Argelia y la supuesta conspiración separatista apoyada por Israel
Desde Argelia se ha hablado en las últimas horas de una trama contra la nación de la que formaría parte supuestamente Israel. Según una televisión argelina, como publicó el medio Al-Arab, se habría neutralizado una “conspiración organizada por una red terrorista con apoyo de la entidad sionista y un Estado norteafricano”.
Según esta información, "los conspiradores tenían previsto realizar un acto armado dentro del territorio nacional con la complicidad de partidos separatistas internos", sin ofrecer más detalles y derivado todo de confesiones de elementos involucrados en esta "conspiración", como recogía el medio Al-Arab.
Esta filtración podría formar parte de una presunta desviación de atención ante los problemas que padece la nación argelina, con contratiempos económicos relacionados con la caída de mercados energéticos como el del gas, y con protestas ciudadanas representadas en el movimiento Hirak, que ha venido denunciando durante años la corrupción pública y la mala gestión realizada desde el poder.
El régimen argelino puede verse aislado internacionalmente ahora, sobre todo viendo como su vecino Marruecos viene llevando a cabo una gran labor diplomática con apoyos importantes como el de Estados Unidos o Emiratos de cara a su fórmula de solución del conflicto del Sáhara Occidental basada en una amplia autonomía de la región bajo soberanía marroquí y viendo también los últimos encontronazos diplomáticos con Francia, y puede utilizar alguna crisis para enmascarar todo esto, como la última relacionada con una supuesta conspiración para atacar Argelia, tras la cual estaría presuntamente Israel.
Precisamente, Israel está ahora consolidando muchos lazos diplomáticos con varios países árabes tras la firma de los Acuerdos de Abraham, incluido el gran desarrollo de vínculos que está habiendo con Marruecos, gran rival político de Argelia en la zona del Magreb, y esto podría aislar todavía más al país argelino en relación con el plano internacional.
A pesar de tener grandes reservas gasistas, Argelia, que es el décimo mayor productor de gas del mundo, está atravesando por problemas económicos derivados de una gestión ineficiente, según han apuntado diversos analistas, y, además, padece inconvenientes políticos relacionados con la dirección tomada por el régimen; una gestión muy criticada desde varios sectores de la población. Por otro lado, el país norteafricano ve cómo otras naciones están progresando más tanto interna como externamente, como es el caso de Marruecos.
Argelia criticó las relaciones políticas establecidas entre Marruecos e Israel, auspiciadas por Estados Unidos siguiendo la estela de los Acuerdos de Abraham, y también vio como una amenaza las palabras del ministro de Exteriores israelí, Yair Lapid, quien indicó durante una visita al reino alauí que estaba preocupado por el “creciente acercamiento” entre Argelia e Irán. En este sentido, desde el régimen argelino se teme seguir perdiendo protagonismo en el continente africano y en el panorama internacional, sobre todo teniendo en cuenta los progresos que sigue realizando Marruecos en todos los sentidos.
Incluso Marruecos intentó un acercamiento cuando el rey alauí, Mohamed VI, lanzó un mensaje conciliador después de la toma de posesión de Abdelmadjid Tebboune como presidente de Argelia, pero sus esfuerzos no fueron correspondidos. En su felicitación dirigida a Tebboune, el rey Mohamed VI solicitó "abrir una nueva página en las relaciones entre los dos países vecinos, sobre la base de la confianza mutua y el diálogo constructivo", como recordaba también el medio Al-Arab.
