Fuentes diplomáticas turcas dijeron a la AFP que los contactos continuarán en Atenas, aunque sin fecha prevista

Termina la 61ª ronda de conversaciones sobre el Mediterráneo oriental entre Grecia y Turquía 

photo_camera TURKISH FOREIGN MINISTRY / REUTERS - Representantes de Grecia y Turquía en una reunión para tratar las disputas marítimas entre ambos países, este lunes en Estambul. 

En la reunión mantenida entre Grecia y Turquía el lunes con motivo de las exploraciones turcas de hidrocarburos en el Mediterráneo oriental, Turquía aseguró que quería “solucionar los problemas”.  

Diplomáticos de ambos países se reunieron en Estambul para tener “contactos exploratorios” con el fin de averiguar si de verdad pueden sentarse en el futuro a cerrar un acuerdo satisfactorio para las partes. De esta forma Ankara y Atenas reactivaron el diálogo paralizado desde el año 2016.  

"Resolver todos los problemas, incluidos los del mar Egeo, es posible y nuestra voluntad de lograrlo es total. La paz y la estabilidad regionales son de interés para todos", dijo en Twitter el portavoz del presidente Erdogan, Ibrahim Kalin.  

Turquía llevaba meses desafiando a Grecia enviando varias misiones de exploración de gas, provocando una crisis diplomática sin precedentes desde 1996, cuando los dos países de la OTAN estuvieron al borde del conflicto armado. En medio de la tensión de los meses pasados, Atenas decidió comprar 18 aviones de combate Rafale a Francia en respuesta a las provocaciones turcas.   

Hasta que la Unión Europea no anunció sanciones contra Ankara, las autoridades turcas no han hecho por rebajar la tensión. Y es que en estos momentos la imposición de sanciones a Turquía podría ser muy dañino para su economía, estancada desde hace tiempo. De momento, en diciembre la UE aprobó sanciones dirigidas a funcionarios involucrados en las actividades de exploración en el Mediterráneo oriental.  

Aunque las partes expresaron su “optimismo” y “esperanza” y elogiaron el “ambiente positivo”, la reunión no dejó grandes avances. Y es que ni si quiera se habían puesto de acuerdo en los temas a tratar. Grecia tan solo quería dialogar sobre la delimitación de la plataforma continental de sus islas en el mar Egeo, mientras que Turquía quería ampliar las conversaciones para definir las zonas económicas exclusivas y el espacio aéreo de los dos países. 

Por otro lado, el jefe de la diplomacia turca, Mevlut Cavusoglu, no vio con buenos ojos las futuribles pretensiones de Grecia de duplicar la extensión de sus aguas territoriales en el Egeo al igual que ha hecho en el Jónico tras un acuerdo firmado con Italia. Algo perfectamente legal en el derecho internacional pero que Ankara ve como una provocación.  

PHOTO/DARIO PIGNATELLI  -   El presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, y la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, y el ministro de Asuntos Exteriores turco, Mevlut Cavusoglu 
Kastellorizo en el foco 

La crisis que se venía arrastrando desde hacía meses se intensificó cuando Ankara ordenó el envío del buque exploratorio Oruç Reis a las aguas de la isla griega de Kastellorizo.  

Grecia ha acusado reiteradamente a Turquía de violar sus fronteras marítimas, pero Ankara considera que la presencia de este islote no puede justificar su exclusión de una gran parte del Mediterráneo oriental.  

De momento, Turquía seguirá por la senda de rebajar la tensión para evitar nuevas sanciones de la Unión Europea aunque las conversaciones no prometen ser fáciles. Mientras tanto, las autoridades turcas ya se preparan para un enfriamiento de la relación con Estados Unidos, ya que no se prevé que la nueva administración sea tan permisiva con Erdogan. De momento las únicas declaraciones al respecto son las del nuevo portavoz del Departamento de Estado, Ned Price, que en su cuenta de Twitter manifestó su apoyo a “todos los esfuerzos para reducir tensiones en el Mediterráneo oriental”.  

En diciembre del año pasado, Joe Biden dijo en una entrevista para el New York Times que Estados Unidos debía cooperar con la oposición turca para sacar a Erdogan del poder. Palabras que no fueron bien recibidas ni en el oficialismo ni en la propia oposición.  

Más en Política