Los iraníes se rebelan y ponen en jaque a la teocracia iraní
No es la primera vez, ni será la última. Los iraníes se levantan en contra de la opresión del Gobierno y de una teocracia obsoleta en el tiempo y el espacio. La República Islámica de Irán vive una revolución interna. Cientos de miles de civiles, especialmente los jóvenes - cerca del 88% de la población se encuentra por debajo de la línea de los 54 años- protesta en las calles de las principales ciudades a raíz del asesinato a golpes y por las autoridades iraníes de la estudiante de etnia kurda Mahsa Amini, quien fue detenida el pasado 13 de septiembre por “llevar mal colocado el hijab”, según fuentes policiales.
Ese día, Amini, acudió a visitar a su familia y fue detenida a la salida de una estación de metro de Teherán por la policía religiosa islámica iraní, llamada oficialmente Gasht-e Ershad (Patrullas de Orientación) o ‘Policía de la Moral’. Amini fue acusada de infringir la ley que obliga a las mujeres a cubrirse el pelo con un pañuelo, y los brazos y las piernas con ropa holgada. La joven, de 22 años, falleció en hospital de Teherán, tras pasar tres días en coma tras su detención.
#shiraz
— Afshin Ismaeli (@Afshin_Ismaeli) September 28, 2022
Medicine university students demand release of prisoners.
They chant “women, live and freedom”.#Mahsa_Amini #مهسا_امینی #IranProtests #IranProtests2020 pic.twitter.com/NR38j62nVd
Desde entonces, decenas de miles de ciudadanos extienden sus reclamos por todo el país. Sin embargo, el choque con las fuerzas policiales, que emplean la brutalidad para reprimir las protestas, es de tan calibre que hasta el momento se contabilizan casi 80 fallecidos, todos ellos manifestantes, según las organizaciones no gubernamentales que actúan en el país. De entre todos los fallecidos destaca el caso de Hadas Najafi, otra joven de 22 años que ha sido asesinada por la ‘Policía de la Moral’ el pasado 21 de septiembre, día en el que se manifestaba, y fue alcanzada por una perdigón metálico, según afirman fuentes cercanas a la víctima.
Raha Bahreini, investigadora de Amnistía Internacional sobre Irán, ha confirmado la existencia de decenas de muertos y cientos de heridos: “Las pruebas que hemos recogido sobre el terreno muestran que las fuerzas de seguridad están disparando perdigones metálicos - como el que alcanzó supuestamente a Hadas Najafi-, que se utilizan para cazar, contra los manifestantes y a los transeúntes. Cientos de mujeres, niños y hombres han resultado heridos. Hemos visto imágenes horribles de manifestantes con heridas en la cabeza, el pecho y el estómago. Las fuerzas de seguridad están disparando perdigones metálicos a corta distancia y esto demuestra la intención de causar el máximo daño”.
Watch to the end.
— Masih Alinejad ?️ (@AlinejadMasih) September 27, 2022
“I am a transgender person and as you know LGBT community in Iran is suffering a lot so I joined the protest to show our solidarity with #mahsaAmimi . Just recently 2 women from LGBT received death sentence. We want freedom and dignity.#مهسا_امینی pic.twitter.com/ZKIytbqSak
Sin embargo, pese a las bajas civiles y el terror sembrado por las autoridades, las protestas se han intensificado en las últimas semanas por todo el país, debido al incremento de la opresión de la ‘Policía de la Moral’. Según un exmiembro de la Guardia Revolucionaria, cuya identidad no será revelada por su seguridad, cuenta a ATALAYAR: “Ya estamos jodidos. Nos están matando”. La fuente que narra los atroces actos que están ocurriendo en las calles de Irán se encuentra en estos momentos fuera de su país de origen de forma temporal, alejado de las calles de Teherán al temer por su propia vida.
The scenes in Iran are astonishing. How far will these protests go?
— Frida Ghitis (@FridaGhitis) September 20, 2022
pic.twitter.com/AJeHB0yyYB
Por otro lado, la influencer Majo Clutet, que se encontraba en Irán durante el comienzo de la barbarie narra a través de su red social Instagram: “Por primera vez extrañé estar en mi país donde la lucha feminista tiene grandes conquistas. Extrañé la libertad de expresarme a través de las redes sociales. Entrañé salir a las calles a manifestarme sin tener miedo a que me maten. En Irán están matando a gente valiente que sale a las calles porque no aguanta más. Algunas zonas ya están siendo militarizadas. Su gente está siendo censurada. ¡Es importante que levantemos la voz!”.
Pero tendrá que ser tras las fronteras de un país al que, de nuevo, ha llegado el apagón de internet, lo que permite que las fuerzas de seguridad intensifiquen una represión que ya está siendo sangrienta.
#karaj —#IranProtests against #MahsaAmini's murder continue on the 12th day.
— Afshin Ismaeli (@Afshin_Ismaeli) September 27, 2022
Activists are reporting an intense atmosphere of anti-regime protests.#Mahsa_Amini #مهسا__امینی #IranProtests #IranProtest2022 pic.twitter.com/8uepYer97D
Irán desconecta de nuevo el acceso a internet, limitando de esta forma la libertad de información y expresión de sus ciudadanos. El acceso a las redes sociales ha quedado restringido, aun así, los manifestantes no se doblegan y han advertido que el Gobierno ha comenzado a emplear Telegram como ‘arma’ disuasoria para identificar y dañar a los manifestantes que marchan en las calles. De hecho, destaca el canal Setade114, que ha sido vinculado por los activistas al Gobierno iraní ha conseguido hasta 20.000 suscriptores. El objetivo: difamar el nombre de la víctima y la causa de las protestas. Según Mahsa Alimardani, investigadora y activista ubicada en la Universidad de Oxford: “Telegram es la tercera aplicación más utilizada y la segunda más importante de las redes sociales en Irán”.
#Breaking
— Sima Sabet | سیما ثابت (@Sima_Sabet) September 27, 2022
Protests continued in many cities last night including Yazd, Bushehr, Tehran, Isfahan and many others. Internet hs been shut down in many areas.
The video showing security forces beating brutality a female protester in #Iran#Mahsa_Aminipic.twitter.com/cr4QEcT2gm
Mientras tanto, los basij, una fuerza paramilitar de milicianos voluntarios, han estado en la vanguardia de la represión de las protestas en curso, junto con el Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica (CGRI), una rama de las Fuerzas Armadas iraníes, sin obtener el éxito esperado. Según el Gobierno iraní, más del 65% de la población mayor de 15 años tiene una cuenta de Telegram, es decir, más de 55 millones de personas de los 85 millones de habitantes del país.
Sin embargo, pese a las restricciones el hastahg #mahsa_amini ha sido empleado estos días por más de 40 millones de usuarios en la red social Twitter y muchos jóvenes dentro del país ya usan sistemas VPN para escapar a los tentáculos de la falta de libertad de expresión.
Protestors in Iran chanting “unity, unity, unity…”
— Assal Rad (@AssalRad) September 28, 2022
We’ve seen how these protests cut across Iranian society in another slogan that expresses unity: “Don’t be afraid, we are together.” #IranProtests pic.twitter.com/3Q0jz6YuMc
Por su parte, la aplicación Signal ha realizado un llamamiento internacional para que se ayude a los iraníes a establecer servidores proxy después de que su servicio fuera prohibido en Irán, en un aparente intento de hacer frente a las protestas en curso por la muerte de Mahsa Amini. Según el comunicado de la aplicación: "Si configuras un proxy de Signal y quieres hacérselo saber al mundo, puedes usar el hashtag #IRanASignalProxy", explicó en un comunicado que ofrece detalles sobre cómo configurar el servidor proxy.
