Rusia continúa transportando armas a través de sus barcos mercantes
Un barco mercante ruso, que se encontraba bajo sanciones estadounidenses, habría salido de Siria y atravesado el estrecho del Bósforo con armamento para continuar la invasión sobre Ucrania. Según funcionarios europeos, el barco, llamado Sparta II, habría transportado vehículos militares con el objetivo de reforzar la invasión rusa en ese esfuerzo por parte de Rusia de seguir buscando armamento militar.
De acuerdo con los funcionarios, este viaje demostraría los deseos de Moscú por seguir obteniendo recursos en un momento en el que la guerra entra en su sexto mes. En este sentido, mientras que Ucrania ha ido recibiendo de manera sistemática miles de millones de dólares en armamento por parte de Estados Unidos, Rusia ha tenido que hallar sus propios recursos para seguir protagonizando la invasión, tratando además de seguir fortaleciendo sus relaciones con países aliados como es el caso de Siria.
De hecho, es en este país donde Putin mantiene tropas desde que ordenó una operación militar en el año 2015, en el marco de la guerra civil siria, para apoyar y reforzar la presencia del presidente sirio, Bachar al-Asad, contra los rebeldes, entre los que se encontraba el Ejército Libre Sirio. En este sentido, en el año 2017, el ministro de Defensa ruso, Serguéi Shoigu, explicó que los militares rusos habrían probado en Siria más de 160 tipos de armamento avanzado, entre los que se incluían aviones de combate, tanques, métodos de guerra electrónica, misiles guiados por láser y sistemas de defensa aérea.
Según la inteligencia estadounidense, Rusia habría estado utilizando estos buques mercantes para transportar carga militar al mar Negro y habría conseguido acumular grandes cantidades de armamento, en el marco de un programa que habría tenido como objetivo modernizar el arsenal ruso durante la última década. Sin embargo y a pesar de sus políticas de Defensa, según han revelado funcionarios estadounidenses y europeos, Rusia habría perdido durante sus ofensivas un importante número de carros y vehículos blindados de transportes, lo que le habría obligado al Kremlin a recurrir a sus reservas de equipos más antiguos, incluyendo los tanques T-62.
Al igual que ha ocurrido con Rusia, Ucrania no ha revelado la magnitud de sus pérdidas militares. De acuerdo con declaraciones emitidas por el presidente de Ucrania, Volodímir Zelensky, en una entrevista para el Wall Street Journal, las bajas ucranianas en el campo de batalla “se habrían reducido a unas 30 al día” en comparación con las 100-200 que se registraron en los meses de mayo y junio, una cifra que no ha sido verificada oficialmente, pero que demuestra los esfuerzos ucranianos por seguir resistiendo ante un enemigo mucho mayor que, sin embargo, todavía no ha conseguido vencer.
