Abocar a Rusia a un incesante desgaste empieza a pasar factura a su presidente Vladimir Putin. Un centenar de concejales de 18 distritos de las ciudades de Moscú y San Petersburgo han exigido la renuncia de Putin a través de una declaración pública donde lo acusan de “alta traición” por comenzar una guerra que afecta directamente a los ciudadanos rusos.
“Nosotros, los diputados municipales de Rusia, creemos que las acciones del presidente Vladimir Putin dañan el futuro de Rusia y sus ciudadanos. ¡Exigimos la renuncia de Vladimir Putin al cargo de presidente de la Federación Rusa!”, se lee en la publicación. Los firmantes basan la petición en que en “la operación especial militar” hay “indicios de un crimen contemplado por el artículo 73 de la Constitución de la Federación Rusa de alta traición”, un argumento que gana fuerza cada día.
Esta oposición abierta a Putin ha ido sumando adeptos desde que comenzara el pasado día 7 de septiembre, cuando la junta del distrito Lomonosovksy, en Moscú, exigía su renuncia aprovechando la ausencia de varios diputados del partido oficialista Rusia Unida. Una iniciativa a la que se unían también los diputados del distrito de Smolny y Kolpino, en San Petersburgo.
“Son cada vez más los diputados que se suman a la demanda de que Vladimir Putin dimita”, comentaba a la prensa Dmitri Paliuga, autor de la iniciativa y diputado municipal en San Petersburgo. Los motivos expuestos son claros: “Estamos en contra de matar ucranianos, desmilitarizar Ucrania es absurdo y encima ha pasado lo contrario, ahora tiene más armas”, ha señalado.
Мундепы требуют отставки Путина
— Ксения Торстрем (@kseniathorstrom) September 12, 2022
Муниципальные депутаты из 18 разных округов Москвы, Петербурга и Колпино требуют отставки Путина. Текст петиции лаконичный, никого не “дискредитирует”. Если вы мундеп и хотите присоедниться - милости просим. pic.twitter.com/APCUZRlznv
Sin embargo, los concejales no son los únicos que han pedido cuentas a Putin. El escalabro que están protagonizando las tropas rusas en Ucrania ha hecho también que parte del entorno del mandatario demandase el cese de miembros del alto mando, del Ministerio de Defensa e incluso de la Inteligencia militar. En última instancia son éstos los responsables de haber caído en la trampa de la estrategia ucraniana que establecía un supuesto ataque en otras regiones lejos de Járkov y por la que los rusos habían desplazado sus tropas de allí. Ahora, los últimos reductos rusos en esta región ya se han retirado, y Ucrania sigue ganando terreno.
Además, la invasión en Ucrania no es la sola la razón por la que los cargos públicos piden la dimisión de Putin. Los ediles también denuncian que desde su segundo mandato “ha ido todo mal”: el PIB no se ha duplicado, el salario mínimo no ha aumentado y la estabilidad ha desaparecido. Todo ello gracias, según los concejales, a que la política de Putin está “anticuada”, “irremediablemente desactualizada y obstaculiza el desarrollo de Rusia”.
Y es que Putin ha conseguido prácticamente lo contrario a lo que se proponía con la invasión. Ahora, Ucrania posee más armas de las que tenía y la frontera de la OTAN se ha duplicado con el ingreso de Suecia y Finlandia a la Alianza Atlántica.
Pero desbancar a Putin es tarea prácticamente imposible: la moción promete un breve recorrido político. El petersburgués, además de ser el líder del partido que domina la Duma, Rusia Unida, el mismo partido que ha ganado las elecciones este pasado 11 de septiembre, lleva al frente del Kremlin desde el año 2000 y, según la reforma constitucional, podría permanecer en su cargo hasta 2036. Unas condiciones que no permiten en absoluto una desestabilización en su mandato.
Pero a lo que sí se teme es a que se extienda la protesta. Un supuesto contra lo que ya está trabajando la propia Policía rusa, al advertir a los firmantes de la moción que se enfrentan a “cargos legales” por desacreditar al Gobierno”. El propio Paliuga ya ha sido citado para comparecer ante un tribunal de San Petersburgo por, supuestamente, desprestigiar al presidente ruso.