Irán: opresión y robo incesantes a los trabajadores bajo el régimen de los mulás

La brutal opresión y el robo de los trabajadores por el régimen clerical se intensifican día a día. Su poder adquisitivo disminuye, sus mesas se vacían y cada vez son más los que engrosan las filas del paro. Al mismo tiempo, el presupuesto oficial y oficioso de la maquinaria represiva, belicista y terrorista de este régimen, en particular de los pasdaran, no deja de aumentar. A pesar de la falsa y abyecta propaganda del presidente del régimen, Ebrahim Raissi, sobre el apoyo a los trabajadores, su opresión nunca ha sido tan cruel como ahora. 

Según Seyyed Solat Mortezavi, ministro de Trabajo del régimen, el salario mínimo en 1402 (20 de marzo de 2022-20 de marzo de 2023), tras muchas negociaciones, solo aumentará un 27% y "pasará de 4.179.000 tomans a 5.308.330 tomans" (Agencia IRNA, 20 de marzo de 2023). 

Sin embargo, el centro de estadísticas iraní anunció una inflación de "más del 50%" y "en febrero de 2022, la inflación puntual de los hogares fue del 53,4%" (Arman Daily, 1 de marzo de 2022). El mismo centro anunció en su último informe que "la inflación de la vivienda en enero de este año aumentó un 66% en comparación con el mismo periodo del año anterior". (Mardom Salari, 1 de marzo de 2023). En la reunión del Consejo Municipal de Teherán, "se aprobó por unanimidad un aumento del 40% en las tarifas de autobús" (Agencia SNN, 14 de marzo de 2023). 

Según los medios de comunicación oficiales:

• "Los precios de todos los productos han aumentado al menos un 70-100%" (Ebtekar, 1 de marzo de 2023). 
• En ningún periodo histórico se ha registrado una hiperinflación alimentaria semejante, ni siquiera durante la ocupación del país durante la Segunda Guerra Mundial. Sin embargo, la tasa de inflación alimentaria superó el 71% en febrero" (Mardom Salari, 1 de marzo de 2023). 
• "El análisis de los precios de 11 productos seleccionados muestra que han aumentado 12 veces de media desde 2018 hasta marzo de este año. Mientras que el salario mínimo solo ha aumentado unas seis veces desde 2018." (Ressalat de 6 de marzo de 2023). 
• "De 2018 a septiembre de 2022, los precios de la vivienda en Teherán aumentaron un 750%". (Periódico Eskanas de 1 de marzo de 2023). 
• "Un trabajador tiene que pagar de media más de ocho millones y 883 mil tomanes al mes para alquilar un piso de 70 metros cuadrados en Teherán" (Periódico Sharq, 2 de marzo de 2023). 
• "El coste de la cesta de subsistencia de los trabajadores ha subido ahora a más de 17.840.000 tomans". (Diario Javan, 16 de marzo de 2023). 

Así, según las cifras oficiales, el aumento de los salarios de los trabajadores si están empleados es entre un 25 y un 45% inferior a la tasa de inflación. Al mismo tiempo, según los apartados 1 y 2 del artículo 41 de la Ley del Trabajo del propio régimen, el salario mínimo debe estar "en consonancia con la tasa de inflación" y ser "suficiente para mantener a una familia cuyo número medio anuncien las autoridades oficiales". 

Por supuesto, este exiguo salario no se paga a los trabajadores. "Miles de trabajadores de todas partes del país están esperando cobrar salarios atrasados de 3 meses, 7 meses y 15 meses. Además, miles de trabajadores, bajo la sombra de contratos temporales, precarios y desprotegidos, realizan su trabajo por la mañana con el temor de quedarse sin empleo al día siguiente, y los accidentes laborales siguen cobrándose víctimas debido a la inseguridad del entorno laboral" (periódico Etemad, 1 de mayo de 2022). 

Debido a que los gobernantes del régimen y especialmente los comandantes de los pasdaran se han apoderado de las principales instituciones económicas y de producción, han aniquilado las organizaciones sindicales, reprimen a los trabajadores que se atreven a protestar y eliminan los derechos de los trabajadores con crueldad y brutalidad.    

Todos los logros de la Organización Internacional del Trabajo y las normas de derechos mínimos de los trabajadores han sido anulados por este régimen: 

• Los trabajadores iraníes no tienen seguridad laboral, están entre los dos filos de una tijera, de un lado un salario miserable y del otro el despido. 
• No hay leyes que protejan a los trabajadores y en todos los litigios judiciales todo va en su contra y a favor del empresario.  
• Los trabajadores y sus familias no tienen seguro médico ni pensiones. 
• En la práctica, los trabajadores no tienen derecho a formar un sindicato independiente y registrado ni a tener su propio representante elegido. Solo se permite la existencia de consejos obreros islámicos, formados por el régimen. 
• El impago de los salarios de los trabajadores se ha convertido en la norma, y los trabajadores esperan a veces hasta 15 meses para recibir sus escasos salarios. 
• Las unidades de trabajo no son seguras y, según Ali Hossein Ra'iti, viceministro de Trabajo, "unos 800 trabajadores mueren cada año por accidentes laborales en el país" (ISNA, 7 de mayo de 2022). Por supuesto, muchos miles de trabajadores también quedan discapacitados.  

Durante los 44 años de fascismo religioso, los trabajadores se han empobrecido cada año y están más desempleados que el año anterior. La única manera de acabar con esta brutal y creciente opresión es derrocar este régimen. Esta es la campaña por la que varios grupos, incluidos los trabajadores, protestaron en las calles de Irán durante el levantamiento nacional de 2022/2023 con los lemas "abajo Jamenei" y "abajo el dictador".