquí de Erbil
El aeropuerto internacional de Erbil, situado en el Kurdistán iraquí, ha sido objetivo de nuevos ataques perpetrados por drones cargados de material explosivo. La ofensiva ha causado un gran incendio en las inmediaciones del aeropuerto, pero por el momento se desconoce si el ataque ha dejado víctimas mortales o heridos.
Fuentes iraquíes afirman que el ataque ha sido ejecutado por milicias apoyadas por Irán, algunas de ellas estarían integradas en las Fuerzas de Movilización Popular (FMP), una coalición paramilitar iraquí integrada por una mayoría chií que tendrían como objetivo luchar contra el Daesh. Del mismo modo, esta brigada, considerada como un grupo terrorista por parte de Estados Unidos, Emiratos Árabes y Japón, cuenta entre sus filas con grupos sunníes, cristianos y yazidíes.
La Movilización Popular se opone a la presencia estadounidense en Iraq “ya que sus líderes han acogido en repetidas ocasiones los recientes ataques a bases militares iraquíes que incluyen estadounidenses”, según un informe de la Agencia France-Presse. Estas milicias no han estado exentas de críticas ya que se les acusa de asesinato a activistas y a manifestantes durante las protestas sociales que se han producido contra el Gobierno en los últimos meses.
Según ha informado el Consejo de Seguridad de la Región del Kurdistán, al menos 20 cohetes y 3 drones habrían impactado en las inmediaciones, sin embargo, la coalición estadounidense afirma que tan solo un dron llego a impactar contra el aeropuerto.
De acuerdo con el portavoz de la coalición internacional contra el Daesh, Wayne Marotto, “aproximadamente a las 23:15 (hora local), drones han impactado en las cercanías de la base área de Erbil”. Junto a esto, una fuente de seguridad iraquí afirmó que “las sirenas sonaron en el consulado de Estados Unidos en Erbil después de que el aeropuerto fuera blanco de un ataque con misiles”. Este ataque se habría producido en el aeropuerto que más próximo se encuentra a una base militar de Estados Unidos, coincidiendo con la retirada de las tropas estadounidenses de Iraq y Afganistán.
El gobernador de la región, Omed Khoshnaw, ha calificado la ofensiva como un “ataque terrorista” y ha confirmado que la población está “completamente controlada”, de acuerdo con el portal de noticias iraquí Basnews. Junto a esto, el ataque se ha producido un día después de que la embajada de Estados Unidos en Iraq confirmara que sus sistemas de defensa habían derribado “una amenaza aérea” contra un edificio, así como otro ataque de cohetes contra la base militar de Ain Al Asad, una base aérea situada en la Gobernación de Ámbar que opera en conjunto con las Fuerzas Armadas iraquíes y las Fuerzas Armadas estadounidenses.
Desde principios de año, Estados Unidos ha sido el blanco de 45 ataques, especialmente de ataques ejecutados contra la embajada de EE. UU y contra la conocida como “Zona Verde”. Este término, acuñado por la jerga militar, hace referencia a la zona más segura de Bagdad después de la invasión de Iraq de 2003. En este sentido, Estados Unidos ha respondido en varias ocasiones con bombardeos contra posiciones de las FMP. El último registrado se ha producido a finales de junio en la frontera entre Siria e Iraq, dejando varios muertos. Tras este ataque las FMP prometieron responder contra objetivos estadounidenses.
En este sentido, las autoridades iraquíes han tratado de disuadir a los perpetradores de los ataques indicando que algunas facciones leales a Irán se habrían afiliado a las Fuerzas Oficiales iraquíes o tienen contactos y relaciones con ellas.
En relación con estas ofensivas, Estados Unidos ha mostrado en diversas ocasiones su preocupación a la hora de combatir el Daesh. La coalición liderada por Estados Unidos cuenta con un despliegue de 2.500 soldados en Iraq de los 3.500 miembros totales de la coalición. Estas acometidas han matado a dos contratistas extranjeros, nueve iraquíes y ocho civiles.
