Moscú alcanza las peores cifras de coronavirus desde el comienzo de la pandemia
El verano en Rusia ha comenzado con cifras realmente preocupantes respecto a la pandemia del coronavirus. En las últimas 24 horas se han registrado 601 fallecimientos, convirtiéndose en el número más alto en lo que llevamos de año. La capital, Moscú, también causa inquietud al alcanzar las peores cifras desde que comenzó la pandemia. Los positivos por coronavirus han aumentado entre un 11% y un 20%. Por esta razón, las autoridades moscovitas han ordenado la vacunación de al menos el 60% de las personas que trabajan en sectores de servicios.
“En vista de la compleja situación epidemiológica, la jefa de Sanidad de la ciudad de Moscú decretó la vacunación obligatoria de los empleados de los sectores de servicios”, anunció el alcalde de Moscú, Serguéi Sobianin. Según los datos del Ayuntamiento, en la capital hay entre 3,5 y 4 millones de trabajadores, por lo que deben ser vacunados más de 2 millones, lo que correspondería al 60% necesario.
“En las últimas 24 horas murieron más de 70 personas. La mayoría de ellas ni siquiera hubieran enfermado si se hubiesen vacunado a tiempo”, señaló el alcalde después de anunciar la orden de vacunación. No obstante, tal y como indicó el Centro Levada en una encuesta realizada en mayo, el 62% no están dispuestos a vacunarse con la Sputnik V, la vacuna desarrollada por Rusia. El presidente ruso, Vladimir Putin, ha instado en varias ocasiones a los ciudadanos rusos a que se vacunen. “Está confirmada una eficacia del 97% por los expertos”, declaró Putin. El pasado mes de mayo Rusia anunció la Sputnik Light, una nueva vacuna de una sola dosis que busca acelerar el proceso de vacunación.
Otra de las medidas impuestas por las autoridades afecta a la hostelería. Los bares y restaurantes solo pueden atender a las personas que presenten un código QR que demuestre que han sido vacunados, que están inmunizados o que han dado negativo en una prueba PCR recientemente. Asimismo, hasta el 29 de junio están prohibidos los eventos masivos con una asistencia de más de más de 1.000 personas.
La situación en los hospitales moscovitas también es preocupante. Tal y como ha advertido Anastasia Rakova, teniente alcalde del Ayuntamiento de Moscú para el Desarrollo Social, “dentro de dos o tres semanas ya no quedarán camas libres en los hospitales”. Los ingresos hospitalarios de personas en estado grave han aumentado en un 70% en los últimos días, algo calificado por Sobianin como un “incremento explosivo”.
San Petersburgo, que es sede de la Eurocopa, presenta una situación similar a Moscú. Las autoridades finlandesas han detectado casi 100 casos de coronavirus en aficionados del país que asistieron al partido entre Finlandia y Bélgica. “Es importante que toda persona que vuelva de Rusia se haga una prueba”, aseguró Sanna Marin, primera ministra finlandesa. El aforo en el estado petersburgués se completó al 50% del total con 35.000 personas. La ciudad del báltico volverá a albergar otro partido el próximo 2 de julio.
Buryatia, una zona del interior de Rusia cercana a Mongolia ha decretado un confinamiento a raíz del incremento de casos de COVID-19. Esta región registró más de 200 contagios la semana pasada, frente a los 90 que hubo a principios de mes, según informa Associated Press. Buryatia es la única región rusa que ha ordenado varios confinamientos desde que comenzó la pandemia. El resto del país solo ha tenido un confinamiento colectivo, aunque el portavoz de Kremlin, Dmitry Peskov, informó que se está barajando otro cierre nacional.
En estos últimos días, Rusia ha alcanzado los 5,4 millones de casos de coronavirus. Esto lo convierte en el sexto país del mundo en número de contagios, después de Estados Unidos, India, Brasil, Francia y Turquía. Además, hay que sumar la amenaza que supone la variante Delta, responsable del 90% de los contagios de Moscú.
