El Ministerio de Asuntos Exteriores dijo que se han reunido los funcionarios de la Embajada de Corea del Sur en Irán con los tripulantes a bordo del petrolero surcoreano incautado por Teherán.
La reunión se llevó a cabo el miércoles durante más o menos dos horas dentro del barco incautado en el puerto Shahid Rajaee, en la costa sur iraní. Los funcionarios de la Embajada revisaron las condiciones de salud y seguridad de la tripulación. El capitán aseguró que su tripulación estaba sana y salva y pidió al Gobierno que siguiese con los esfuerzos para la liberación de todos los tripulantes.
Irán anunció a principios de esta semana que liberaría a la tripulación del petrolero surcoreano incautado el 4 de enero. Sin embargo, a pesar de sus declaraciones, informó Seúl este jueves que el personal todavía sigue a bordo del barco.
A principios de año, el Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica se apoderó del petrolero Hankuk Chemi, cargado con 7.200 toneladas de productos químicos, acusándole de contaminar las aguas, y arrestó a la tripulación multinacional. Entre ellos se encontraban 20 marineros de los cuales cinco son surcoreanos, once birmanos, dos indonesios y dos vietnamitas; cerca del estratégico estrecho de Ormuz.
El Gobierno de Corea del Sur dijo que, a cambio de la liberación de la tripulación, había prometido una acción rápida para abordar las quejas de Irán. Ya que ésta no tiene la capacidad para acceder a 7.000 millones de dólares en dinero iraní que ha sido congelado en los bancos de Corea del Sur debido a las sanciones estadounidenses impuestas por el expresidente Donald Trump.
No quedó claro cuándo se liberarían los tripulantes, pero Irán dijo que el barco y su capitán iban a permanecer bajo su custodia. Pues Teherán está en espera de una investigación sobre lo que los iraníes han descrito como violación de la ley de contaminación marítima, motivo por el cual dicen que incautaron el barco.
Aunque retendrán el buque y a su capitán, se le había otorgado a la tripulación permiso para abandonar el país “en un movimiento humanitario” dijo el Ministerio de Relaciones Exteriores de Irán el martes.
El jueves dijo el Ministerio de Relaciones Exteriores de Seúl que todos los miembros de la tripulación permanecieron a bordo. Según los informes de Corea del Sur, la liberación parcial puede complicar la situación ya que el barco necesita personal para mantenerlo.
“El Ministerio de Relaciones Exteriores está discutiendo con la compañía petrolera sobre el desembarco y el regreso de la tripulación y hará esfuerzos para asegurar la liberación del capitán y del barco lo antes posible", dijo un comunicado.
Un representante de la compañía de buques tanque, DM Shipping dijo que nada era seguro a pesar del anuncio de Teherán de que la tripulación sería liberada. “Las discusiones para su regreso aún están en curso. No se ha decidido si devolverán el 100 por ciento”, agregó.
El expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, retiró a Washington en 2018 de un acuerdo nuclear histórico con las potencias mundiales y luego volvió a imponer y reforzar sanciones paralizantes contra Irán.
Irán fue un proveedor de petróleo clave para Corea del Sur, que tiene pocos recursos, hasta que las reglas de Washington bloquearon las compras. Sin embargo Teherán ha negado repetidamente cualquier vínculo entre la incautación del barco y la cuestión de los fondos.