Marruecos construirá el puente más largo de África
Desde que en 2015 el rey Mohamed VI destacara en su discurso por el 40º aniversario de la Marcha Verde la infraestructura viaria Tiznit-Dajla, con un 70% de los trabajos ya realizados, el proyecto está avanzando constantemente. Este proyecto fue objeto de un acuerdo de colaboración firmado en febrero de 2015 entre tres Ministerios (Ministerio del Interior, Ministerio de Economía y Finanzas y Ministerio de Equipamiento, Transporte, Logística y Agua) y cuatro regiones por un importe de 8.500 millones de dirhams. Marruecos espera que el proyecto sea un catalizador para atraer inversión y contribuir al desarrollo socioeconómico de las cuatro regiones.
Esta preveía inicialmente un periodo de ejecución entre 2016 y 2021. La fase de estudio se completó entre 2016 y 2018, la fase de lanzamiento de licitaciones y aprobación de contratos entre 2017-2018 y la fase de obra se puso en marcha en 2017. Pese a que en enero de 2020 el ministro de Transporte Abdelkader Amara afirmó que el proyecto cumpliría con los plazos previstos, un año más tarde, destacó que su departamento es “muy firme” con las empresas que trabajan en el proyecto en cuanto a los plazos. “Podemos entender ciertas limitaciones vinculadas a las conexiones de agua y electricidad, pero si las empresas no respetan los plazos y muestran grandes retrasos, veremos rescindidos sus contratos”, prometió el año pasado.
Sin embargo, la pandemia de COVID-19 fue una de las limitaciones que Amara no predijo. Según la tasa de finalización anunciada recientemente, la pandemia parece haber retrasado significativamente el proyecto.
A través de 1.055 kilómetros, la carretera es una de las más largas de Marruecos y cuenta con planes para construir otras 12 grandes estructuras más. Las instalaciones tienen como objetivo reducir el tiempo de viaje entre las provincias del sur del país y las del norte.
Una de las obras de ingeniería más importantes del proyecto será el viaducto que atravesará el rio Sakia el-Hamra que eludirá El Aaiún. La estructura de 1.725 metros será el puente más largo del continente africano según Novek, la consultoría de ingeniería marroquí responsable de los estudios de diseño preliminares. El objetivo de la autopista no solo será mejorar la comunicación entre el sur y el norte del país, sino que se establece una red de autopistas de gran calidad que evitarán que sucesos como inundaciones puedan interrumpir la actividad económica y comercial del Reino. Además, la autopista está a punto de cumplir las normas internacionales, al tiempo que garantiza un alto grado de seguridad, según el Gobierno de Marruecos. Se espera que no sólo permita un mayor acceso al Sáhara Occidental, sino también al África subsahariana.
Según el comunicado del Ministerio de Logística, el desarrollo de este eje viario, que constituirá una importante palanca inversora, tendrá un impacto positivo y directo en una población de más de 2,2 millones de habitantes, repartidos en 10 provincias y contribuirá al desarrollo socioeconómico de cuatro comarcas del Reino, a saber: Souss-Mássa, Guelmim-Oued Noun, El Aaiún-Sakia El Hamra y Dajla-Oued Eddahab.
El proyecto se desarrolla en dos grandes partes diferenciadas, cada una de las cuales tiene diferentes especificidades técnicas, naturales y socioeconómicas: la vía rápida entre Tiznit y El Aaiún compuesta por el tramo Tiznit-Guelmim entre el punto kilométrico 0 y el punto kilométrico 114, con una circunvalación de la ciudad de Tiznit y la ciudad de Guelmim que se desarrolla sobre un nuevo tramo de paso en zona montañosa, y el tramo Guelmim-El Aaiún entre el punto kilométrico 114 y el punto kilométrico 520 que linda con la RN1 con algunas rectificaciones de la ruta cuando se encuentran restricciones para su construcción debido a factores como lo son el relieve, pendientes peligrosas, tramos de muchas curvas, etc.). Dentro de dicho megaproyecto también se incluyen planes para la creación de equipamientos periféricos como estacionamientos para camiones y áreas de descanso.
