Zelenski pide a las empresas internacionales que abandonen Rusia para no ser “cómplices de los crímenes de guerra”

La pequeña ciudad suiza de Davos se ha convertido de nuevo –tras dos años de parón – en escenario de encuentro del Foro Económico Mundial. Una cumbre anual que, también conocida como Foro de Davos, reúne a más de 1 250 líderes y empresarios del sector privado y a cerca de 50 jefes de Gobierno, además de delegaciones nacionales, analistas y expertos de la economía internacional, que pretenden abordar y dar respuesta a las cuestiones más críticas de cada año. 

El encuentro de este año, que se celebrará entre los días 23 y 26 de mayo y que estará marcado, como es de esperar, por la evolución de la guerra en Ucrania, ha sido inaugurado con la intervención del presidente ucraniano Volodímir Zelenski por videoconferencia. 

“La historia está en un punto de inflexión”, apuntó el mandatario. “Realmente, este es el momento en que se decide si la fuerza bruta gobernará el mundo”. Por ello, Zelenski no dudó en pedir a los asistentes, una vez más, la imposición de “sanciones convincentes” que debiliten a Rusia y pongan fin a su ofensiva. Unas “sanciones máximas al petróleo, bloquear todos los bancos sin excepción, cortar su acceso a la tecnología y la retirada plena de todas las empresas extranjeras en el mercado ruso para no ser cómplices de crímenes de guerra”, dijo el líder ucraniano. 

“Si el agresor lo pierde todo, se quedará, entonces, sin su motivación para iniciar una guerra”, subrayó.

A cambio, Zelenski ha ofrecido a los representantes de las principales empresas internacionales “seguir operando en Ucrania, un mercado de más de 40 millones de personas” donde formarían parte de la reconstrucción de ciudades enteras tras la guerra. Y aunque el mandatario ucraniano haya reconocido y agradecido la ayuda recibida hasta el momento, ha subrayado que su país necesita financiación. “Por lo menos 5 000 millones de dólares al mes”, ha afirmado. 

“Debieron actuar antes con Rusia. Si hubiera habido una acción preventiva nos habríamos ahorrado muchas vidas”, fue uno de los principales reproches del ucraniano durante su intervención. 

Una de las propuestas sobre la mesa para la financiación de la reconstrucción ucraniana es la utilización de los activos congelados de los dirigentes y oligarcas cercanos al Kremlin. “Los activos rusos confiscados o congelados tienen que destinarse a un fondo especial para ayudar a todos aquellos afectados por la guerra”, proponía Zelenski. 

Por su parte, en una reunión del Foro Davos sin delegaciones ni empresas rusas invitadas, Borge Brende, presidente de la organización económica, propuso la adopción de un “Plan Marshall” para la recuperación de Ucrania. “Incluso sin un acuerdo de paz, que es poco probable en este momento, debemos comenzar a trabajar en la reconstrucción, al menos en los territorios bajo el control de Ucrania. Necesitamos un Plan Marshall para Ucrania”, dijo Brende en una entrevista para el diario alemán Süddeutsche Zeitung. 

Una de las cuestiones más importantes derivadas de la guerra ha sido la drástica disminución de la exportación de trigo ucraniano al resto de países. Unos suministros vitales para gran parte de esta comunidad internacional. “Los rusos han bloqueado nuestros puertos, nos están robando los cereales día tras día”, respondió Zelenski a la pregunta del alemán Klaus Schwab, fundador del Foro Davos.

“La prioridad es que puedan funcionar nuestros puertos bloqueados en el mar Negro (…). Tenemos que ponernos de acuerdo en la creación de un corredor, de manera que Rusia no pueda oponerse”, instó el mandatario, aprovechando para mencionar las conversaciones a este respecto con varios líderes mundiales, especialmente de los países bálticos. 

Y mientras Davos acoge al Foro Económico Mundial, la guerra en Ucrania roza ya los tres meses y las cifras de muertos no dejan de crecer. La situación de los ucranianos atrapados en Mariúpol amenaza con epidemias por la insalubridad, y, en Járkov, 150 cadáveres han sido recuperados por el Servicio Estatal de Emergencia durante las labores de limpieza de escombros. 

Por ello, al mismo tiempo que Zelenski hablaba para los asistentes al Foro Davos, la Defensora del Pueblo de Ucrania, Lyudmila Denisova, inauguraba la “Casa de los Crímenes de Rusia”, también en Davos. Una exposición de mapas, fotos vídeos y testimonios de las víctimas civiles de los ataques rusos, simbólicamente ubicada en la que, por muchos años, fue “la Casa de Rusia”. 

“Nuestra intención es transmitir la verdad sobre los crímenes cometidos por Rusia en Ucrania, porque en muchos países se reciben informaciones a través de las noticias o redes sociales, pero nosotros estamos aquí y queremos exponer la verdad desde dentro, desde nuestra experiencia de primera mano”, explicó Denisova a la agencia de noticias EFE.