La toma de posesión del presidente Raissi coincide con las críticas del líder supremo a las negociaciones de Viena con los estadounidenses

Raisí, ratificado presidente de Irán exhibe su desconfianza hacia Occidente

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El clérigo ultraconservador Ebrahim Raisí, que fue ratificado este martes como el nuevo presidente de Irán, mostró su desconfianza hacia Occidente en un momento de escalada de la tensión con Estados Unidos y otros países. 

Frente al aperturismo que caracterizó a su predecesor, el moderado Hasan Rohaní, durante cuyo primer mandato se firmó el histórico acuerdo nuclear de 2015, Raisí se inclina por apostar por las capacidades internas y las relaciones con los países vecinos.

Esta idea de no depender de Occidente se basa en las sanciones impuestas por EEUU tras retirarse unilateralmente en 2018 del citado pacto nuclear, que ahora intenta restablecerse mediante negociaciones en Viena.

AFP PHOTO / HO / KHAMENEI.IR - El líder supremo de Irán, el ayatolá Alí Jamenei
Un equilibrio complejo 

"Buscaremos por supuesto la eliminación de las sanciones crueles, pero no condicionaremos la economía y las necesidades de la población a la voluntad de los extranjeros", subrayó en un discurso durante su ceremonia de ratificación Raisí, que está de hecho sancionado por EEUU.

Las negociaciones, que tienen el objetivo de lograr el regreso de Washington al acuerdo y el levantamiento de sus sanciones, así como el cumplimiento por parte de Teherán de todos sus compromisos, han quedado en suspenso debido al traspaso de poder en Irán. 

EEUU ya ha dejado claro que las negociaciones no pueden quedar en este impasse por mucho tiempo, aunque sigue abogando por la vía diplomática, pese al incremento de la tensión en los últimos días tras el ataque del pasado 29 de julio contra un buque cisterna operado por una firma israelí.

En el ataque murieron un ciudadano británico y otro rumano, miembros de la tripulación, y tanto Israel como EEUU, el Reino Unido y Rumanía han responsabilizado a Irán, que ha negado cualquier implicación.

El secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, prometió ayer "una respuesta colectiva" a esta agresión, perpetrada con un dron frente a la costa de Omán.

Además de afrontar estas crisis en el plano internacional, Raisí tiene también innumerables retos internos, ya que la crisis económica y los cortes de electricidad y agua han generado recientemente protestas populares en el país.

PHOTO/DELEGACIÓN DE LA UE EN VIENA - El secretario general adjunto del Servicio Europeo de Acción Exterior (SEAE), Enrique Mora, y el adjunto iraní en el Ministerio de Asuntos Exteriores, Abbas Araghchi
La población quiere "un cambio"

Según el clérigo rigorista, que hasta hace poco era el jefe del Poder Judicial, "lo que la población quiere del nuevo gobierno es un cambio" y la solución de problemas acuciantes como el déficit presupuestario, la inflación, la pandemia de la COVID-19 y los cortes de electricidad y agua, entre otros.

"El mensaje de los ciudadanos en las elecciones fue una petición de justicia, de lucha contra la corrupción y la pobreza, y de implementación de las políticas del sistema de la República Islámica y de los valores de la Revolución", agregó Raisí. 

El clérigo obtuvo casi el 62 % de los votos en las elecciones del pasado junio, que estuvieron marcadas por la ausencia de una real competencia y por la baja participación, que con un dato del 48 % fue la menor de todas las presidenciales de Irán.

Su llegada a la presidencia se interpreta como un paso más en su meteórica carrera para suceder al líder supremo Alí Jameneí, quien designó a Raisí en sus dos anteriores puestos y hoy confirmó su elección como jefe del Ejecutivo.

Jameneí destacó en su decreto de aprobación que el nuevo presidente tiene "un brillante historial de gestión para seguir el luminoso camino de la Revolución (Islámica de 1979)".PHOTO/DELEGACIÓN DE LA UE EN VIENA - El secretario general adjunto del Servicio Europeo de Acción Exterior (SEAE), Enrique Mora, y el adjunto iraní en el Ministerio de Asuntos Exteriores, Abbas Araghchi

Rápida formación del Gobierno 

En un discurso durante la ceremonia, a la que asistieron las principales autoridades políticas y militares del país, el líder supremo aseveró que "el cambio de poder crea esperanza" entre la población y urgió a la formación del nuevo gobierno "lo antes posible".

"Las condiciones del país exigen que no se retrase la formación del gobierno. Tanto el presidente como el Parlamento deben apresurarse a presentar y aceptar a los ministros", apostilló.

También aconsejó a Raisí que para mantener su popularidad luche contra la corrupción y "esté entre la gente, sin privilegios de clase o grupo político".

La economía iraní está hundida y la moneda nacional muy devaluada frente al dólar debido a las sanciones estadounidenses, pero también a la deficiente gestión interna y a la corrupción.

Rohaní entregó hoy la oficina de la presidencia a Raisí y la ceremonia de toma de posesión ante el Parlamento se celebrará el próximo jueves, 5 de agosto, con la presencia de delegaciones extranjeras

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