Opinión

Suiza se ofrece para reunir las partes en conflicto en el Sáhara Occidental

photo_camera Western Sahara

El ofrecimiento hecho por el Gobierno federal suizo “a las partes en conflicto” en la crisis del Sáhara Occidental parece destinado al fracaso. Mientras que el Gobierno de Marruecos ve la propuesta con interés, el Frente Polisario guarda silencio y Argelia ha respondido por la negativa. “La fórmula de mesas redondas está destinada al fracaso, y nuestro país no la acepta”, ha declarado Amar Belani, representante especial del presidente argelino Abdelmadjid Tebboune para la cuestión del Sáhara Occidental.

El Gobierno suizo ha mostrado su predisposición a acoger nuevos encuentros entre los cuatro invitados en discusiones anteriores, Marruecos, Mauritania, Argelia y el Frente Polisario, tras el nombramiento del diplomático italo-sueco Staffan de Mistura como enviado especial del secretario general de la ONU, António Guterres, para el Sáhara Occidental. 

La novedad sin embargo de esta oferta suiza, y que curiosamente está siendo pasada bajo silencio por las otras partes, es que Suiza ha incluido por primera vez a “otro interlocutor saharaui”, además del Frente Polisario, en la misiva informadora sobre la propuesta helvética. 

En efecto, la responsable del Departamento para Oriente Medio y África del Norte de la Cancillería suiza, Maya Tissafi, ha dirigido un escrito al responsable de relaciones internacionales del Movimiento Saharauis por la Paz (MSP), Mohamed Abdullah, en el que reitera la convicción del Gobierno suizo de que “solo a través de la negociación se podrá alcanzar una solución política justa, perdurable y mutuamente aceptable”.

La novedosa gestión de la oferta de encuentros a celebrar en territorio suizo ha creado un fuerte malestar tanto en Argel como en Tinduf, porque por primera vez un Gobierno cuestiona ‘de facto’ la representatividad única de la población saharaui por el movimiento Frente Polisario. La embajadora Maya Tissafi no dice en su carta que el MSP también va a ser invitado, pero el hecho de incluirle entre los destinatarios de la información significa que considera que “representa un sector saharaui” a tener en cuenta. 

Antes de fin de mes deberá reunirse el Consejo de Seguridad, y la Resolución que adopte sobre el Sáhara Occidental será considerada como la propuesta de plan de actuación del nuevo enviado especial, bien acogido por Marruecos, Mauritania y el MSP saharaui, pero con clara desconfianza por parte de Argelia y del Frente Polisario.