Argentina y México se alían con la dictadura nicaragüense ante la Organización de Estados Americanos
La organización Human Rights Watch criticó el miércoles el voto de Argentina y México en la Organización de los Estados Americanos sobre Nicaragua, y definió el voto emitido por los dos territorios como “penoso”. El director ejecutivo para las Américas, José Vivanco, compartió en su cuenta de Twitter un mensaje sobre el comunicado emitido por la Cancillería argentina: “Penoso reportado de México y Argentina sobre el caso en Nicaragua. Una cosa es buscar una salida negociada a esta crisis y otra bastante distinta dichos disparates”.
El martes, Argentina y México se manifestaron en oposición a intervenir en asuntos internos de Nicaragua, lo cual los llevó a ser las ovejas negras dentro de la resolución debatida en el Consejo Permanente de la Organización de Estados Americanos. Los dos Estados manifestaron además su desacuerdo con la “pretensión” de “imponer pautas a partir del exterior o de prejuzgar indebidamente el desarrollo de procesos electorales”. “En este entorno, no nos ha sido viable escoltar el plan de resolución puesto a importancia hoy en el Consejo Permanente de la OEA . El Consejo Permanente de la Organización de los Estados Americanos abordó el martes en una sesión extraordinaria el caso en Nicaragua, luego de que el secretario general del organismo, Luis Almagro, instase a utilizar la Carta Democrática Interamericana por la represión que se ha generado contra la oposición nicaragüense.
Con 26 votos a favor, 3 en contra y 5 abstenciones, el organismo aprobó la resolución: “La Situación en Nicaragua”, que, entre otros puntos de vista, condena “inequívocamente el arresto, acoso y limitaciones arbitrarias impuestas a los precandidatos presidenciales, a los partidos políticos y a los medios de comunicación independientes” y solicita “la instantánea liberación de los precandidatos presidenciales y de todos los presos políticos”. El lunes, el régimen de Daniel Ortega defendió los arrestos de diversos líderes opositores, directamente de cuatro aspirantes a la Presidencia y dos históricos exguerrilleros, exigió la “no injerencia de cualquier Régimen extranjero” en sus asuntos internos, a solo 5 meses de los comicios en los cuales Ortega, quien llegó a la Presidencia en el 2007, busca una nueva reelección que varios organismos internacionales han denunciados como ilegales.
Mientras tanto, desde Washington, el miércoles, el secretario de Estado de EEUU, Antony Blinken, indicó que “no hay condiciones” para unas “elecciones justas y libres” en Nicaragua e instó a la “liberación inmediata” de los cuatro candidatos presidenciales.
Blinken manifestó su “contundente respaldo” a la resolución aprobada este martes por una extensa mayor parte compuesta por 26 países en la Organización de Estados Americanos (OEA) que exige “la rápida liberación de los precandidatos presidenciales y de todos los presos políticos”. "Dada la reciente represión del régimen y su falta de una reforma electoral profunda, las condiciones para unas elecciones justas y libres este noviembre no existen”, indicó el jefe de la diplomacia estadounidense.
La nueva legislación aprobada en Nicaragua rechaza a quienes "lideren o financien un derrocamiento... dinamicen obstrucciones remotas, soliciten la intervención militar... propongan u organicen barricadas financieras, recomienden y pidan la carga de sanciones contra Nicaragua o sus ciudadanos". Los culpables "serán traidores a la patria, y por ello no podrán presentarse a cargos públicos". La traición se castiga con penas de cárcel de hasta 15 años. Ortega ha capturado hasta ahora a cuatro potenciales candidatos de la oposición que podrían haber desafiado su opción para un cuarto mandato continuo, y actualmente numerosos líderes de la resistencia nicaragüense temen que sea como una cuestión de tiempo hasta que la Policía venga a por ellos.
Coordinador América Latina: José Antonio Sierra
