Ambas son economías abiertas, diversificadas, con un clima empresarial favorable, similares en términos de tamaño y desarrollo económico y unas sólidas perspectivas a medio plazo

Crédito y Caución espera un fortalecimiento comercial entre Emiratos e Israel

photo_camera AFP/JACK GUEZ - Un avión Boeing 787-9 "Dreamliner" de Etihad Airways muestra las banderas israelí y emiratí tras aterrizar a su llegada desde los Emiratos Árabes Unidos (EAU) en el aeropuerto israelí Ben Gurion, cerca de Tel Aviv

En agosto de 2020, Emiratos Árabes Unidos e Israel firmaron un histórico tratado que supuso la normalización de sus relaciones diplomáticas y económicas. Los cinco meses posteriores han propiciado acuerdos entre sus agencias de crédito a la exportación y cámaras de comercio, la apertura de embajadas, la operativa de vuelos comerciales regulares y unos 280 millones de dólares en comercio mutuo. Según diversas fuentes, a medio plazo el comercio bilateral podría alcanzar entre 4.000 y 6.500 millones de dólares, lo que supone entre el 1% y el 1,5% del PIB de cada país. 

En términos de tamaño y desarrollo económico, Emiratos e Israel son muy parecidos. Ambas son economías abiertas y diversificadas, con un clima empresarial favorable y unas sólidas perspectivas económicas a medio plazo. Tienen un PIB de unos 400.000 millones de dólares y sus poblaciones, relativamente pequeñas, disfrutan de una alta renta per cápita. Las ratios de importación y exportación de Israel se acercan al 30% del PIB. En el caso de los Emiratos, estas ratios son aún más elevadas, debido a sus grandes volúmenes de reexportación. Aunque la pandemia mundial seguirá siendo un lastre para el consumo privado y la demanda externa a corto plazo, Israel y Emiratos son los dos principales ejemplos de la rápida implantación de la vacuna contra el coronavirus, lo que incide en sus perspectivas de recuperación. Ambas economías están bien diversificadas, lo que implica, potencialmente, que tienen mucho que ofrecerse mutuamente en términos de elección de productos. Para impulsar el comercio, ambos países acordaron estudiar la posibilidad de reducir los aranceles de importación y las medidas no arancelarias en sectores estratégicos. A medio plazo podría negociarse un acuerdo de libre comercio más completo.

El primer embajador de los Emiratos Árabes Unidos (EAU) en Israel, Mohammed Al-Khajah, pronuncia un discurso a la llegada de un avión Boeing 787-9 "Dreamliner" de Etihad Airways procedente de los Emiratos Árabes Unidos (EAU) al aeropuerto israelí Ben Gurion, cerca de Tel Aviv, en el primer vuelo comercial regular de la compañía desde Abu Dabi, el 6 de abril de 2021

Alrededor de un tercio del total de las exportaciones israelíes puede calificarse de alta tecnología, y este porcentaje aumenta hasta casi la mitad si se excluyen las exportaciones basadas en recursos. La cuota de importación de productos de alta tecnología de Emiratos ha pasado de menos del 15% a casi el 20% en los últimos diez años, coincidiendo con su aceleración de la diversificación económica. Las empresas emiratíes pueden satisfacer la demanda israelí de aluminio, cerámica y otros materiales de construcción, mientras que las israelíes pueden ayudar a Emiratos a avanzar en el campo de la alta tecnología.

El fortalecimiento de la moneda israelí, impulsado por los ingresos del gas, es un potencial problema de competitividad internacional en otros sectores de exportación como el manufacturero. Desde 2016 los productos israelíes se han encarecido un 20% con respecto a los emiratíes. El shekel continuará fortaleciéndose gradualmente, lo que en algún momento podría expulsar a las empresas israelíes del mercado de Emiratos. Otro riesgo, bajo pero que no puede ser descartado, es que la nueva relación no sea duradera. El interés que ambos países no está perfectamente alineado. Una de las principales motivaciones del compromiso de Israel es la expansión del comercio y la inversión: Emiratos es un centro de comercio regional desde el que Israel obtiene un punto de apoyo esencial en Oriente Medio y el Norte de África. Por su parte, Emiratos podría utilizar a Israel como puerta de entrada al Mediterráneo y al resto de Europa, pero esto es menos crucial. Por ello, Emiratos sería más propenso a incumplir los nuevos acuerdos de cooperación en caso de que aumenten las tensiones geopolíticas. No obstante, Crédito y Caución prevé que la cooperación se intensifique a largo plazo. El camino está siendo seguido por otros países árabes, como Bahréin, Marruecos o Sudán, lo que hace más difícil el retroceso individual.

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