El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, consideró posible una próxima visita de su homólogo israelí, Isaac Herzog, en el marco de la mejora de las relaciones entre ambos países, tensas desde el ataque israelí al buque Mavi Marmara en 2010.
"Hemos tenido conversaciones con Herzog, tal vez podría venir de visita a Turquía. El primer ministro (Naftali) Bennett también tiene una postura positiva en este punto", dijo Erdogan en una rueda de prensa con su homólogo serbio, Aleksander Vucic, en Ankara, transmitida en directo por la cadena NTV.
Aunque Turquía ha sido un histórico aliado de Israel, la última visita de un jefe de Estado israelí a Turquía tuvo lugar en 2007, y tras el ataque israelí al buque Mavi Marmara en aguas internacionales ante Gaza, en el que murieron diez activistas turcos, ambos países entraron en una fase de relaciones tensas.

Tras años de negociación, en 2016 los embajadores volvieron a sus puestos, pero en 2018, tras los disturbios que siguieron al reconocimiento estadounidense de Jerusalén como capital israelí, Turquía volvió a expulsar al legado israelí.
Pese a la falta de representación diplomática, las relaciones comerciales entre ambos países han seguido creciendo.
En los últimos meses, Turquía está apostando por retomar relaciones con varios países de la región con los que ha tenido graves desencuentros, como Egipto o Armenia.

El acercamiento con Israel se inscribe en la reducción de tensiones en el Mediterráneo oriental, donde Grecia, Chipre, Israel y Egipto han mostrado cierta unidad frente a las pretensiones turcas de buscar yacimientos de gas natural en una zona reclamada por Atenas y han proyectado un posible gasoducto desde Israel a Grecia.
Erdogan subrayó la reciente retirada del apoyo estadounidense a este proyecto como un factor que facilita el acercamiento entre Turquía e Israel para proyectar un gasoducto a través de territorio turco.