¿Cómo ha cambiado la pandemia la oferta de cursos universitarios en el Golfo?
Con el semestre actual terminando, muchas instituciones de educación superior en el Golfo ya están planeando una oferta ampliada de cursos para el próximo año académico, con un enfoque en apoyar las necesidades de la economía pospandémica de la región.
Como OBG detalló a principios de este año, las consecuencias económicas de la COVID-19 han alentado a las instituciones de educación superior en el Golfo a adaptar sus ofertas de cursos para ayudar a impulsar la recuperación económica de sus respectivos países.
La pandemia de coronavirus destacó y acentuó la importancia de los sistemas digitales en muchas áreas de la vida. Como resultado, ha habido un aumento en los cursos orientados digitalmente en todo el Medio Oriente.
Por ejemplo, en el semestre de otoño, que comienza a fines de agosto, la Canadian University Dubai lanzará una serie de nuevos cursos en los campos de la ciberseguridad, el diseño de software y la informática.
Mientras tanto, además de sus cursos existentes en áreas como tecnología de la información, robótica, ciencia de datos y gestión de redes y computación en la nube, Middlesex University Dubai lanzará nuevos cursos tanto en ingeniería electrónica como en ciberseguridad y pruebas de penetración, que capacitan a los estudiantes en el campo de la seguridad de la red.
Aparte de los nuevos cursos, varias instituciones educativas han reforzado o ampliado sus ofertas existentes en la esfera digital.
"Para garantizar que los graduados estén preparados para la próxima revolución digital y puedan trabajar en entornos multidisciplinarios en varias industrias, los programas académicos deben proporcionar una base digital, así como opciones para especializarse más en un dominio específico", señaló a OBG Muhammad al-Saggaf, presidente la King Fahd University of Petroleum & Minerals de Arabia Saudí.
“Esto permitirá a los futuros empleadores desempeñar funciones particulares, en ciberseguridad o análisis de datos, por ejemplo, con graduados que ya estén bien versados en la materia, ya sea ingeniería o finanzas, y en habilidades digitales, sin la necesidad de una amplia labor en la empresa o capacitación".
Otro ámbito que está experimentando un mayor interés entre las universidades es el de la tecnología financiera.
Inmediatamente después del brote del virus, los sistemas de pago en línea y digitales se consideraron cruciales, ya que ayudaron a los consumidores a pagar los bienes esenciales y, al mismo tiempo, se adhirieron a las pautas de distanciamiento social. Como resultado, los pagos en línea han aumentado tanto en importancia como en frecuencia durante los últimos 18 meses.
“En el sector financiero, la tecnología está reescribiendo las reglas del juego, y la competencia está impulsada por la aparición de empresas disruptivas. Esto debe reflejarse en los programas académicos”, dijo a OBG Anis Moosa al-Lawati, decano de la Facultad de Estudios Bancarios y Financieros (CBFS) de Omán.
“CBFS solía enfocar sus programas e investigaciones en el sector bancario, pero ahora estamos ampliando nuestras actividades para atender también las necesidades de los actores financieros no bancarios, asegurando que nuestros graduados tengan las habilidades necesarias”.
Aparte de las áreas estrictamente tecnológicas y centradas en TI, las instituciones educativas han dado mayor importancia a una serie de otros problemas como resultado de los desarrollos relacionados con la pandemia.
Por ejemplo, entre sus nuevos cursos, la Gulf Medical University, ubicada en Ajman en los Emiratos Árabes Unidos, ofrece un programa de doctorado dual en Medicina de Precisión, junto con una Maestría en Ciencias en Descubrimiento y Desarrollo de Medicamentos. Mientras tanto, dada la presión que los diversos bloqueos globales ejercen sobre el movimiento de bienes y recursos, la Universidad de Sharjah ofrece por primera vez cursos de ingeniería química y de desalinización de agua, así como gestión de la cadena de suministro.
En muchos casos, estos cambios hacia campos específicos complementan las estrategias gubernamentales de desarrollo a largo plazo.
Este es un tema particularmente urgente para el Golfo, donde varios países ya han lanzado planes a largo plazo para aliviar su dependencia de los hidrocarburos. En Arabia Saudí, por ejemplo, el Gobierno lanzó su plan de desarrollo económico Visión 2030 en 2016, que esbozó un plan para impulsar la economía no petrolera y aumentar la participación del sector privado.
"En la Universidad Prince Muqrin, el enfoque en las prioridades de desarrollo del país ha dado como resultado universidades y programas especializados en turismo, TI y ciberseguridad e ingeniería, que son campos con un fuerte potencial de inversión", indicó Ahmad Hawalah a OBG en marzo, vicerrector de Desarrollo Empresarial de la Universidad Prince Muqrin.
En otros lugares, algunas instituciones educativas han establecido academias especializadas en asociación con empresas líderes del sector privado para ayudar a abordar las necesidades del mercado laboral.
Un ejemplo de ello es Bahréin, donde el Politécnico de Bahréin lanzó su Academia de Inteligencia Artificial, en colaboración con Microsoft y la organización gubernamental Tamkeen, en septiembre del año pasado.
La academia, la primera de su tipo en la región, ofrecerá un programa especializado diseñado para mejorar las capacidades de innovación y creatividad en el campo de la inteligencia artificial.
